¿Por qué falla Estadio Seguro?: Responsabilidades compartidas y las intenciones del Congreso de modificar ley que combate la violencia en recintos

El domingo pasado, el partido de la Supercopa del fútbol chileno que se jugaba en el Estadio Nacional entre Colo-Colo y Huachipato fue suspendido por un incendio al interior del recinto, provocado por los hinchas del vigente campeón de la Copa Chile. El viernes, la Delegación Regional Metropolitana informó la suspensión del partido entre Universidad de Chile y Cobresal, que se iba a realizar hoy en el mismo estadio.

“La decisión se funda en los informes que emanan los organismos técnicos, quienes consideran que no están las medidas necesarias para resguardar la seguridad de los asistentes al evento”, informó el delegado presidencial (s), Jaime Fuentes. El partido entre Unión la Calera y Universidad Católica, que se iba a jugar el sábado en La Calera, también se canceló por falta de personal policial.

Estos eventos desataron críticas de fanáticos. El primero, principalmente, por el comportamiento de la hinchada de Colo-Colo, y el segundo por la decisión del Ejecutivo. Pero a su vez, evidenciaron las fallas de la Ley de derechos y deberes en los espectáculos de fútbol profesional y del Plan Estadio Seguro, que luego de 10 años de funcionamiento sigue mostrando defectos. Por un lado, porque no ha logrado erradicar la violencia; y por otro, por la falta de organización de las autoridades.

“Estadio Seguro no ha sido y no va a ser la solución al problema del fútbol debido a que ellos son intermediarios, no están en condiciones de tomar decisiones como hay que tomarlas”, acusa el exgerente de Ñublense, Hernán Rosenblum. “Es evidente que la implementación de Estadio Seguro no ha traído como consecuencia el erradicar y evitar los hechos de violencia en los recintos deportivos”, añade el diputado Jorge Guzmán (Evópoli), integrante de la comisión de Deportes de la Cámara.

“Uno se hace la siguiente pregunta: ¿Se justifica hoy tener Estadio Seguro? Se supone que si está es para hacer las planificaciones de seguridad, para garantizar que el público esté seguro. Hoy, da la impresión que estamos frente a un programa vacío“, dijo la exministra de Deportes y actual dirigente de la “U”, Cecilia Pérez, por la suspensión del partido.

“Como Asociación, creemos que esta resolución recibida el día de hoy perjudica al fútbol y a los hinchas”, acusó en una declaración la ANFP, que aclaró que los clubes involucrados trabajaron “coordinadamente con Carabineros de Chile, Estadio Seguro y la Delegación Regional Metropolitana para cumplir con los requisitos necesarios”.

Las molestias en el mundo del fútbol son por falta de atribuciones a las autoridades. Estas afirman que son los clubes y el ente rector del fútbol quienes deben encargarse de la seguridad en los recintos.

En el Congreso se han elaborado diversas iniciativas para modificar la ley y fortalecer la seguridad. En agosto de 2023 el Gobierno envió un proyecto que incorporó el conjunto de propuestas, que se encuentra en tramitación en la comisión de Deportes de la Cámara.

Los cuestionamientos a las atribuciones de Estadio Seguro

“Año a año, mes a mes, semana a semana, nos vamos encontrando con hechos de violencia dentro de los estadios. Si uno tuviese que hacer un balance de lo que significa la implementación de Estadio Seguro, ese balance sería negativo”, sostiene el diputado Guzmán.

Algo que critican parlamentarios consultados por The Clinic es la falta de atribuciones que tiene Estadio Seguro para enfrentar la seguridad en los recintos. Principalmente, porque el departamento, que pertenece al ministerio del Interior, solo opera como un comité técnico y su función es asesorar.

“En el papel, Estadio Seguro cumple con el mínimo estándar”, manifiesta el diputado Marco Antonio Sulantay (UDI), quien agrega que “la operatividad de esta está totalmente al debe. Me refiero a los recursos que se necesitan para fiscalizar. También es la responsabilidad que debe tener el Ministerio del Interior más todavía sobre este programa”.

“Para nosotros, la pregunta siempre ha sido: ¿Cuál es realmente el rol que cumple Estadio Seguro? Hoy en día es simplemente una institución que está ahí, en el fondo, para verificar que estén los guardias correspondientes. Pero tampoco tiene un rol fiscalizador hoy. Tiene que haber, por lo menos, alguien que se haga cargo de verificar y de fiscalizar que todo esté acorde para el evento que se va a llevar adelante”, señala la presidenta de la comisión de Deportes, diputada Erika Olivera.

El exdirigente de Ñublense, Hernán Rosenblum, afirma que la responsabilidad de que ocurran incidentes al interior de los estadios es compartida. “El fútbol tiene su responsabilidad evidentemente, pero hay un porcentaje importante del entorno. El fútbol por sí solo no puede hacerlo y necesita de respaldo de las fuerzas que nos permiten ordenarnos a diario en este país”, asegura.

La seguridad y los conflictos para controlar el ingreso de hinchas

Luego de que se desatara la polémica por la suspensión del partido de la Universidad de Chile, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, aclaró que la falta de dotación policial se debe a la emergencia por los incendios. En ese sentido, sostuvo que para un evento de esta naturaleza “requiere una disposición de a lo menos 700 funcionarios de Carabineros”.

En la Delegación Presidencial advierten que cada partido requiere una dotación de Carabineros y de seguridad distinta. Depende de los clubes que se enfrenten, y también el recinto. La seguridad corre absolutamente por parte del equipo que ejerza la localía. Es así, según acota un directivo, si la hinchada del visitante realiza desmanes, se hace cargo el local.

Carabineros solo tiene control afuera de los recintos, pero adentro la seguridad está en manos de guardias privados. Según cuenta un conocedor del tema, cuesta 40 mil pesos mínimo la contratación de un guardia y por partido se requieren al menos 400. Algunos clubes apuntan a que es necesario el apoyo monetario, por parte del Estado, para realizar estos eventos en el marco de lo que la ley exige.

Además, existen cuestionamientos a la capacidad que tienen los guardias privados de controlar la violencia. “Si se le diera atribución, por ejemplo, a los guardias de seguridad, tal como las atribuciones que tiene un carabinero, la solución podría estar mucho más en el lado del fútbol. ¿Cuál es el problema? Que al guardia de seguridad no se le respeta”, afirma Rosenblum.

Otra de las quejas por parte de diversos clubes ha sido que no están las herramientas necesarias para prohibir el ingreso al estadio a infractores. Si bien hay clubes que pueden restringir el acceso a quienes hayan sido sancionados exigiendo el carnet de identidad, esto no es suficiente. Principalmente, porque estas mismas personas pueden, por ejemplo, conseguirse otras cédulas y burlar los controles.

Desde que comenzó a operar Estadio Seguro, 7.000 personas han sido sancionadas y se les ha impedido el ingreso a partidos de fútbol. Un 10% de estos casos fueron por órdenes de tribunales de justicia, y 5.171 por los clubes deportivos.

El proyecto del Gobierno para modificar la ley

El año pasado un clásico entre Universidad de Chile y Universidad Católica jugado en Concepción tuvo que ser suspendido por incidentes. Este episodio obligó a autoridades a tomar cartas en el asunto. Hasta esa fecha, una serie de proyectos para perfeccionar la ley que combate la violencia en los estadios dormían en el Congreso. De ahí el Ejecutivo impulsó una iniciativa propia que recopiló puntos de las diversas propuestas.

A modo de ejemplo, La Moneda expuso en el proyecto que el promedio de incidentes graves por partido hasta durante 2023 fue de 0,23, muy por encima del 0,07 que se registraba en 2015.

La iniciativa propone aumentar la rigurosidad para la autorización de eventos, y la fiscalización de las autoridades. Además, fija nuevo sistema de acceso y de identificación de asistentes, y aumenta las sanciones a quienes comentan ilícitos.

También “establece de manera clara los roles y responsabilidades de los distintos actores que participan en estos eventos deportivos”. Esto asegura que los organizadores ejerzan su rol de forma efectiva y se garantice la protección y el correcto desarrollo de los eventos deportivos que se llevan a cabo”.

La falta de atribuciones y las excusas de la Delegación Presidencial

Si bien el foco de las críticas se concentró en la Delegación Presidencial Metropolitana, desde la entidad afirman que es estrecho el margen para actuar que tienen en estas ocasiones. En esa línea, aseguran que ellos actúan conforme a las recomendaciones de Carabineros, y en especial de Estadio Seguro.

Este último, según explican, funciona como comité asesor, y su función es recopilar información, estudiar los diversos eventos, y elaborar un informe que luego debe ser revisado por la delegación. Es en esa línea que este órgano se excusa asegurando que su decisión se respalda exclusivamente dependiendo de lo que sugiera Estadio Seguro.

Por lo mismo, la diputada Erika Olivera afirma que el proyecto que se tramite en el Congreso debe considerar una mejor distribución de las atribuciones. “Tienen que estar coordinado entre las distintas instituciones, ya sea ANFP, Estadio Seguro, o la delegación presidencial. Eso es lo que está buscando más que nada el proyecto. Por otro lado también busca generar diversas responsabilidades”, afirma la legisladora.