“La única gracia de Carlos Villagrán eran los cachetes”

Es como el cliché de un circo. En el Universal Circus -Alameda, esquina General Velásquez- la luz entra apenas, el telón es rojo oscuro -brilla-, hay un payaso con la pintura resquebrajada, el dueño es tuerto, el dueño tiene un megáfono, el dueño anuncia por el megáfono la conferencia de prensa de la Chilindrina a unos pocos periodistas esperando a una mujer de sesenta años que aparece con un vestido verde, de niña, pecas pintadas, cachitos, un diente negro, lentes.

Pasan los días. Mientras está en el hotel sentada, con un polerón de brillos, flores y una polera de Mickey Mouse, ya no es la Chilindrina. Ahora es María Antonieta de las Nieves quien dice:

-Cuando nací me vi muy grave en el hospital. Me estaba muriendo. Pues quién sabe qué me pasó. En el parto mi mamá se vio grave y yo también. Y me llevaron cargando, corriendo a la iglesia a bautizarme porque era de madrugada. Y dice mi papá que nada más me echó el agua bendita el padre y me bendijo, que estaba yo perfecta. Me exorcizaron-

-Qué te habrán sacado.

-El demonio, yo creo.

María Antonieta de las Nieves se para arrastrando una maleta negra con rueditas. No quiere que nadie la ayude.

-Es que va mi perrita y reconoce si otro la lleva.

Chiquita de las nieves, Chihuahua, siete años, ha viajado más que uno. María de las Nieves vive en Estados Unidos, acaba de estar dos meses de gira en Perú, ahora viene un mes a Chile, ahora se sube a la van que la llevará a una radio, ahora empieza a hablar de ella, recitando su vida como un wikipedia de eventos exitosos:

-Con la Chilindrina no me ha faltado nada. La Chilindrina no es cantante y, sin embargo, tengo diecisiete discos cantados. La Chilindrina no es bailarina y, sin embargo, bailo lo que se me da la gana. A los seis años años debuté en el programa más visto de la televisión mexicana. Estuve en la primera telenovela que hubo en México. En la tercera telenovela gané el premio a mejor actriz dramática infantil. En la última novela infantil que hice, a los doce años, también me gané un premio.

Etcétera.

-¿Echabas de menos no tener vida de niña normal?

-Me encantaba tanto lo que yo hacía y me decían: “Bravo, qué bien, es difícil que hayan niños chiquitos que hagan esto” y me encantaba porque cuando iba yo a la escuela decían: “Aii, llegó Maria Antonieta, la artista, bravo bravo”. Los aplausos te ganan.

El que ganó después fue el ego. O Roberto Gómez Bolaños, cuando le preguntó si quería unirse a su elenco y ella dijo que no, no gracias, porque no era actriz cómica.

-Él le dijo: “Entonces no eres buena actriz. A mí me dijeron que eras excelente actriz y los buenos actores saben hacer de comediante”.

-Te manipuló.

-Íjole. Yo le dije: “Ay caray, me diste por mi ego. Déjame intentarlo”. Y él dijo: “Con que sepas seguir mis instrucciones es suficiente”.

-¿Sigues en conflicto con Chespirito?

-Yo no estoy en conflicto. Sigue el juicio. Ellos siguen contra demandando cada vez que yo gano una instancia. Ellos nada más han ganado una y yo he ganado cuatro. Siguen insistiendo así que debe ser que tienen mucho dinero.

-¿En qué momento se empezó a arruinar el ambiente entre ustedes en la vecindad?

-Yo nunca sufrí, durante esos 24 años en los que estuve, ningún problema realmente. Quico se fue, Quico hizo muchas tonterías.

-¿Cuáles?

-No te voy a decir por qué porque eso es lo de menos. Realmente el problema fue cuando Chespirito no quiso seguir haciendo el Chavo y yo quise hacer la Chilindrina y él me dijo que no había problema pero después, cuando lo iba a lanzar al aire, dijo que no. Que no quería que ninguno de los personajes volviera a hacer television. Pos imaginate.

-¿Qué te pasó con el ego con la llegada de otro personaje femenino al programa?

-Los estelares los hacíamos Ramón Valdés, Rubén Aguirre, Chespirito y yo. Florinda Meza empezó haciendo papeles secundarios conmigo. Si yo era Cleopatra, ella era la sirviente de Cleopatra que le soplaba, si yo hacía la reina de Saba ella era de las que llevaba el vestido. Y Carlos Villagrán había hecho uno que otro papelito. La única gracia Carlos Villagrán eran los cachetes.

La Chilindrina se presenta en el Universal Circus hasta el 9 de octubre. Alameda con General Velásquez. 9-8640709