El esperado y sorpresivo regreso de Twenty One Pilots a Lollapalooza Chile

Así como la ilusión de los fanáticos de Blink-182 se desvaneció abruptamente y sin consuelo al conocer la noticia de que la banda californiana no vendría a Chile tras la lesión del baterista Travis Barker, la llama se encendió con fuerza en los fanáticos de Twenty One Pilots, que pasaron de la breve inactividad –anunciada en pleno concierto en Brasil, en noviembre de 2022– al escenario principal de Lollapalooza 2023, este domingo.

“No muchas cosas podrían sacarnos de nuestro tiempo de descanso, pero la oportunidad de tocar para uno de los mejores fanáticos musicales del mundo es una razón”, escribieron en redes sociales tras el anuncio. Tal cual. La banda conformada por Tyler Joseph y Josh Dun estaba en un receso, lejos de los conciertos agendados para 2023, pero se convirtieron en el plato principal sin desearlo.

Un desafío al que la banda oriunda de Ohio ya está acostumbrada. Ya lo hicieron en la edición 2019 del festival, en el que desataron la locura entre los miles de espectadores que vitorearon cada canción y siguieron con atención la performance del dúo. Esa vez, el show partió con la chatarra de un auto en llamas, muchas luces de colores y estroboscópicas y los frenéticos ritmos que están acostumbrados a deleitar Joseph y Dun en sus conciertos.

En una entrevista con la revista británica NME en 2022, el propio Tyler Joseph abordó la sensación para ellos de ser parte de la primera línea de los grandes festivales. “Sentimos que, independientemente de que las otras bandas del día nos miren de esa manera o no, hay casi una responsabilidad de representarlas en el acto de cierre y, en realidad, tratar de asegurarnos de que te justifiques estando allí, porque es un honor. Al mismo tiempo, lo haces con la confianza de saber que perteneces a ese lugar y tienes que asumirlo para incluso tener las agallas en ese escenario”, reflexionó.

El origen de la banda

Antes de ser un dúo, Twenty One Pilots estaba conformado por tres integrantes: además de Tyler Joseph, los otros miembros eran Nick Thomas, quienes se conocieron jugando básquetbol en la adolescencia, y Chris Salih, con quien el fundador asistió a la escuela secundaria y preparatoria. Salih, de hecho, fue el que lanzó la idea a Joseph de crear una banda ya que tenía un sorprendente estudio de grabación casero y, en especial, luego de conocer el talento de su amigo en la música: y grabar sus primeros registros en 2007.

La pareja de músicos invitó improvisadamente a Thomas y terminaron los tres en una casa grabando su primer disco, de nombre homónimo, lanzado de forma independiente en 2009.

Pero en 2011, Thomas y Salih salieron del conjunto y llegó Josh Dun, el actual baterista de la banda.

¿Por qué Twenty One Pilots? La inspiración está en la obra de teatro All My Sons (1947) de Arthur Miller. Esta relata la historia de Joe Keller, un padre de familia que durante la Segunda Guerra Mundial vendía piezas defectuosas destinadas a fabricar aviones de guerra. Esto, sin embargo, terminó causando que varios aeroplanos se estrellaran y provocaran la muerte de 21 pilotos. Algo que determinó el nombre y el espíritu de la banda.

Cuando Dun se consolidó en la banda, Twenty-One Pilots lanzó su segundo disco, Regional at Best, en 2011 y su camino al estrellato se comenzó a forjar. Sin firmar con ningún sello, llenaron el Columbus Newport Music Hall que tiene una capacidad para 1.700 personas, un hito que atrajo la atención de varias firmas, entre ellos Atlantic Records, de Fueled by Ramen, que los fichó en 2012. Desde ese momento se cimentó el éxito planetario.

La propuesta del dúo

Imaginar una banda con apenas dos integrantes puede ser complejo. Pero cuando se desmenuza el talento que despliegan Tyler Joseph y Josh Dun tanto en el estudio como en los escenarios, se entiende el fervor de sus fanáticos.

La música experimenta el sincretismo de distintos estilos. No hay inconvenientes en pasar de letras rapeadas a una velocidad acelerada a melodías más indie o pop, u otras con voces más enérgicas y rockeras. Su estructura se basa en mezclas de piano con sintetizadores que incluyen recurrentemente batería y que ocasionalmente agregan ukelele, trompetas o bajo. Instrumentos que recurrentemente ejecuta Joseph en las presentaciones en vivo, además de la voz, mientras Dun golpea la batería.

Lo mismo pasa con sus letras, que suelen hablar de problemas mentales, ansiedad, pero también de amor. “The sun will rise and we will try again, stay alive, stay alive for me”, dice la cancion Truce. El vocalista ha señalado la importancia de hacer sentido en quienes lo escuchan.

“La música ha sido una especie de refugio donde podemos hablar de lo que queramos. Podemos decir cosas que no diríamos en una cena o en una conversación normal. Hay temas que son incómodos de sacar charlando con un amigo, pero cuando lo juntas con música, te permite crear una emoción que va más allá de las palabras en sí. Siempre nos ha interesado más la música con cierto nivel de profundidad”, dijo Dun en una entrevista con RockZone, en 2021.

Otra de las características de sus presentaciones en vivo son el espectáculo que realizan. Fuegos artificiales, luces de colores, escenografías completas que llenan el lugar de distintos estímulos. La presencia de disfraces, distintos colores e inclusos acrobacias hacen gritar constantemente al público.

Su último disco y el presente

En su regreso a Chile, Twenty-One Pilots trae el disco Scaled and Icy, un disco que dio cuenta de la versatilidad del dúo, pues está mucho más inclinado al pop y escondiendo un tanto sus rasgos de hip hop más experimentales. Más aún las letras de las canciones, que también dejan de lado las estrofas melancólicas y apuestan por construir nuevos himnos.

El propio Tyler Joseph lo explica en una entrevista con Billboard: “Cuando entré en mi estudio en el sótano, todos los días cruzaba ese umbral, se sentía como la decisión correcta de escribir algo que se sintiera fuera de la experiencia por la que todos, incluido el mundo entero, estaban pasando”.

El fundador agregó: “Se sentía como la dirección natural. Siempre hay algo que decir sobre cuándo se pone suficiente tiempo entre cuando creas algo y cuando puedes mirar hacia atrás”.

Por lo mismo, la estética del grupo y su desplante en el escenario se adecúa con estas nuevas canciones, como Choker o Bounce Man, dos temas mucho más relajados que registros pasados.

En su último concierto, la energía y emoción no escaseó: interpretaron sus clásicos hits como Car radio, Ride, Mulberry Street. En esa oportunidad también incluyeron un Campfire, donde interpretaron siete canciones con varios músicos alrededor de una fogata e instrumentos acústicos. Un concierto que conectó distintos ritmos y estados de ánimo y que promete repetirse en su regreso a Lollapalooza.