Bachelet defiende las reformas desde el extranjero y acusa que ha habido bloqueos en educación

A la distancia, en El Salvador donde se encuentra de gira, la Presidenta Michelle Bachelet abordó, o más profundizó, lo que según dijo ha sido un pedregoso camino para la tramitación de la reforma educacional.

“Debo decir que el proceso político de este cambio estructural no ha sido fácil. Muchas de las transformaciones que propusimos al país requieren modificaciones legales y un amplio diálogo con actores sociales y políticos”, dijo la Jefa de Estado en la charla “El rol de la educación pública en el desarrollo”, actividad realizada en la Universidad Nacional del mencionado país.

 

Según manifestó la Mandataria, “muchas veces no es fácil superar los bloqueos y los avatares de la contingencia pero sabemos de la construcción de una perspectiva común de país que permita darle a la educación la dignidad, el valor y la calidad que requiere es nuestro objetivo más preciado”.

Al respecto agregó que “esta necesidad, de darle una base social y política amplia a la reforma educacional para que sea perdurable, nos exige considerar exigencias de otro tipo y entre ellas una que nos interpela en lo más profundo: la crisis de confianza que está afectando la relación entre los ciudadanos, las instituciones y sus liderazgos”.

En este punto, la Mandataria se extendió en la crisis de credibilidad que afecta transversalmente la política, hecho del que ella no ha estado del todo ajena, pues cabe recordar que los casos Caval y SQM involucraron a su hijo y a su ex jefe de gabinete, respectivamente.

“Los ciudadanos esperan de sus autoridades comportamientos éticos que signifiquen por un lado más transparencia del Estado y por otro sobreponer la integridad como un valor esencial en las actuaciones públicas. Es por eso que junto con las reformas que antes he señalado (…)  junto con una agenda laboral importante para modernizar las relaciones laborales en nuestro país, junto con un proceso de debate sobre nuestra constitución que queremos partir pronto, estamos impulsando una amplia agenda pro transparencia y anticorrupción, buena política, fortalecimiento a la democracia y la separación de los negocios y la política”.

Según Bachelet, “se trata de una agenda que si bien es ambiciosa, nos parece que es absolutamente impostergable e imprescindible. Porque Chile necesita emprender reformas, y para lo cual necesitamos una clase política legitimada que las conduzca. Y en ese sentido la probidad y la transparencia son las mejores aliadas de los cambios”, cerró la Mandataria.