Las reflexiones de la exPresidenta Bachelet antes del plebiscito: advierte sobre el auge de la “ultraderecha” en Chile

La expresidenta Michelle Bachelet estuvo por estos días en Colombia. En el marco de la Cumbre Nacional de Mujeres Electas, medida impulsada por el país sudamericano para garantizar los derechos de las mujeres, la exmandataria ha brindado una serie de entrevistas con medios locales.

En ese sentido, este martes se liberó una entrevista que cedió la excomisionada de DD.HH. de la ONU a El País Colombia, en donde aprovechó de postular sus impresiones sobre el auge de la ultraderecha en la región de América Latina, el efecto sobre los derechos de las mujeres de ese movimiento —este último tópico defendido fervientemente en la campaña del “En contra“— además de utilizar a Chile y su momento constitucional como ejemplo de su punto.

“Está el tremendo riesgo que estamos viendo en la región y en el mundo y es el crecimiento de la ultraderecha con una menor o con una cierta desafección con la democracia“, comentó Bachelet, en donde estableció que se hace necesario métodos de representación que auspicien la participación de los ciudadanos “porque la gente también tiene ideas de cómo resolver los problemas, quiere ser parte de la solución también“.

Al ser consultada por cómo que ese tema afecta a las mujeres, Bachelet ejemplificó con Chile: “Lo veo en mi propio país, a días de que se vote una propuesta constitucional que tiene una cantidad de cosas que son peligrosas para las mujeres, que van a significar retrocesos”.

Fue allí donde criticó la eliminación de la “igualdad salarial”, propuesta por la Comisión Experta en su momento, además de señalar que la protección a la vida de “quien” está por nacer —uno de los artículos más discutidos durante el proceso constitucional— está dirigido “aunque digan que no, pero saben que es así, a intentar eliminar la ley que yo pasé de Interrupción Voluntaria del Embarazo por tres causales”.

Diferencias de escrutinio

Además de lo anterior, la exmandataria postuló que existían desbalances en el trato por parte de la opinión pública cuando ella fue máxima autoridad del país.

En ese sentido, resaltó que “si mi antecesor en el primer mandato mostraba alguna emoción por algo, era un hombre sensible. Si yo mostraba emoción, era una histérica, una neurótica“.

A su vez, ejemplificó con otro caso: “Si había una temática compleja y yo consideraba que debía tomar espacio para tomar una decisión, era una indecisa; pero si tomaba una decisión rápida frente a un tema que creía claro, estaba improvisando o no había pensado suficientemente bien“.

“Es esta cosa brutal del patriarcado donde a las mujeres se nos trata como de segunda categoría”, sentenció.