“Eyes without a Face”: el himno de Billy Idol que fue inspirado por una película de terror

En 1983, Billy Idol estaba comenzando las grabaciones de lo que sería su segundo álbum, “Rebel Yell”, el cual sería el que le daría el estatus de leyenda y símbolo de la música de los 80. En medio de eso, recordó una película de terror que le daría la inspiración para uno de sus máximos hits: “Eyes without a Face”.

La canción, que habla sobre las relaciones en las que se pierde el toque humano, provocando que uno se aliene en sus propios pensamientos, hundiéndose en un vacío, quedó en el exitoso disco. Sin embargo, fue lanzado como sencillo en junio de 1984, llegando al cuarto puesto de la lista Billboard en Estados Unidos.

Billy Idol venía de salir de su banda Generation X, en 1981, cuando comenzó su carrera solista. Allí formó una alianza con el ex manager de KISS, Bill Aucoin, quien había sido despedido por el declive en ventas que sufría el grupo por esos años. Allí, recluta al guitarrista Steve Stevens, con quien comienza a grabar algunas canciones, hasta que lanzó su EP “Don’t Stop”. Este incluyó uno de los primeros éxitos del cantante, “Dancing with Myself”, una regrabación de una antigua canción que grabó junto a su exbanda.

De allí llegó el disco debut, titulado con el nombre del artista, desde donde se extrajo el single “White Wedding“. Esta, y su anterior canción, comenzaron a tener rotación en MTV, gracias a su imagen que mezclaba el glam con el punk.

Así, comenzaron a trabajar en el álbum sucesor, y entre esos surgió un tema compuesto por el propio Idol, junto a Stevens. Cuando comenzaron a trabajar en ella, al cantante se le vino a la mente una antigua película de terror que compartía el mismo nombre de esta pieza en la que trabajarían: “Eyes without a Face”.

Billy Idol, una película de terror y la alineación: Los secretos de “Eyes without a Face”

En su libro de memorias, “Dancing with Myself”, Billy Idol señaló que siente un fanatismo por las películas de terror, sobre todo por sus títulos. Fue ahí que conoció “Les Yeux-Sans Visage”, conocida como “Ojos sin un rosto“. Esta cinta narraba la historia de un cirujano plástico obsesionado con reconstruir el rostro de su hija, quien sufrió una accidente de tránsito. Para ello, comienza asesinar a personas, cuyas piezas faciales comienza a usar para lograr su objetivo.

En el final de la película, lo único que queda de la chica, son sus ojos, convirtiéndose en lo que dice la canción: “Eyes without a Face”. Esto inspiró a Idol a realizar un paralelismo con el decaimiento moral que vivió en sus primeros años viviendo en Nueva York.

En el libro, Billy Idol recordó que “comencé a usar la frase como posible título/letra/coro para la canción. Comencé a escribir palabras que, en una forma disfrazada, hablaban de mi vida en Nueva York y una relación que resultó mal, en el filo de desintegrarse hacia la locura. Quizás estaba reflexionando sobre mis infidelidades de gira“.

“En una forma, eso te puede dejar sintiendo sin alma, en especial si estás en una relación que valoras, pero desconoces al mirar hacia otro lado para encuentros sexuales“, relató.

Al entrar al estudio, su guitarrista logró crear el riff principal, y durante el solo, comenzó a rapear de forma improvisada. Esto fue inspirado no solo en el naciente movimiento del rap en Nueva York, sino también en la música compuesta por Stevens.

Así, y gracias al posterior video dirigido por el británico David Mallet, “Eyes without a Face” se convirtió en uno de los máximos hits de Billy Idol, apareciendo en publicidades alrededor del mundo, y que sigue tocando en sus conciertos hasta el día de hoy.