La ordenanza que enfrenta a la Municipalidad de Ñuñoa y a productores de eventos por el Estadio Nacional: “El público que asiste a conciertos es muy distinto al del fútbol”

El 27 de febrero, la Municipalidad de Ñuñoa aprobó una ordenanza municipal que busca que los productores de eventos masivos que se desarrollen en el Estadio Nacional paguen derechos municipales. Esto, por conceptos de “recuperación del espacio público por externalidades negativas” y “derecho de resguardo del perímetro del Estadio Nacional”.

Así, el decreto establece que cualquier actividad cultural, artística e incluso deportiva, que supere el aforo de 10 mil asistentes, deberá pagar 83 UTM. En caso de ubicarse entre las 30 mil y las 45 mil personas, 125 UTM, y entre las 45 mil y las 65 mil, 174 UTM. Esto, siempre y cuando su organización corra por cuenta de privados con fines de lucro.

Esta situación mantiene en alerta a los organizadores de conciertos. Sobre todo en abril, mes donde están programadas en el coliseo de Ñuñoa tres presentaciones de Karol G y dos shows de Los Bunkers.

Así, el pasado 26 de marzo, la Asociación Gremial de Empresas Productoras de Entretenimiento y Cultura (Agepec) presentó al municipio de Ñuñoa un escrito reclamando que la medida es ilegal.

A juicio del presidente de Agepec, Jorge Ramírez, “cobrar un derecho municipal para cubrir eventuales perjuicios tras un evento en el Estadio Nacional no tiene que ver con el mero cálculo superfluo de cuánto dinero por persona significa esta arbitraria tabla. Se trata de una intromisión en una serie de deberes y responsabilidades que no son de las productoras de eventos, sino del propio municipio. Tampoco, por ende, tiene sentido el espurio cálculo de cuánto significa en el valor de una entrada, sea cuales sea su valor”.

En ese sentido, Ramírez sostuvo que el argumento del Concejo Municipal es erróneo. “Si el argumento es que los eventos masivos afectan a la comuna, resulta un contrasentido y un despropósito por parte del Estado que se haya invertido en un parque con el anhelo que acontezcan justamente lo que se dice ‘afecta’: eventos masivos”, afirmó.

“Si el diagnóstico son las incivilidades, problemas viales o acumulación de basura, estas situaciones son responsabilidad del municipio”, añadió el líder gremial.

Públicos distintos y la amenaza de la judicialización

Según Jorge Ramírez, “calificar como una externalidad negativa los saldos de la realización de un evento masivo o deportivo va en contra de cualquier política pública que busque promover el deporte o enriquecer la actividad cultural del país. Esas son dimensiones fundamentales para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”.

También, el presidente de Agepec aseguró que “el público que asiste a conciertos o a eventos como el cierre de la Teletón es muy distinto al del fútbol”. Así, cuestionó que “siempre se nos homologa a actividades muy distintas por desconocimiento de nuestro sector”.

“Si esta medida surge luego de los incidentes en el Estadio Nacional entre Colo Colo y Huachipato, debiera el municipio juntarse con el fútbol y tratar de solucionar el problema con quienes tienen el conflicto”, reclamó.

Desde el gremio advirtieron que, de no tener respuesta por parte de la Municipalidad de Ñuñoa, acudirán a la Corte de Apelaciones de Santiago.

En febrero pasado, la Agepec había alertado que la violencia y el vandalismo en el Estadio Nacional ponía en “gran riesgo” los espectáculos. “Se nos dificulta la utilización de un recinto que es patrimonio de la cultura y los eventos masivos, dándole preferencia al fútbol. Eso siempre ha sido así”, cuestionaron en la oportunidad.

La mirada de la Municipalidad de Ñuñoa

En conversación con La Tercera, la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos, explicó que la medida “surge en defensa de los vecinos. En los días de eventos masivos, hay un fuerte aumento de incivilidades, problemas viales, basura y daños a bienes nacionales de uso público y áreas verdes”.

Ríos agregó que la ordenanza se aprobó en forma unánime en el Concejo Municipal. “Existe un consenso en Ñuñoa de los problemas que significa para la comuna un evento masivo”, señaló.

“Los eventos masivos exigen una carga adicional. Como municipio, estamos obligados a efectuar despliegue especial de funcionarios. Y, por lo tanto, creemos que es justo que las productoras deban hacerse cargo de los problemas que generan. Los vecinos de Ñuñoa no pueden seguir subvencionando a las productoras. Porque a través de sus tributos se implementan medidas para mitigar los problemas que generan”, agregó.

La alcaldesa Ríos aclaró que “el gremio dice que esta medida surge por un partido de fútbol en particular y no es así. Nosotros hemos constatado en terreno los problemas que generan los eventos masivos, seas deportivos o musicales. Sin ir más lejos, en el pasado un concierto masivo ―Daddy Yankee― generó una alternación del orden público y daños en un amplio sector de la comuna que tuvimos que asumir nosotros. Y eso no es justo”.

La jefa comunal invitó a los organizadores de eventos a “ser buenos vecinos y a sumarse estas iniciativas. Van en beneficio de toda la comunidad”.