Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Deportes

19 de Octubre de 2022

Detractores, pelotas y ansias de mundial: Footgolf, el deporte que avanza en Chile con campeona sudamericana y canchas propias

En 2013, la periodista Claudia Ríos y su esposo, el ex arquero Andrés Parada, recibieron una curiosa invitación. Se trató de un evento de footgolf, el cual tuvo como ganador al retirado guardametas, pero cuando quisieron encontrar información del deporte, no encontraron nada. Recién en 2018 obtuvieron noticias de un torneo organizado en Chile: el mismo año ingresaron a la Asociación de Footgolf y disputaron una cita planetaria como seleccionados nacionales en Marruecos. The Clinic habló con ellos y con el presidente de la asociación para entender de qué se trata este juego y cómo llegaron a organizar su primer Open con estándares oficiales para repartir puntos clasificatorios rumbo al mundial de Orlando 2023.

Por

Un amigo de Claudia Ríos y Andrés Parada conoció el footgolf en Argentina, hace casi una década. Por ese entonces y tras retornar a Chile, una marca deportiva le pidió organizar un torneo, y decidió invitar a la pareja: la periodista y el ex arquero quedaron maravillados con el juego que combina el fútbol y el golf. “Eso es lo que tiene el FootGolf, la persona que lo conoce y lo juega termina un poco rayada”, dice Claudia.

Aquel torneo lo ganó Andrés, quien no sabe explicar si eso fue lo que lo motivó a interesarse más por el juego, pero lo cierto es que por años no tuvo información sobre este deporte a nivel nacional. Hasta que en 2018, vio una publicación del jugador de fútbol profesional, Carlos Espinoza, en la que difundió un torneo.

Claudia y Andrés asistieron a ese campeonato, ahí se enteraron que este deporte crecía a nivel mundial y que incluso existía la Asociación Nacional de FootGolf de Chile, de la cual hoy ambos son parte: actualmente, Ríos es seleccionada y se encarga de las comunicaciones, mientras que Parada también es parte de la institución, además de capitán y director técnico del combinado nacional.

¿Qué es el FootGolf?

Lo primero es aclarar que este deporte se juega en una cancha de golf y con un balón de fútbol aro cinco. Cada jugador puede usar el esférico que más cómodo le parezca, mientras respete las medidas reglamentarias. El objetivo es introducir la pelota en un agujero acorde al tamaño, en la menor cantidad de golpes posibles, en circuitos de 9 a 18 hoyos. En resumen, se trata de golf jugado con el pie. “La mayoría de las reglas provienen del golf”, comenta la pareja.

Dependiendo del número de hoyo que se juegue, se destinará una cantidad de golpes que se le puede dar al balón para poder introducirlo, si el jugador logra hacerlo en una menor cantidad de toques de la estipulada previamente, obtendrá una puntuación negativa, mientras que si se excede, tendrá una postiva.

Por ejemplo, dos jugadores tienen tres intentos. Si el primero logra embocar en dos golpes tendrá una calificación de -1 en ese hoyo, mientras que si el segundo lo hace en cinco, tendrá +2. Finalmente, el participante con el menor número de toques será el ganador.

“Yo que fui futbolista decía: ‘obvio que no va a ser difícil’. Aparte que veía y estaba a cinco metros del hoyo, pero al final eso para mí es lo más difícil, porque en el fútbol los pases no siempre son al pie. Mientras que para los que no juegan fútbol esa precisión es lo más fácil, pero les cuesta patear con fuerza”, comenta Andrés, mientras agrega que las condiciones climáticas, como viento o lluvia influyen en la precisión y distancia que se puede lograr tras patear el balón.

Cortesía Asociación Nacional de Footgolf

La vestimenta consta de zapatos de futbolito sin estoperoles -para evitar estropear el pasto- y medias de fútbol, mientras que los shorts y la elegante polera de pique que se usan son elementos que provienen del golf. 

Respecto a sus orígenes, el footgolf proviene de Holanda, y aunque hay precedentes de este deporte desde hace más de 30 años, en 2009 fue oficializado bajo el formato de juego que se conoce hoy. Desde ahí, ha tenido un proceso gradual para expandirse por el mundo: en la actualidad se han jugado tres mundiales y Chile ha disputado dos. Tiene formato masculino, femenino, y senior para personas mayores de 45 años, pero se puede competir individualmente y en equipo, en líneas de cuatro jugadores. 

Es un deporte cotizado por ex jugadores de fútbol profesional: Patricio Galaz en Chile, Roberto el “Ratón Ayala” y Sergio Vázquez en Argentina son algunos de los futbolistas retirados que juegan habitualmente footgolf. El país trasandino junto a Francia, Inglaterra y Japón, son considerados países fuertes en la disciplina, incluso cuentan con deportistas profesionales que pueden vivir de los auspiciadores, según comentan Claudia y Andrés.

La organización de este deporte está bajo el mando de la Federación Internacional de FootGolf, que dividió el mundo en cuatro confederaciones: Sudamérica; Norteamérica; Europa; Asia y Oceanía quedaron juntos.

Existen dos tipos de torneos organizados por estas federaciones, que son repartidos entre los países que las integran: los Mayors que reparten 1000 puntos, y los Open que reparten 500, 250 o 100 puntos. La cantidad de puntos a repartir dependerá del tamaño del torneo. “Funciona en una escala de 92%. Si es un torneo de 100 puntos, el primero gana 100, el segundo gana 92 puntos y así sucesivamente hasta llegar a cero”, explica Parada. “Muchos jugadores no logran sacar puntos en los torneos porque no alcanzan”, complementa Ríos.

Parada comenta que asistió a un Mayor en Estados Unidos en la que participaron 200 jugadores. A pesar de haber salido 30, obtuvo apenas 80 puntos. “En el fondo está bien, tiene que haber una diferencia con el primero”, explica.

FootGolf en Chile

Cuando Andrés Parada vio la publicación de Carlos Espinoza en redes sociales en la que se publicitó un torneo de footgolf, no dudó en asistir. En el campeonato, él y su esposa conocieron a Eduardo Piccolo, presidente de la Asociación de Footgolf de Chile.

“El año 2012 recibí una solicitud para una reunión con el presidente de la Federación Internacional, y nos propusieron hacernos cargo del desarrollo de este deporte en Chile. El footgolf ya había despegado en Argentina y la Federación tiene un ánimo de ir sumando países. Yo había jugado previamente en Argentina, y conocía a las personas que dirigían el tema allá, ellos le propusieron mi nombre a la federación para hacerme cargo en Chile”, explica Piccolo sobre la formación de la asociación nacional.

Selección Nacional de FootGolf en Copa Sudamericana Argentina 2022

Los primeros campeonatos no fueron con ánimo competitivo, de hecho carecían de un calendario fijo: la idea era familiarizar a las personas con la jugabilidad, enseñar las reglas, los códigos de vestimenta y captar la atención. Estos primeros eventos se realizaron en la comuna de María Pinto, en la Región Metropolitana. “El primer campeonato se inscribieron 22 jugadores” recuerda Piccolo. 

“Nosotros tenemos una base de datos de más de 1500 jugadores. No significa que todos sean activos, son jugadores que han participado en nuestros torneos, algunos con mayor y otros con menor frecuencia. Tenemos un núcleo duro de 30 jugadores, y un grupo de 200 a 300 jugadores que asisten cada dos o tres torneos. Es un deporte que consume mucho tiempo y hay quienes no consiguen el espacio o los permisos para jugar”, complementa el presidente.

La realidad deportiva

El footgolf está bajo la mira del Comité Olímpico Internacional, por lo que si más países se suman a la federación, podríamos ver este deporte en la cita de los anillos en los próximos años. “El Comité exige una cierta cantidad de países afiliados y una cierta cantidad de jugadores por país también”, explica Ríos. En Chile, por su parte, el footgolf es reconocido por el Ministerio del Deporte.

A pesar de lo anterior, el desarrollo de esta disciplina es aún incipiente en el país, de hecho sólo existen dos canchas de footgolf como tal a lo largo del territorio nacional: una en Frutillar, y otra en Pirque. Los seleccionados deben practicar en canchas de golf que no están adaptadas para el tamaño del balón. Esta práctica puede traer problemas.

“Existen detractores. El golf está asociado a un público más exclusivo, y por ahí al golfista más ortodoxo no le hace gracia ver a alguien con una pelota de fútbol en su cancha. Existe ese choque de prejuicio al principio, pero la mayoría de los golfistas cuando conocen de que se trata bajan la guardia, incluso muchos terminan jugando. Ese es mi caso, yo vengo del golf, fui golfista toda mi vida”, explica Piccolo.

“Todavía no tenemos el apoyo que nos gustaría tener”, sincera Ríos. No obstante, Chile ha podido participar en dos mundiales: en 2016 en Argentina y en 2018 en Marruecos. Además, en mayo de este año, Natalie Delgado obtuvo el primer lugar en la categoría femenina en la Copa Sudamericana disputada en Argentina.

“Nos juntamos en el Parque Araucano, en una cancha de fútbol que nos prestaron, súper artesanal. Nos falta un poquito más de apoyo en esto, pero el compromiso que hubo de la selección fue muy grande, muchos venían después de la pega a entrenar, el Pato Galaz venía de Argentina para que entrenáramos”, comenta Andrés sobre la experiencia Sudamericana, que fue el primer campeonato en el que los seleccionados jugaron en el formato de equipo.

“A Marruecos fuimos una delegación de 18 jugadores. No nos fue mal, pero nos dimos cuenta del mundo que era esto, estaba televisado, había países que llevaban canales de televisión, las canchas eran espectaculares”, explica por su parte Claudia respecto a otra de las experiencias internacionales que han tenido.

Desde la Asociación Nacional de Footgolf, son claros: el objetivo es que el deporte crezca. Así como cuenta con nueve fechas World Tour, esperan poder atraer más jugadores y campeonatos más grandes a futuro en un deporte que tanto en Chile, como a nivel mundial, empieza a manifestarse con fuerza.

Notas relacionadas

Deja tu comentario