El Gobierno refuerza sus críticas a Piñera y Chadwick sale en su defensa acusando una “actitud matonesca”

Suman y siguen las críticas y observaciones por parte de ministros de Estado al gobierno de Sebastián Piñera, luego de que el ex Presidente asegurara este jueves que la actual administración debe hacer una “profunda reflexión” sobre las reformas que impulsa, además de pedir “menos voluntarismo, menos eslogan, menos división; más diálogo, más unidad, y más cordura”, entre otros ítemes.

Luego de que el titular de Interior, Rodrigo Peñailillo, ayer abriera los fuegos acusando al ex mandatario de “destruir las instituciones” en su gobierno, -y pidiéndole más “tino” en sus declaraciones-, durante al jornada otros ministros de Bachelet han reforzado su respuesta.

Uno de ellos fue el ministro de Justicia, José Antonio Gómez, quien según consigna radio Bío Bío aseguró que el gobierno anterior produjo una crisis en las relaciones del Ejecutivo con el Poder Judicial, haciendo referencia a las críticas que en su momento sus autoridades hicieron a la “puerta giratoria” y el excesivo “garantismo” en el trato a los procesados.

Para el ministro radical, Piñera “tuvo una preponderancia de tratar de responsabilizar a terceros de responsabilidades que también son compartidas, y en ese sentido nosotros no tenemos esa línea”.

Por su parte, el titular de Hacienda, Alberto Arenas, planteó que Piñera “se auto-posicionó como un gerente” durante su administración, calificando como “lamentable que sus declaraciones no sintonicen para nada con las necesidades actuales del país”.

Antes de ellos, el vocero de gobierno, Álvaro Elizalde, aseguró que Piñera está impulsando una agenda personal. “Mientras el Gobierno piensa en Chile, Sebastián Piñera piensa en Sebastián Piñera. Y la gente nota la diferencia”, sentenció.

La reacción de Chadwick

Ante la arremetida gubernamental, el presidente de la fundación piñerista Chile Avanza, Andrés Chadwick, dijo que existe una “sobrereacción” del Ejecutivo ante el “nerviosismo y la tensión” que significarían los problema para sacar adelante sus reformas, asegurando que se trata de un plan “concertado” para desacreditar al ex mandatario.

“Esta es una reacción del Gobierno totalmente concertada, 4 ministros de Estado que en vez de acoger la posibilidad de de un diálogo se inclinan por declaraciones descalificadoras, actitudes matonescas y mentiras. Uno se queda pensando ‘por dios que duele la verdad cuenda es dicha’. Lamentablemente, los efectos de los actos del Gobierno los sufren todos los chilenos, y particularmente la clase media”, dijo el ex ministro y primo de Piñera.