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Nacional

12 de Noviembre de 2013

Arzobispado de Santiago responde por demanda de 201 millones de dólares

  El Arzobispado de Santiago respondió ante la demanda por 201 millones de dólares interpuesta por Ana Fernández Valdés, viuda de Juan Undurraga Aninat, quien antes de morir en 1990 era dueño de Soprole. La demanda denuncia el no pago de impuestos, como también traspasos anómalos desde la sociedad Uruguaya Navarrés a la fundación y […]

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El Arzobispado de Santiago respondió ante la demanda por 201 millones de dólares interpuesta por Ana Fernández Valdés, viuda de Juan Undurraga Aninat, quien antes de morir en 1990 era dueño de Soprole.

La demanda denuncia el no pago de impuestos, como también traspasos anómalos desde la sociedad Uruguaya Navarrés a la fundación y “acciones secretas”, con la venia de la “Sagrada Congregación Romana para el Clero de la Sagrada Iglesia Católica de Roma”, según una nota publicada por The Clinic Online hace unos días.

A través de un comunicado publicado en Emol, el arzobispado confirmó que “hoy ha sido notificado de una acción judicial de carácter civil interpuesta por integrantes de la sucesión de Don Juan Luis Undurraga Aninat, destinada a cuestionar la existencia de la Fundación de Beneficencia Isabel Aninat Echazarreta, institución de derecho canónico que presta ayuda a niños desamparados y que lideró desde su fundación hasta su fallecimiento Monseñor Sergio Valech Aldunate”.

Añade que “esta acción judicial fue ya interpuesta hace más de 20 años por las mismas personas que ahora vuelven a demandar, y fue debidamente resuelta a través de un acuerdo judicial suscrito de buena fe. Con ocasión de dicho acuerdo, estos demandantes reconocieron la existencia de la Fundación y renunciaron irrevocablemente a toda acción sobre esta materia, poniéndose término a ese juicio y entregándose a estos mismos demandantes la mayor parte de los bienes del señor Undurraga”.

“La Iglesia de Santiago lamenta la interposición de esta acción judicial y estima que no existe fundamento alguno para sostenerla, ni ético ni jurídico, lo que hará presente con respeto y claridad en las instancias judiciales pertinentes, confiando en que la Justicia confirmará la legitimidad y corrección de todas sus actuaciones, enmarcadas siempre en el espíritu de servicio a nuestra Fe y a los más necesitados”, explica.

Finalmente sostiene que “una vez que los Tribunales dicten la sentencia definitiva respecto de la acción judicial presentada, el Arzobispado de Santiago volverá a referirse a esta materia”

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