El sitio de los Furiosos Ciclistas -connotados sabios del arte de la bicicleta- publicó una lista con diez tips o consejos ideales para los que acostumbran hacer de la bici su medio de transporte. Revísalos aquí.
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1. El terror de las mangueras y las grietas
Según los Furiosos Ciclistas, estos son dos de los grandes peligros del ciclista. Para cruzar la manguera, te aconsejan cruzarla “de una, lo más perpendicular posible” para así no sacarte la chucha y tener que -obligatoriamente porque quedaste con yeso- mamarte el metro de Santiago o los agradables tacos de las seis de la tarde.
2. Los perros furiosos
Claro, es que cuando andas en cleta, los perros suelen perseguirte. Según dice la sabiduría popular es el giro de la rueda lo que les llama la atención. Lo cierto es que los Furiosos Ciclistas te aconsejan frenar cuando te persiguen desaforadamente. Sí, frena no más, porque si tratas “de arrancar a toda velocidad sólo los alienta a perseguirte por más cuadras”.
3. Anda por la calle
Así no más compadre. Por la calle, es más rápido. Por lo demás, agregando a lo dicho por la agrupación de ciclistas, en la vereda si andas rápido fácilmente podí’ terminar piteándote a una viejita.
4. La ciclovía no es lo más seguro que hay
No confiar plenamente en las ciclovías. Básicamente porque en Santiago no estarían construidas de buena forma pudiéndote encontrar con “que los cruces de las calles sean los mismos para peatones que para bicicletas” o “encontrar ciclovías serpenteando por la vereda y y otras aberraciones” dicen los Furiosos.
5. Un tapabarros incrustado en tu asiento
Sí. Porque sobre todo en invierno, cuando pasas por arriba de una posa, suele saltarte agua en el poto. ¿Nadie quiere eso, no?
Sigue leyendo el resto de estos consejos en Furiosos Ciclistas