Así serán los 32 nuevos trenes de EFE para los futuros servicios Melipilla-Alameda y Quinta Normal-Batuco

El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) junto a la Empresa de los Ferrocarriles del Estado (EFE) anunció la compra de 32 nuevos trenes para los futuros servicios Melipilla-Alameda y Quinta Normal-Batuco.

Se trata de la compra de material rodante más ambiciosa que ha efectuado este organismo desde su creación hace aproximadamente 140 años, que tiene como finalidad llegar a la cifra de 150 millones de pasajeros, es decir, triplicar la cantidad actual de usuarios.

El ministro de la cartera, Juan Carlos Muñoz, mencionó que de los 32 trenes adjudicados, 22 serán destinados para el servicio Melipilla-Alameda -que se espera que traslade a 57 millones de personas- y 10 para Quinta Normal-Batuco -que podría movilizar a 35 millones de ciudadanos-.

“Estamos dando un paso muy importante al dar a conocer que ha finalizado el proceso de licitación que permitirá comprar nuevos trenes que serán destinados a estos dos futuros servicios que fortalecerán el transporte público en comunas que hoy tienen dificultades de conectividad, reduciendo significativamente los tiempos de traslado”, destacó el secretario de Estado.

El presidente del directorio de EFE, Eric Martin, aseguró que esta iniciativa permitirá “dotar de un sistema de transporte seguro y sostenible” a comunas como Melipilla, El Monte, Peñaflor, Talagante, Padre Hurtado, Maipú, Cerrillos, Renca, Quilicura y Lampa.

Así serán los nuevos trenes

Los ferrocarriles contemplaron una inversión de 171,36 millones de dólares y serán de similares características a los adquiridos para el servicio Rancagua-Alameda, alimentados mediante energía eléctrica.

Tendrán 3 coches, con una velocidad máxima de 140 kilómetros por hora y una capacidad máxima de 807 pasajeros de pie y sentados. Son equipos de última tecnología, con sistema de climatización y accesibilidad universal, lo que permitirá el traslado de personas en silla de ruedas.

Por último, los nuevos trenes -que se espera que lleguen a Chile en 2026- también destacan porque generarán reducciones de diversos contaminantes atmosféricos como el óxido de nitrógeno, material particulado y dióxido de carbono.