Valparaíso es una de las ciudades favoritas para ir a turistear en Chile. Su estilo bohemio y sus hermosas playas la han hecho conocida a lo largo del país y en el resto del mundo. Tanto es un reconocimiento que National Geographic escribió un artículo aludiendo a su esencia.

Su posición y características geográficas la convirtieron en un puerto para barcos comerciales que cruzan el Atlántico y el Pacífico, a través del Estrecho de Magallanes, atrayendo una gran cantidad de inmigrantes que contribuyeron a la creación de la identidad de Valparaíso.

Su característica historia, ha contribuido al desarrollo de la identidad de esta ciudad, la cual se le conoce principalmente por sus atractivos turísticos y reconocidos personajes, que se pueden ver reflejados en las paredes de los cerros.

El arte de los grafitis

Las calles de la ciudad portuaria no se caracterizan por la infraestructura de sus edificios, sino por los colores de estas. En las casas antiguas, los edificios patrimoniales y las grandes escaleras que recorren sus cerros, los habitantes han dejado su marca a través del arte.

Con latas de pinturas y colores fuertes Valparaíso ha creado una imagen pintoresca y alegre de la ciudad. Identidad que no siempre es respetada. Muchas de las obras y murales que se pueden ver están vandalizadas con rayados y mensajes de todo tipo. “En la calle, lo único que tienes es tu reputación (…) Cuando alguien pinta sobre tu trabajo, es como escupirte en la cara”, afrima Al Rámirez, artista urbano de la zona.

Es tanta la importancia del grafiti para la indentidad cultural de la zona, que incluso las autoridades le han dado el reconocimiento que se merecen.

Actualmente, se registran más de 400 artistas en la ciudad portuaria. Debido a esto, se está trabajando en la creación del primer gremio de artistas urbanos de la capital regional. Proyecto a cargo del grafitero Al Martínez.

Deterioro de la ciudad

Al pasear por las calles de Valparaíso es imposible ignorar los grandes edificios que se encuentran abandonados y en mal estado.

Desde 1914, cuando se creó el Canal de Panamá y los comerciantes comenzaron a cambiar de ruta, Valparaíso comenzó a ver el abandono de su arquitectura. Problema que se puede ver hasta el día de hoy.

Su distribución también es un problema. La construcción desordenada de casas, hechas por los habitantes con materiales recogidos del puerto, crearon un laberinto unido por escaleras que recorren los cerros. Según el artículo de National Geographic, Valparaíso siempre fue una ciudad que “ha abrazado el caos”.

Turismo

Pese al evidente deterioro de la ciudad, Valparaíso vive del turismo que le entrega sus playas y atractivos turísticos. Además de sus 23 playas, la capital de la región tiene distintos puntos que hacen referencia a su historia y a los personajes que pasaron forman parte de su identidad.

Por ejemplo, la famosa casa de Pablo Neruda, La Sebastiana, la cual recibe a miles de turistas de Chile y del mundo, para conocer uno de los hogares del poeta. O sus famosos cerros, en los que abundan clásicos restaurantes y cementerios por los que se puede pasear.

Vida nocturna

Durante la noche, las calles de Valparaíso siguen despiertas para los turistas. Las abundantes opciones de bares abren sus puertas para ofrecerle a sus clientes sus carta de tragos y música en vivo, para seguir con la experiencia de pasear por la bohemica ciudad.

Entre los principales espacios para compartir un vaso con amigos, que recomienda National Geographic en su nota, está el Bar del Pisco, uno de los primeros lugares que empezó a servir el trago en Chile.

Hotelería

Encontrar lugar para hospedarse en Valparaíso no debería ser un problema para los turistas. En zona de la costanera o en los cerros que conforman la ciudad, hay una amplia oferta de hoteles, para que los viajeros paren a descansar.

El hotel Garden fue el más antiguo del que se tiene registro. Fue construido en 1870, para recibir a los visitantes que llegaban por negocios al puerto de Valparaíso. Hasta el día de hoy, el edificio continua recibiendo a los huespedes que quieren recorrer las empinadas calles de la ciudad.