La columna del lector: Chile conoce Maipú gracias a Cathy Barriga

*Por Lautaro Berríos

Es un deber para cada vecino Maipucino dejar en claro cuál es el verdadero rol de Kathy Barriga en nuestra ciudad. Mientras que los envidiosos no hacen más que ejercitar, como nunca lo han hecho en su vida, sus lenguas viperinas solo para denostar y hacer mofa del agradecimiento de los vecinos de buen vivir con su alcaldesa, ella no solo avanza como nunca se haya visto en la historia de la comuna.

Siendo Catherine Barriga la egregia atlas del Maipú que entra al siglo XXI con alas de acero, es sin duda ella la alcaldesa que este pueblo merece. Un pueblo lleno de bríos e hidalguía, era evidente que merecería una excelente gestora por edil. Dueña de una historia de herculeo esfuerzo, logró vencer a la vida, lejos de asumir los discursos catastrofistas y negativos de aquellos que sostienen el determinismo social como excusa a su ausencia de espíritu de superación, en lugar de criterio determinador del justo equilibrio social.

Son los vecinos los que deciden que el alcalde sea el alcalde y los vecinos, el alcalde: cuando el alcalde hace gobierno, lo hacen también los vecinos. La alcaldesa Catherine Barriga ha sido un vehículo de los vecinos para hacer patente la nueva administración, siempre eficiente, siempre optimista, vaciándola de los tan desdeñables operadores políticos, esa grasa que el Estado aún no logra deshacerse, pero tal como Kathy, a fuerza de ejercicio y régimen, ha logrado deshacerse de esa grasa, tal como en su apolíneo cuerpo.

Por que Kathy, la primera mujer en ser alcalde de Maipú, le imprime su impronta femenil, que no es femenina, débil por naturaleza, ni feminista, que está transida por el marxismo cultural: feminil, que es la forma en que la mujer interviene en la arena pública.

Y es que antes de Kathy Barriga, Maipú no existía en el ámbito de los medios de comunicación. ¿Me pueden nombrar a un solo alcalde de Maipú de los años anteriores? Seguramente que ninguno, y es que Maipú era administrado por funcionarillos de segundo orden, políticos grises y opacos cuya función era distribuir recursos para la camarilla de turno y nada más. En cambio, con la llegada de Kathy Barriga vemos una comuna moderna, hiperconectada, con hipermercados, colegios, servicio de agua potable continuo y hasta universidades. Es una ciudad pujante, no un mero dormitorio para el personal de servicio del Cono de alta renta, como los malintencionados comentaristas resentidos pretenden hacer creer.

Si Kathy Barriga fue objeto de la gratitud de sus vecinos, merecido lo tiene. Si ellos quieren condecorarla en vida con loas que se reservan una vez pronunciado el discurso fúnebre, es su determinación. Que no venga el intervencionismo Nuñoíno a dictar los criterios con que Maipú decide su destino.

Por Lautaro Berríos
Comodoro 2° de Carabineros ®
Empresario del rubro de los lácteos
Crítico cultural