En marzo del 2011 la licitación de un sillón para el entonces ministro Felipe Kast desató la polémica por su alto valor: nada más y nada menos que 3.700.000 habría costado el silloncito.
En marzo del 2011 la licitación de un sillón para el entonces ministro Felipe Kast desató la polémica por su alto valor: nada más y nada menos que 3.700.000 habría costado el silloncito.