Nacional
3 de Mayo de 2023Revelan que dichos de Martorell en contra de Carabineros no coinciden con la versión de los uniformados por compra de cámaras Motorola
La abogada aseguró que los funcionarios policiales no tenían manejo de la tecnología. Sin embargo, de acuerdo a Radio Biobío, el mayor Manuel Arenas mencionó lo contrario.
La exsubsecretaria de Prevención del Delito del segundo mandato de Sebastián Piñera, Katherine Martorell, declaró el pasado 17 de marzo en calidad de imputada por el “Caso Motorola”.
El expediente que se abrió en 2020, acusa una irregular adquisición de cámaras corporales de la marca Motorola para Carabineros, donde el Estado desembolsó casi $400 millones de pesos en una licitación que fue declarada ilegal por el Tribunal de Contratación Pública (TCP).
En la audiencia, la actual comisionada experta por Renovación Nacional para escribir la Nueva Constitución 2023, mencionó que “no se pudo cumplir con los plazos por un tema exógeno”, ya que según ella, los funcionarios policiales tenían poco conocimiento de esta tecnología, según consignó El Mostrador.
Además, aseguró que la empresa no tuvo ninguna responsabilidad en la fallida implementación de estos dispositivos que entraron en desuso el 2022, tan solo 2 años después de haber comenzado a funcionar.
De acuerdo a Biobío, la versión de los hechos dada por Martorell causó gran molestia en Carabineros, ya que el testimonio se contrapone con lo que había declarado el mayor Manuel Arenas Yáñez en la misma investigación.
Según el mismo medio, el uniformado mencionó que habían recibido capacitaciones y recordó “haber asistido a unas seis o siete reuniones en las que participaban siempre las mismas personas por parte de la Subsecretaría de Prevención del Delito, del Departamento de Investigación, Desarrollo e Innovación de Carabineros (IDI) y de Motorola.
El funcionario aseguró que desde un principio ya había advertido de las fallas de los dispositivos. “No solo tenían un problema con la función post recording, sino que en mi opinión, habían problemas más graves como es la función o exigencia técnica de “trazabilidad” y de “encriptación”.
De acuerdo a Arenas, estas declaraciones que dejó por escrito le costaron su cargo laboral en el Centro de Control de Imágenes (Cencicar), ya que fue trasladado a una comisaría de Bajos de Mena en Puente Alto y posteriormente a Puerto Montt.
