Manuel Bulnes: el socio de Larraín Vial que desciende de dos presidentes y que se tomó el protagonismo del caso Factop
El socio y exdirector ejecutivo de Larraín Vial fue formalizado por el Ministerio Público por su participación en el fondo de inversión creado para reestructurar las deudas de Antonio Jalaff. Aunque él niega haber conocido la existencia de los delitos e irregularidades que se habrían cometido en el proceso, la fiscalía asegura que Bulnes accedió a ayudar a Jalaff debido a la cercanía que ambos mantenían, y que con ese fin se saltó las reglas. Estos son los antecedentes que acumula el expediente de la investigación, y que tienen a un ejecutivo clave del mercado financiero al borde del arresto domiciliario.
Por Nicolás Sepúlveda 21 de Enero de 2025

Compartir
“Son unos hijos de puta, huevón, unos hijos de puta. Estaban participando en el fondo de inversión, administran este edificio…”, dice Luis Hermosilla en el minuto 89 del audio grabado por Leonarda Villalobos en junio de 2023 y que hoy lo tiene en prisión preventiva. Misma situación en la que está el empresario Daniel Sauer, quien en ese mismo audio le responde: “Manuel Bulnes corre a poto pelao con Álvaro juntos”. Hermosilla retruca: “Y con Toño también corre Manuel Bulnes”.
Cuando nombran a “Álvaro” y a “Toño”, se refieren a los hermanos Álvaro y Antonio Jalaff, excontroladores de Grupo Patio que recibían financiamiento ilícito desde Factop —el factoring cuyo descalabro desencadenó el caso Hermosilla— y que acudieron a Larraín Vial para reestructurar parte de sus deudas. El fondo de inversión que levantaron con ese fin no cumplió con las normas, acusa la fiscalía, la que desde hace más de una semana imputa delitos ante la jueza Cheryl Fernández del Cuarto Juzgado de Garantía.
En esa formalización no solo están siendo acusados Hermosilla y los Jalaff, sino que también otros ocho ejecutivos y socios de Larraín Vial, entre los que destaca Manuel Bulnes Muzard, socio y exdirector ejecutivo de la mayor corredora de bolsa del país.
Explicado en simple: en 2022 se hizo pública una deuda por más de $28 mil millones de Antonio Jalaff, entonces socio y director ejecutivo de Grupo Patio. Entre los acreedores de Jalaff estaba Factop, el factoring en cuya propiedad participaba Daniel Sauer, y que le entregaba financiamiento generado por facturas falsas. Para reestructurar su deuda, ejecutivos de Patio y de Larraín Vial crearon el Fondo de Inversión Estructurado I, el mismo que el Ministerio Público acusa que se saltó las reglas y que terminó perjudicando a los inversionistas.
¿Cómo? Los fondos aportados por los inversionistas fueron utilizados para pagar las deudas de Antonio Jalaff con sus acreedores relacionados, como el mismo Factop o una sociedad de su hermano Álvaro Jalaff, quien participó en la estructuración del fondo de inversión. A eso se suma que las deudas no habrían sido acreditadas según ordena la normativa.
En medio de ese panorama aparece la figura de Manuel Bulnes, quien compartía amistad con los hermanos Jalaff —como mencionó Luis Hermosilla en el audio y como acreditan declaraciones que constan en el expediente de la investigación— y accedió a estructurar el fondo que, se supone, iba a salvar a Antonio Jalaff del descalabro. Eso no ocurrió y todos los involucrados ahora enfrentan cargos ante la justicia.
La fiscalía acusó que Bulnes fue el “ideólogo” del fondo de inversión. Durante su última declaración ante los fiscales, Bulnes entregó su celular para que fuera periciado.
De la Bolsa al banquillo
Manuel Bulnes Muzard ingresó en 1992 a la mayor gestora no bancaria de activos en Chile, Larraín Vial, al principio como vendedor y comprador de acciones en la rueda de la Bolsa, y luego como gerente general y socio.
En el mercado se dice que siempre fue el preferido de Leonidas Vial Echeverría —socio de Larraín Vial y director de empresas—, con quien comparte la afición por los autos deportivos, además de ser parientes políticos, según contó un perfil realizado por El Mostrador. Manuel Bulnes desciende de dos presidentes de la República, Juan Luis Sanfuentes y Manuel Bulnes Prieto. En su árbol genealógico también abundan los ministros de Estado y los congresistas.
En la trama del fondo de inversión que investiga la fiscalía, Bulnes es una pieza clave. Por su antigua cercanía con los Jalaff, pero también por el poder que tenía en Larraín Vial. Los testimonios de quienes participaron en la estructuración del fondo coinciden en que Bulnes estuvo en su génesis. Pero hay más.
En su última declaración ante los fiscales, Antonio Jalaff insinuó que Bulnes pudo haber estado al tanto de que en su esquema de financiamiento se utilizaban facturas falsas (él las llamó “facturas de favor”). El quiebre de los Jalaff con Bulnes y Larraín Vial es total. A fines del año pasado, la corredora se querelló por estafa contra los excontroladores de Patio.
La indagatoria del Ministerio Público es en extremo delicada para la corredora de bolsa, fundada en 1934 y que actualmente tiene presencia en Perú, Colombia y Nueva York. Es el prestigio y la credibilidad de Larraín Vial lo que está en juego. Se trata de un holding financiero que no solo vende y compra acciones, sino que también administra activos por varios miles de millones de dólares, y que asesora a parte de quienes ostentan los mayores patrimonios del país.
La actual crisis de Larraín Vial solo es comparable a la que enfrentaron hace 10 años en el caso Cascadas, cuando la entonces SVS (actual Comisión Para el Mercado Financiero) multó a sus principales ejecutivos por haber sido parte de un esquema fraudulento de compra y venta de acciones que perjudicó a los accionistas minoritarios de SQM en beneficio del entonces controlador de la minera, Julio Ponce Lerou. Manuel Bulnes en ese episodio fue multado con UF 200.000, cifra que luego fue anulada por la Corte de Apelaciones de Santiago y que ahora está bajo análisis de la Corte Suprema.
En la extensa formalización que desarrolla la fiscalía —ya van seis días de audiencia— se han imputado delitos contra 19 personas por estafa, lavado de activos, soborno e infracción al Mercado de Valores, entre otros. En el apartado de la acusación por las ilegalidades en torno al Fondo Capital Estructurado I, los fiscales Juan Pablo Araya y Felipe Sepúlveda —de la Fiscalía Metropolitana Oriente—, informaron pérdidas por más de $6 mil millones para los inversionistas.
Amistades peligrosas
Según dijo la fiscalía durante la formalización de cargos ―que comenzó el lunes 13 de enero― la cercanía de Bulnes con los hermanos Jalaff fue la motivación del también socio de Larraín Vial para acceder a la estructuración del fondo de inversión. Habría que agregar que no es la primera aventura que emprenden en conjunto.
“Mi rol con Grupo Patio ha sido representar los intereses de Larraín Vial en la sociedad Gestión de Rentas Inmobiliarias (GRI), donde LV tiene un 40% y yo soy uno de sus siete directores. Esa sociedad existe, sigue siendo filial del Grupo Patio, administra activos inmobiliarios por aproximadamente 500 millones de dólares y se puede decir que ha sido un emprendimiento muy exitoso”, declaró ante los fiscales el propio Manuel Bulnes el pasado 8 de enero.

Antes, Bulnes dijo que en 2017 él y Álvaro Jalaff acordaron el negocio de GRI. “Desde mediados del año 2016 conocía a Cristian Menichetti y a Álvaro Jalaff, quienes querían conocer a Larraín Vial y eventualmente, complementar la asesoría que le daba Goldman Sachs con otros bancos de inversión. Querían que yo les presentara a la gerente de banca de inversiones”, indicó Bulnes en octubre pasado.
Cuando Antonio Jalaff declaró el pasado 24 de septiembre, dijo que seguía considerando a Manuel Bulnes como alguien cercano. “Fuimos socios mucho tiempo con Larraín Vial en distintas sociedades. A Manuel Bulnes, su gerente, lo considero un amigo”.
Ahora la relación entre los Jalaff y Bulnes está rota. Se acusan mutuamente ante los fiscales y atrás quedaron los días en que corrían juntos por la playa y compartían cenas y negocios. Bulnes le dijo a la fiscalía que se sentía traicionado.
“El volumen e intensidad de los negocios que evaluamos y desarrollamos llevaron a una relación profesional muy fluida, y a lo que yo consideré en la época como una buena relación de negocios e incluso de confianza. Una amistad de negocios, como dije en mi declaración previa. Aunque con los acontecimientos posteriores, puedo decir que esa confianza fue traicionada o nunca existió realmente”, declaró Bulnes.
Antonio Jalaff fue más allá e insinuó que Manuel Bulnes pudo estar al tanto de la utilización de facturas falsas en su esquema de financiamiento con Factop. Los fiscales le preguntaron eso directamente el 3 de enero de 2025:
“Yo no oculté nada, toda la información de mis sociedades, especialmente de mi sociedad San Antonio, estaba a disposición de todos quienes estaban participando de la mesa de ayuda, por lo tanto, también debo asumir que esa información era conocida por los abogados que me asesoraban (MBC, Calderón y Compañía, Barros y Errázuriz) los abogados de Grupo Patio, los auditores, y la gente de Larraín Vial”, aseguró Jalaff.
A fines del año pasado, Larraín Vial se querelló por estafa contra los hermanos Jalaff, los Sauer y exejecutivos de Factop y Grupo Patio (vea nota del Diario Financiero). Como medida de compensación, la corredora anunció un acuerdo con los inversionistas perjudicados por el fondo de inversión, el que implicaría el desembolso de $3.500 millones.
Felipe Porzio —socio y director de finanzas corporativas de Larraín Vial—, entregó a la fiscalía su versión sobre el origen del fondo de inversión. Aseguró que en junio de 2022 Álvaro Jalaff y Cristián Menichetti, de Grupo Patio, lo contactaron a él y a Manuel Bulnes para buscar una solución a las deudas de Antonio Jalaff.
“Nos solicitaron dicha reunión para contarnos que habían sabido hace poco que Antonio Jalaff, hermano de Álvaro Jalaff, a través de Inversiones San Antonio tenía un monto de deudas cercano a UF 700 mil y tenía problemas de liquidez para poder pagar dichas deudas”, aseguró Porzio el 16 de octubre pasado.

Meses antes, en junio, quien fuera uno de los dueños de Factop, Daniel Sauer, declaró que Bulnes había sido uno de los creadores del fondo: “Sobre Antonio Jalaff y Fondo Estructurado Capital 1, este fondo lo desarrolla el Gerente General de Patio, Cristian Menichetti, con el asesoramiento legal de parte de Carola Menichetti. De parte de Larraín Vial, los que son colocadores de fondos son el señor Manuel Bulnes y Felipe Porzio”. Esa declaración fue una de las primeras que le cargó responsabilidades a Larraín Vial.
Cristian Manichetti, exgerente general de Patio, declaró que la idea de la creación del fondo vino de Larraín Vial, luego de que Antonio Jalaff los sumara al grupo de asesores que buscaba soluciones para su deuda: “En junio de 2022 se realizó una reunión de coordinación para tales efectos. A dicha reunión asistió Manuel Bulnes, Felipe Porzio, Álvaro Jalaff y yo”, dijo Menichetti en octubre.
Manuel Bulnes niega cualquier responsabilidad en los delitos que se cometieron. Su defensa expuso el lunes 20 de enero en la sexta jornada de formalización en el Cuarto Juzgado de Garantía. “Primero, ¿cuál es la participación exacta de Manuel Bulnes? No puede ser la creación de un chat. La participación no puede regirse por un estándar de esa naturaleza. Segundo, ¿cómo es que Manuel Bulnes es responsable por un delito de administración desleal cuando no es siquiera administrador?”, indicó ese día su abogado Jorge Boldt, según consignó Ex-Ante.
Boldt hace mención a un chat, porque según la fiscalía, Manuel Bulnes creó un grupo de Whatsapp donde se coordinó la creación del fondo. Según los persecutores, Bulnes fue el ideólogo del vehículo de inversión pensado para rescatar a Antonio Jalaff. “Una solución de mercado”, dijeron varios de los involucrados.
La estafa
Según la minuta de la formalización que elaboró el Ministerio Público, Bulnes le encargó al también socio de Larraín Vial, y director de finanzas corporativas de la corredora, Felipe Porzio, el diseño y la implementación del fondo. Los antecedentes que acumulan los fiscales Juan Pablo Araya y Felipe Sepúlveda incluyen testimonios que apuntan a que Porzio y otros ejecutivos de Larraín Vial incluso participaron en reuniones invitando a inversores a comprar cuotas del fondo.
La acusación que realizó la fiscalía ante la jueza Cheryl Fernández del Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, apuntó al rol que le cupo a los socios y ejecutivos de Larraín Vial en los delitos detectados:
“Intervinieron en la realización de una serie de maniobras que tuvieron por objeto la creación, estructuración y puesta en marcha del Fondo de Inversión Capital Estructurado I, con el objetivo de utilizar dicho Fondo y los recursos obtenidos a través de él para, sin una adecuada valorización y mediante maniobras engañosas y fraudulentas, hacer frente a las deudas por una suma aproximada de $28.000.000.000 que mantenía Antonio Jalaff“, indica la minuta de la formalización.
La fiscalía acusó que parte de los dineros que engrosaron esa deuda provenían de ilícitos. Y argumentó que Larraín Vial no chequeó la procedencia de los fondos. Factop tenía articulada una bicicleta de facturas falsas que utilizaba para generar dinero fresco que le prestaba a personas como los Jalaff. El Ministerio Público también aseguró que en Factop cometieron el delito de invasión del giro bancario y estafa.
Originalmente, para el Fondo Capital Estructurado I se idearon tres tipos de aportantes: la serie A estaba pensada para los acreedores de Antonio Jalaff; la serie B eran inversionistas que inyectaron capital; y la serie C fue ideada para los socios de Larraín Vial, aunque esta nunca se implementó.
La corredora de bolsa STF ―propiedad de los Sauer y de Rodrigo Topelberg, entre otros― fue la encargada de colocar en el mercado las cuotas de la serie B, las que fueron ofrecidas a los mismos clientes de STF. Según la fiscalía, la oferta a los inversionistas contenía información falsa y engañosa. El objetivo habría sido obtener dinero “para el pago de las acreencias que tenían sus empresas con Inversiones San Antonio y, además de ello, obtener el pago de Factop Spa cuya deuda mantenía operaciones con facturas ideológicamente falsas, así como de los acreedores más agresivos y evitar de esa forma una liquidación forzosa de Inversiones San Antonio lo cual afectaría tanto a estos imputados como a sus empresas”, indica la minuta de la fiscalía.
El Ministerio Público acusa que Manuel Bulnes creó un grupo de Whatsapp el 17 de mayo de 2022, denominado “Convertible y financiam”, en el que se coordinó la estructuración del fondo. Allí participaban, siempre según la acusación de los fiscales: Cristián Menichetti, entonces gerente de operaciones de Grupo Patio; Claudio Yáñez, a la fecha gerente general de Larraín Vial Activos; Felipe Porzio y Álvaro Jalaff, el hermano de Antonio que coordinó a los asesores encargados de reestructurar la deuda por más de $28 mil millones.
A ese grupo, dicen los fiscales, luego se incorporaron otros ejecutivos como Marcelo Medina, quien era el contador de confianza de los Jalaff, y Andrés Bulnes Muzard, hermano de Manuel y presidente de Larraín Vial Activos, en cuyo directorio se aprobó formalmente la creación del fondo.
Entre las acusaciones que pesan sobre los socios y ejecutivos de Larraín Vial está el que no certificaron las deudas de Antonio Jalaff. Según la fiscalía, “no verificó la fuente de las obligaciones que reconocía, no se tuvo a la vista ningún documento legal, como letras, cheques, o facturas originales, ni siquiera respecto al principal acreedor que era Factop, pero además incrementó considerablemente el número de acreedores, permitiendo que sociedades relacionadas al deudor y a su hermano y a su socio, estuvieran en el listado de créditos elegibles para el Fondo, pese al evidente conflicto de interés”, señala la minuta de la formalización.
El 24 de enero de 2023, el fondo administrado por Larraín Vial habría adquirido créditos cuyo deudor era Inversiones San Antonio, la sociedad de Antonio Jalaff que concentraba sus pasivos. Entre esos créditos se contaban deudas con Factop por más de $1.950 millones.
Esos créditos se compraban con el dinero aportado al fondo por quienes compraron cuotas de la serie B.
El Ministerio Público también halló reconocimientos de deuda a Inversiones Las Vegas, sociedad donde participaba Álvaro Jalaff, el hermano de Antonio que coordinó la estructuración del fondo: “11 de los 13 créditos adquiridos mediante recursos de la Serie B fueron créditos de acreedores que intervinieron en la estructuración y puesta en funcionamiento del Fondo (Factop, STF, Inversiones Patio, Las Vegas), quienes actuaron interesados en cubrir sus propias acreencias, sin resguardar el interés del Fondo”, se lee en la minuta de los fiscales.
Según cálculos del Ministerio Público, el 77% de los recursos obtenidos gracias a los aportantes de la serie B fueron en beneficio de sociedades relacionadas con Antonio Jalaff. Las maniobras descritas por los fiscales durante las extensas jornadas de formalización, habrían provocado un perjuicio patrimonial a la serie B del fondo por $1.967 millones. Y respecto de los aportantes de la serie A la pérdida habría sido de $4.143 millones.
Para Manuel Bulnes Muzard la fiscalía pidió las medidas cautelares de arraigo nacional y arresto domiciliario nocturno mientras se desarrolla la investigación. Para Álvaro y Antonio Jalaff solicitaron la prisión preventiva.