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18 de Septiembre de 2024Comer con culpa en el 18: cómo la ansiedad puede jugar una mala pasada a la hora de sentarse en la mesa en las Fiestas Patrias
La culpa por comer en las fiestas dieciocheras y los días que las proceden se ha vuelto casi parte de la cultura conductual de los chilenos en septiembre. Pero estudios establecen que restringirse frente a la comida que está en el mismo lugar podría ser más perjudicial que comer lo que uno quiera en estas fechas.
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¿Qué es exactamente la culpa alimentaria? La culpa por la comida, se produce cuando una persona siente vergüenza, restricciones, privaciones y malos sentimientos sobre los alimentos que come o quiere comer, dice el National Institute of Health en Estados Unidos.
“La principal razón para sentir culpa es que este tipo de celebraciones viene de la mano con comer y tomar alcohol en cantidades abundantes”, dice Ana Paula Guerrero, nutricionista deportiva de la Universidad Católica y Vilbofit. “En el momento las personas sólo disfrutan, lo que está perfecto, pero pasado los días de fiesta, viene la culpa”.
Pero la culpa podría ser prevenida si durante las fiestas, si se mantienen hábitos saludables. “La próxima semana todos estarán hablando de dietas e iniciando planes de entrenamiento. Sin embargo lo correcto sería mantener siempre esos hábitos y que estos días de celebración, sean justamente eso, celebrar y disfrutar, sin estar pagando las culpas”, agrega la nutricionista.
Ahora, el celebrar sin culpa no es solamente un logro o una consecuencia. También, podría ser la prevención al círculo vicioso que se genera en torno a comer en exceso en estas fiestas. Esto, porque la culpa podría generar una restricción a comer, que puede ser más perjudicial que beneficiosa.
Un estudio de la Universidad de Leuven en Bélgica, comprobó que la restricción hacia un alimento genera mayor ansiedad por comerlo después. El estudio puso a prueba a sesenta y ocho mujeres. Las dividieron en dos grupos. Un grupo de tentación, a quien se les dio la instrucción de abstenerse de su snack favorito durante 24 horas mientras estaban expuestas a él. Y otro grupo de “control”, al que no se les dieron instrucciones específicas.
Después de la exposición a los alimentos, todos los participantes tuvieron libre acceso a los alimentos. Las participantes del primer grupo, comieron más snacks después de la abstinencia con exposición a la comida.
Los resultados mostraron que la prohibición con exposición puede ser contraproducente y aumentar el riesgo de pérdida de control sobre la conducta alimentaria. Esto, particularmente en grupos en riesgo de consumidores restringidos y desinhibidos.
Todos al gimnasio a pagar las culpa
“Definitivamente tiene un componente social importante el “bajar de peso” post Fiestas patrias”, dice Ana Paula Guerrero. “La fecha marca un antes y un después en el comportamiento de las personas en cuanto al peso y su condición física”.
Pagar las culpas en el gimnasio, según las publicaciones del Nurse Journal en Estados Unidos, podría estar potenciado por una narrativa social más que por un deseo real de estar saludable.
“Los mensajes de los medios basados en el miedo pueden hacernos sentir culpables por tener sobrepeso o no hacer suficiente ejercicio. El mensaje se dirige y nos anima a unirnos a un gimnasio, tomar lecciones de yoga o comprar equipos costosos. Evitar o reformular estas narrativas puede ser un desafío, pero es posible. Comer en exceso es normal y una parte natural de la experiencia alimentaria”, dice la nutricionista Katherine Metzelaar de la Universidad de Wahington.
“El estrés de restringir la comida y trabajar duro para evitar comer en exceso, siempre será más dañino que cualquier alimento que puedas comer durante las vacaciones”, enfatiza.
Por eso, aquí hay un par de reflexiones para el momento en que llegue la ansiedad por comer mucho en estas Fiestas Patrias. Ochsner Health es una organización sin fines de lucro que promueve la salud en Estados Unidos. A través de especialistas del Slidell Memorial Hospital en Los Ángeles, recomiendan las siguientes conductas para evitar que la culpa por comer opaque estas fiestas.
- “Honrar el hambre”: Practica escuchar a tu cuerpo. Si tienes hambre, honra tu hambre y come algo. Cuando te sientas lleno, escucha a tu cuerpo y deja de comer. Si ignoras las señales de hambre, podría generar restricciones, lo que podría llevar a comer en exceso más adelante.
- “Tómate el tiempo para disfrutar”: Hay que permitirse disfrutar de todas las comidas favoritas y disfrutar del proceso de comer en compañía de su familia y amigos. Si te permites disfrutar de todos los alimentos que te gustan y te tomas el tiempo para estar presente durante la comida, podrás ser consciente de cuándo te sientes lleno. Según la Escuela de Salud Pública de Harvard, saborear la comida lentamente es una práctica de alimentación consciente y puede ayudarte a sentirte satisfecho sin sentirte demasiado lleno.
- “Date un tiempo de gracia para superar la culpa”: “Si sientes que comiste demasiado, recuerda que unas cuantas comidas divertidas no arruinarán una dieta equilibrada. Si te sientes abrumado por sentimientos de culpa, disfruta de un paseo y recuerda que mañana es un nuevo día. Recuerda que las fiestas son un momento para celebrar y disfrutar de cosas que quizás no disfrutas en el día a día.