Ébola en España: Compañera de enfermera contagiada explica en qué falló el protocolo y qué errores deben evitar las autoridades

Pasado el mediodía del domingo un hombre de 54 años que había pasado varios meses en Guinea Ecuatorial se presentó voluntariamente en el hospital Barros Luco tras presentar síntomas respiratorios. Ante la sospecha por el brote de ébola, el paciente fue aislado y el lugar evacuado. Aunque finalmente dio positivo por malaria, el Ministerio de Saludo distribuyó un plan de contingencia a través de la subsecretaría de Redes Asistenciales.

Mientras las autoridades nacionales señalan estar preparadas para enfrentar un posible caso de ébola, en España la crisis se ha trasladado incluso al sistema laboral, donde los sindicatos acusan falta de formación sobre el uso de los trajes e irresponsabilidad de parte del Consejero de Salud de Madrid, Javier González, quien en un inicio culpó a la propia enfermera contagiada, Teresa Romero, y la acusó de mentir en sus declaraciones.

La Secretaria General del Sindicato de Auxiliares de Enfermería, Dolores Martínez, señala desde Madrid en entrevista telefónica con The Clinic Online que aunque se han mejorado las capacitaciones, España no se encontraba cuando llegaron los primeros casos de ébola.

¿Han sido adecuados los protocolos para enfrentar y contener el ébola en España?
Vamos a ver, sí que hemos tenido protocolos que ahora se están mejorando porque han fallado, lo que pasa es que no hemos tenido formación. A nosotros no nos han dado la formación necesaria. Nos han dado una charla que se han quedado ahí. Nada de “ponte el traje”, “quítate el traje”, “a ver que te miro cómo te lo quitas”. Esos talleres no han existido.

¿Ninguna capacitación específica sobre cómo hacer cada paso?
No, no. Eso no ha existido. Existieron unas charlas que a lo sumo fueron de veinte minutos, y nada más.

¿Cuántas charlas?
Una. No te digo que una en toda España, una por hospital y servicio, ¿vale?

El médico que atendió a Teresa, que ahora está internado también, dijo que el traje le quedaba corto y no le cubría todo el cuerpo. ¿Es un caso aislado o un tema general?
Este señor parece ser que es bastante grande, bastante alto. Los trajes cumplían la normativa, lo que pasa es que, bueno, que no habría otro porque lo suyo es que hubiese de diferentes tallas, a lo mejor, no lo sé. Pero sí que le quedaba corto. No lo sé, eso ha sido una cosa más de toda la improvisación y tropelías que nos está pasando.

¿Los trajes no vienen en distintas tallas?
No lo sé.

¿Qué opinan de la cobertura mediática que se ha dado allá? ¿Ha sido muy alarmista?
Vamos a ver, si a la prensa no se le hubiera agitado, la prensa no hubiera respondido así. Tengan en cuenta que nosotros en un principio estábamos muy alarmados, pero estábamos siendo cautos todos, todos. Pero salió el consejero de Madrid que es nuestro gestor, el que lleva la sanidad en Madrid, el responsable y salió arremetiendo contra el más débil. En Estados Unidos hay un caso parece ser en Dallas. Esa persona es anónima totalmente, se sabe que es mujer, pero es un héroe. Aquí no, aquí se le ha destrozado a la profesional. “La profesional no se supo quitar el traje”, “se tocó”, “no avisó”, “mintió”. Eso es todo lo que ha dicho nuestro jefe. Entonces ahí es cuando se ha empezado a hacer el revuelo. Si este señor hubiera estado calladito y hubiera admitido fallo en los protocolos, se cambian los protocolos y se acabó. Pero no.

¿Entonces no creen que los medios hayan exagerado?
No, yo creo que es el propio consejero el que ha agitado a todos los medios de comunicación y a los profesionales. Yo no te digo que los medios hayan exagerado. Sí que ahora mismo creo que se ha exagerado en la ciudadanía el miedo que tienen. Creo que hay que transmitir un saber: que no pasa nada si no estás en contacto directo con el enfermo. Que yo por ir al Hospital Carlos III no me voy a contagiar. Otra cosa es que yo entre a la habitación de la enferma, de la compañera que está con ébola y esté tocándole y después me toque alguna mucosa yo. Otra cosa es eso. Ahora, que yo vaya al hospital Carlos III estoy segurísima que no me contagio si no toco a la enferma.

Javier Rodríguez dijo en un primer momento que Teresa podría haber mentido y hay una idea de acusarla a ella de haber sido irresponsable ¿lo creen así?
No, no. Nosotros en ningún momento pensamos que Teresa ha tenido culpa de nada. Teresa de lo único que ha tenido culpa es de trabajar en una sanidad muy buena, me atrevería a decir una de las mejores del mundo, de prestarse voluntaria para atender a unos misioneros y de tener un jefe que no se lo merece. Es de lo único que culpo a Teresa, que tiene un jefe que no mira por ella, que no es responsable de los profesionales que tiene.

Como dices, Teresa fue voluntaria y hay muchos trabajadores de la salud que no quieren atender los casos. Han habido varias denuncias de médicos.
Sí, sí que las ha habido, de médicos y diferente personal.

¿Cómo enfrentan esa situación?
Bueno, por desgracia tenemos mucha necesidad de trabajo y si no han querido unos, han querido otros. Lo que sí hay que entender es que claro, si tú a mí me llamas para un trabajo de esta clase y me haces un contrato de 15 días, aunque yo sea un enfermero y esté trabajando en un supermercado, tengo un contrato más estable. En España hay muchísima crisis ahora. Yo no puedo dejar un contrato estable por irme a trabajar de lo mio por 15 días. Aunque sea de ébola o sea de lo que sea. Seguramente si a estos profesionales les hubieran ofrecido un contrato más duradero no habrían renunciado.

¿Creen que España y Madrid estaban listos para enfrentar estos casos?
Ahora mismo ya sí. Porque se les están dando los equipos adecuados y se les está dando la formación adecuada. Y España tiene unos profesionales muy, muy buenos.

¿Y cuando recién llegaron los misioneros?
No, no tenían formación.

¿Ahora se están haciendo capacitaciones?
Sí, se están haciendo simulacros.

¿Creen que hubo fallos en la formación en el caso de Teresa?
No, no, no. Es que no vamos a admitir que Teresa se quitó el traje mal. Es que no lo vamos a admitir nunca. Que Teresa se quitara el traje mal, eso es lo que ha dicho el consejero. Él sabrá.

Pero ¿no creen que pudo equivocarse?
Es que ella no lo ha dicho. Si a mí me preguntan siete veces si he cerrado la puerta, la primera vez estoy segura que la he cerrado, a la sexta me levanto y miro si la he cerrado, ¿me entiende?

Sí.
Es que ella no ha admitido. Yo no la he escuchado decir a ella que se ha podido tocar. Ha salido un señor diciendo “hemos examinado muchas veces los casos y ella me ha terminado diciendo que podría haberse tocado la cara con un guante”. De eso es que se han agarrado. Nosotros no vamos a reconocer en ningún momento que ella haya dicho que se haya tocado, lo ha dicho el consejero porque es a lo que se ha agarrado para quitarse la culpa él.

¿Podría haber habido falta de capacitación en su caso?
De formación y adiestramiento a la hora de ponerse y quitarse los trajes. Pero no ella, todo el personal.