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Nacional

18 de Septiembre de 2023

“No es curadora”: Productor reveló secretos de la chicha en cacho que tomará el Presidente en la Parada Militar

LUKAS SOLIS /AGENCIA UNO

El tradicional brindis que se hace para inaugurar la ceremonia contará con la chicha elaborada por José Toro Parras por undécimo año consecutivo. El hombre detalló cómo preparan la bebida para que no le haga efecto a las autoridades durante las cerca de tres horas que dura el desfile de las Fuerzas Armadas.

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Una de las tradiciones que marca cada año la Parada Militar es el brindis con chicha en cacho que protagoniza el Presidente de la República que esté de turno. El momento es uno de los más icónicos de la ceremonia con este trago que desde hace algunos años es abastecido por un productor de San Felipe (Región de Valparaíso).

Se trata de José Toro Parras, un hombre que elabora la bebida que este 2023 nuevamente le corresponderá tomar a Gabriel Boric cuando encabece su segundo desfile de las Fuerzas Armadas durante la ceremonia que se realiza cada 19 de septiembre en la Elipse del Parque O’Higgins.

La chicha en cuestión es entregada por este productor al Club Gil Letelier, organización encargada de la inauguración de la Parada Militar. Tras esto la bebida es guardada para la ceremonia donde es entregada al Jefe de Estado para realizar el tradicional brindis.

La historia de la chicha en cacho de la Parada Militar

José Toro Parras fue elegido por undécimo año consecutivo para suministrar del trago típico para este acto. En conversación con La Tercera el hombre relató que “nosotros en el sector de El Almendral tenemos una tradición que viene de fines de 1890… Pero recién a fines de los años 40′ mi papá comenzó a trabajar este tema de la chicha”.

Sobre esto explicó que se trata de un vino típico de la vitivinicultura popular conocido como “los chacolí”. Estos consisten en “vinos rústicos, los vinos añejos, los vinagres… Recién ahí comenzó a lucrar con el tema de los vinos. Antes era algo meramente familiar, para los 18 de Septiembre, para la Navidad y el Año Nuevo”.

Asimismo, el hombre de San Felipe expresó que ser elegido para abastecer de la chicha de la Parada Militar “a una persona común y corriente como yo lo emociona”. Esto, añadió, “me trae muchos recuerdos del pasado de cuando nosotros comenzamos. Siempre es emocionante estar en esta situación, tener aquí a tanta gente importante de la zona”.

El pasado 1 de septiembre el productor hizo entrega al Club Gil Letelier de la bebida que se tomará en la ceremonia. “Ellos en la Parada ofrecen el brindis con chicha en cacho al Presidente de turno. Nosotros sólo la fabricamos y la entregamos al club en nuestra casa en San Felipe”, aclaró.

“No han encontrado otra chicha que cumpla los requisitos

Por otro lado José Toro Parras recalcó que cuando hicieron la entrega las autoridades le señalaron “que hasta el momento no hay otra chicha que dure el periodo de la vendimia, que es marzo, abril y mayo, hasta la época de septiembre. Es una chichita dulce, de sabor, aroma y color característico, y que no haga daño en una o dos horas porque las autoridades están sentadas más de tres horas”.

Incluso aseguró que desde el Club Gil Letelier le aseguraron que de todas las catas en las que participan “no han encontrado otra chicha que cumpla los requisitos que ellos piden, aparte de la chicha mía”.

Sobre su producto el hombre señaló que esta “es jugo de uva, cocido y fermentado”. Pero, lo más importante de todo, remarcó que “la chicha dulce que le preparamos al club no es curadora (se elaboró hace dos meses aproximadamente, mientras que la chicha que se está vendiendo actualmente es aquella que se coció en los últimos 40 a 50 días)”.

La diferencia, precisó, es que la chicha que cura es la regular, es decir, la que “es más seca, más amarga y ahí sí se notan los 17° de alcohol que aproximadamente tiene”. Pese a esto explicó que “la que entregamos tiene los mismos grados, pero técnicamente en la chicha recién están trabajando las levaduras que se comen los azúcares”.

“La chicha se mantiene dulce, el grado alcohólico no varía, pero no cura. Para explicarle mejor, cuando las levaduras ya se han comido todos los azúcares, después de dos o tres meses, se pone más avinadita y ahí se nota el grado alcohólico. Y ahí se toma unos tres cuatro vasitos y uno se pone chistoso”, cerró el hombre.

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