Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Entrevistas

13 de Enero de 2024

Karla Constant: “Cuido mucho las relaciones con las mujeres, porque a nosotras nos ha costado muchísimo estar en el lugar que estamos”

Fotos: Felipe Figueroa

La conductora está próxima a cumplir seis meses en Canal 13, su primer gran hogar televisivo y luego de estar 10 años en Mega. Un regreso dulce, ya que de inmediato asumió la animación “Tierra Brava”. “Aterrizar en un canal y, además, al tiro tener un éxito, es lo que todo animador desea”, dice. La futura animadora de "Hola y Adiós" repasa su carrera televisiva, se refiere a los programas que ha hecho y los momentos en que ha tenido que realizar reemplazos. "Obviamente que el canal quiere y nosotros también ir por otro proyecto, por otro reality, y yo con eso me siento más que agradecida, bendecida y feliz", cuenta.

Por

Karla Constant está próxima cumplir seis meses en Canal 13, luego de retornar a una de sus dos grandes casa televisivas a lo largo de su carrera. La otra es Mega, señal que dejó en julio del año pasado, tras 10 años de relación laboral.

Un regreso dulce, ya que de inmediato asumió el desafío de animar “Tierra Brava”, el reality que ha impulsado la audiencia de la estación de grupo Luksic y que se ha mantenido entre el top 5 de lo más visto en la televisión en sus días de emisión, promediando 13,9 puntos de rating desde su debut. Un proyecto que tiene sacando cuentas alegres a la señal privada y que, incluso, ha impulsado a que se decida a estrenar “Secretos de Familia”, teleserie que estuvo años en el congelador.  

“Siento que llegué ayer. De verdad, se me ha pasado el tiempo volando y tiene que ver con los viajes de ‘Tierra Brava’”, cuenta Karla Constant, para luego agregar: “Ha sido emocionalmente increíble. Una, porque volví a mi casa, pero además volví a dos proyectos que me llenan muchísimo en lo personal y lo profesional”. La animadora se refiere a “Hola y Adiós”, el programa que cuenta historia de personas en el aeropuerto y que confiesa que era espacio “que siempre quise hacer”, ya que “tiene un contacto directo con la gente”. “No hay nada planeado, no hay nada libreteado, no hay nada de nada. Es lo que tú vas a recoger de la gente y a mí eso es lo que más me gusta”, explica.

Consciente de los buenos números que ha tenido “Tierra Brava”, asegura que el hecho de “aterrizar en un canal y, además, al tiro tener un éxito, es lo que todo animador desea”. “Porque en verdad sino lo otro se va haciendo más ripeado”, agrega. Este presente también le ha reafirmado que optar por dejar Mega ha sido lo correcto. “Siempre quise volver al 13 y estaba segura en mi interna que iba a volver algún día. Pasaron muchos años, 10 años, y creo que fue el momento correcto y para proyectos precisos que eran para mí”.

Sobre su paso por la señal del grupo Bethia, Karla Constant destaca que “tuve oportunidad de hacer todos los proyectos habidos y por haber”. “Participé de todos los géneros, tuve la oportunidad de estar con distintos compañeros, idas y vueltas a matinal, entre medio pandemia. Hubo de todo en mi paso por Mega y creo que estuvo bien cuando me fui”, explica.

-Hace dos décadas empezó con los realities y vuelve a ellos. ¿Se ha congelado la televisión? ¿Falta de una nueva tecla? Han pasado 20 años y seguimos en lo mismo, los mismos animadores…

-Qué bueno que sigan los mismos animadores (risas). Efectivamente, hay géneros que son íconos de la televisión y esos programas icónicos tienen ciclos. Por algo se hacen dos seguidos, se hace un alto, a veces son tres. Son ciclos. Pero lo bueno repite. En otros países hay teleseries que duran 10 años, hay programas de competencias que duran eternamente. Ni siquiera paran. Nosotros tenemos ciclos. Creo que todo vuelve. Todo lo bueno vuelve y es súper importante, a lo que vuelve, hacerle un upgrade (actualización) para no quedar tan ajeno a lo que uno actualmente está viviendo. Entonces, no. Creo que no es una falta de creatividad ni que hay campo para otras cosas”.

-¿Le molesta la etiqueta de “animadora de reality shows”?

-No, para nada. Agradezco, porque no es la única etiqueta que tengo. O sea, gracias a Dios la gente no me etiqueta solo en un reality. Es inevitable etiquetar a las personas, porque es un reflejo de lo que uno es o donde uno es bueno o la gente le gusta a uno verlo. Hay mucha gente que me etiqueta con los matinales. Hay otra gente que me etiqueta con la ayuda. O hay otra gente que todavía me etiqueta con el “Si se la puede gana”. O hay otra gente que me etiqueta con el “cuchi cuchi”. Tengo muchas etiquetas y las agradezco todas, porque es bonito que la gente te identifique con algo y te quiera ver en ese algo.

Cuando empezaron los rumores de que venía al 13 y me venía a hacer reality, te morís la cantidad de gente conocida, que no vía hace mucho tiempo, y decía: “Qué bueno que vuelves a hacer realities, es lo tuyo”. Sí, creo que, efectivamente, es un género donde me siento muy cómoda, pero sí creo que tengo muchas etiquetas y me gustan todas.

Karla Constant

-En los últimos años hay muchos animadores que han estado saliendo de pantalla y hay otros que no es que salgan, pero pasan un cierto período sin programas, como Sergio Lagos. ¿Hay muchos animadores? ¿Hay pocos proyectos?

-Creo que ni lo uno ni lo otro. Si hablamos solamente de la televisión, siempre hay gente que se va, otra que viene y otra que no vuelve nunca más. Pucha, cada caso es muy particular. A veces hay ciclos en la tele. El péndulo va a volver, de a poquito, cada vez más al centro. Pasamos por un tiempo en que todo lo que se hacía era solamente noticioso. Hoy estamos volviendo poco a poco a la entretención y más misceláneo.

Hay demasiados matices entremedio. A veces hay menos programas, a veces hay solo de un tipo, a veces hay menos programas de lo que uno esperaría, para todos los talentos que hay. Hay mucha gente que está fuera de televisión y súper vigente. Tú no pierdes tu talento porque no estás en televisión. Eres un buen animador con tele o sin tele. Entonces, hay mucha gente y muy mayor que podría volver a la tele. Creo que la experiencia es una de las cosas que yo más valoro.

Así como también creo que hay muy poca generación de recambio. En ese sentido, ojalá hubiese más espacio para gente nueva. Hay un hombre que ya es hombre como Matías Vega, que está con nosotros en “Tierra Brava”, un tipo súper talentoso, que ha estado en millones de programas, en publicidad y que ahora volvió. Y en eso coincidimos con Sergio (Lagos). Qué rico que hoy día hay un Matías Vega y que ojalá siga creciendo. Pero creo que, efectivamente, se paralizó un poco de esto de las nuevas generaciones y las posibilidades, y me encantaría que esto fuera como una puerta que se abriera cada vez más y en donde hubiesen más posibilidades para más gente joven. Sin sacarnos a nosotros, por supuesto (risas).

Y, por otro lado, qué rico que personas grandes como nosotros, como Sergio y como yo, hoy día podamos estar a la cabeza de un proyecto como este, conviviendo con mucha gente más joven. Aquí hay una mezcla extraordinaria porque, efectivamente, se mezcla la experiencia con la gente nueva. Pero en todo caso, siento que la energía mía está a full. La de Sergio igual. Creo que ponemos todo nuestro talento para lo que sabemos hacer.

“Muchas veces tú eres convocado a un proyecto, no eres el responsable de que otra persona haya quedado en el camino”

Karla Constant remarca que se fue “súper satisfecha de Mega porque, efectivamente, me confiaron proyectos de toda índole”. Pero llegó un momento en que sintió que “ya está bien” y decidió irse a Canal 13 “con el canasto lleno de ilusiones”. “Y creo que el canasto se llenó altiro, porque las ilusiones se transformaron en hechos concretos”, agrega.

Karla Constant

Pese a ello, hay un lamento en su cambio de casa televisiva: María José Quintanilla. “Sí, me penó haberla dejado”, reconoce. En especial, porque abandonó un proyecto que crearon juntas. “Eso sí me dio pena. Pero estaba tranquila que este era mi camino y ella lo entendió súper bien. Y por eso, además, seguimos siendo amigas hasta el día de hoy. Porque eso traspasó el trabajo, la pantalla”, explica Karla Constant.

Es difícil armar amistades, especialmente, por situaciones que pone la televisión. Por ejemplo usted, en distintos proyectos, ha llegado a reemplazar a alguien (Pamela Díaz, Diana Bolocco y Katherine Salosny), entonces pasan estas especulaciones de que hay “mala onda”. Lo que le tocó vivir con Ángeles Araya. ¿Cómo ha mantenido el no contaminarse con ese tipo de comentarios?

-Es que los comentarios no vienen de las personas que has mencionado. De repente, son miradas de la gente y está todo bien. Pero yo, porque puedo hablar solamente por mí y no por otros animadores, siempre he tenido amigos en la tele y que conservo de años. Y la verdad es que para mí una cosa es la amistad y otra cosa el trabajo. Creo que, sobre todo en el tema de televisión, nunca hay que tomárselo muy personal. Así como yo también he quedado fuera de proyectos, así es la tele. Así son los proyectos. Y a veces uno puede estar en un proyecto y otras no. A veces era la persona ideal, a veces no.

Muchas veces me tocó encabezar proyectos desde el minuto uno y en otros tuve que hacer reemplazos en los cuales me quedé, efectivamente. Pero con toda esa gente siempre aclaré, conversé, con muchas de ellas mantengo amistad. Me sigo relacionando hasta el día de hoy porque uno entiende que, si de verdad tú quieres a una persona, si tienes una amistad, son cosas que pasan. Ahí también hay una cierta cuota de madurez, de no tener al ego tan presente y poder seguir evolucionando y avanzando. Porque, en el fondo, muchas veces tú eres convocado a un proyecto, no eres el responsable de que otra persona haya quedado en el camino. La vida es así, los proyectos son así.

Obviamente que siempre obro con buena intención. Obviamente que siempre trato de, y eso lo cumplo a rajatabla, el respeto por la otra persona. Pero son proyectos, aquí no hay nada personal. Y te repito, tengo muchos amigos de años, como Cristián Sánchez, Marcelo Comparini, Iván Valenzuela, en este caso Sergio (Lagos), la Diana (Bolocco). Ella, a mí a veces, le tocó hacer programas que los iba a hacer yo o hacía los de ella.

Trabajamos juntas durante mucho tiempo y, por sobre todas las cosas, cuido mucho las relaciones con las mujeres, porque, lo repito una y otra vez, a nosotras nos ha costado muchísimo estar en el lugar que estamos. Así que, si a mí me toca trabajar con una mujer, por Dios que voy a cuidar su espacio y lo que ella quiera hacer para que brillemos las dos. Porque eso creo que es súper importante. La pelea nunca la voy a tener con una mujer, jamás.

-Con respecto a esto de que le ha tocado reemplazar gente. ¿Le generaba conflicto?

-Lo que pasa es que cuando tú miras esta carrera televisiva como una de largo aliento, que es como yo la miro, porque espero que me saquen bien viejita, o yo optar por irme, pero bien viejita. Si tú no aceptas este camino o este proceso de la televisión así, estás frito. Tienes que vivir fracasos, tienes que vivir éxitos, tienes que vivir momentos de súper abundancia y otros que van a ser más de sequía. Lo importante es tener claro quién uno es, cuál es tu talento y a dónde quieres llegar. Si al primer fracaso te vas para tu casa, ya te quedaste ahí. Uno tiene que aceptar la derrota, aprender y seguir adelante. Porque de eso he tenido mucho.

Llegué a este canal haciendo “Video Match”. Tuve el “Sin Mochila” y muchos, pero muchos otros proyectos que te podría decir: “Sí, no fuimos los más exitosos”. Pero eso no me hacía perder ni mi energía, ni mi forma de ser, ni mi positivismo, ni dar lo mejor de mí. Entonces sí, muchas veces me tocó hacer reemplazos. Cada uno tiene una mirada. Siempre dije: “Pucha que soy versátil”. Porque estuve en millones de programas, no solo en el matinal. Y cuando había que buscar un reemplazo seguro y con las cualidades que tengo, siempre me llamaban a mí. Y eso responde a lo que soy, a mis talentos y la confianza que me tienen.

Entonces, jamás me sentía como menos porque yo fuera a ser un reemplazo. Todo lo contrario. Era como la seguridad que doy y por eso estoy ahí. Y muchas veces el reemplazo terminó siendo para siempre. Estable. Y también porque uno va sembrando. Cada uno de nosotros aporta con algo diferente.

Karla Constant

Cuando empezó su carrera le tocó trabajar con Julio Videla. A lo mejor fue un tutor o un mentor. A lo mejor fue un buen compañero de trabajo para empezar. ¿Siente que eso es algo que se da naturalmente, que es una responsabilidad seguir ese tipo de escuela?

-Hasta el día de hoy, hasta con mi último compañero, soy muy observadora y siempre aprendo. Aprendo de Sergio (Lagos), así como aprendí… ¿Sabes qué? Yo trabajé con Raúl Matas. O sea, de todos mis compañeros, yo absorbí. Soy una esponja. Trabajé con Javier Miranda, con Julio (Videla), con Iván Valenzuela. O sea, de todos, de todos, yo fui… aprendía, observaba, escuchaba. Decía: “Uy, ¿cómo se le ocurrió eso?”. De Lucho Jara, ni qué decir. Y así de tantos. He tenido muy buenos compañeros. O sea, de la Javiera (Contador), siempre quise tener su humor. Es súper rápida. La Diana (Bolocco). También me gusta de mis compañeras mujeres, por ejemplo, eso de ser tan relajada.

Todas esas cosas, de cada una, rescato. Y digo: “Uy, pucha, qué choro, qué admirable, qué bonito eso. ¿Cómo lo puedo aplicar?”. Y eso innato pasa cuando uno trabaja con gente más joven. O sea, no es que uno haga una biblia y le traspase esa biblia a alguien y diga: “Oye, mira, estúdiate esto, es súper importante”. Pero, por ejemplo, en mi último caso, que es con Matías (Vega), muchas veces él me pregunta cosas a mí o le pregunta a Sergio (Lagos). Y otras que yo comparto cosas con él de lo que veo de él. Digo: “Mira, tal vez sería bueno aplicar esto o qué tal si entras de esta otra manera”.

Me gusta y no me gusta hacer las cosas igual que siempre, y, además, porque uno va teniendo maestras. Aquí mismo trabajé mucho tiempo con la Sussy Fischkin, por ejemplo, en donde decíamos “por qué partir igual, todo igual”. Entonces, yo creo que nosotros tenemos una pega súper importante. No con el resto, con uno mismo de no repetirte. Estoy segura de que Matías y con otra gente joven que he trabajado lo hacen. Lo hacen, lo absorben, lo miran, lo retienen, lo trabajan, porque es lo que hacemos todos. Si no hay clases propiamente tal de animación. Uno no va a la universidad.  

-¿Cuáles son sus aspiraciones personales a lograr en Canal 13 durante los próximos doce meses?

-Cosas que me importarían, que el éxito de “Tierra Brava” se mantenga. Que tengamos una gran final, porque la gente está ansiosa. Obviamente, que al “Hola y Adiós” le vaya súper bien y creo que me encantaría seguir en la senda de los realities. Y no sé si me queda año… porque si lo piensas bien, ahora estoy grabando el “Hola y Adiós”, nos vamos a Viña con Sergio y seguimos full trabajando en esto. Por supuesto que trabajar en un nuevo proyecto.

Entonces, creo que este año va a terminar nuevamente redondito y súper abierta a las sorpresas que mis jefecitos me quieran proponer. Me gusta dejarme sorprender y que ha sido la tónica de mi carrera. Obviamente que el canal quiere y nosotros también ir por otro proyecto, por otro reality, y yo con eso me siento más que agradecida, bendecida y feliz.

Notas relacionadas

Deja tu comentario