La Red en su hora más oscura: rating del canal es de 0,1 punto y momento actual abre dudas sobre su futuro

Un momento complejo está viviendo La Red por estos días. Pese a que el miércoles pasado estrenó un programa nuevo llamado Caja de Pandora, que su gran premisa es que se convertiría en el primer espacio de la televisión chilena conducido por inteligencia artificial, el esfuerzo parece no ser suficiente para levantar a la señal de su profunda crisis, que se arrastra desde hace un año.

El nuevo programa está bajo el alero de Digital Media Prime, agencia que busca revivir el horario prime, con este formato que cuenta con Camila Andrade, la periodista Marilyn Pérez, el actor José Luis Briceño y Jorge Pichara (El Cuico Roto).

Pero la tarea es titánica, ya que en por estos días, según datos obtenidos por The Clinic, en el horario prime el promedio de rating es de 0,2 puntos, que lo dejan en los puestos finales de los canales, donde Mega, CHV, Canal 13 y TVN se reparten los primeros cuatro lugares en las preferencias de la audiencia. Hasta hace un par de años, Mentiras verdaderas conseguía convertirse en TT y conseguía un rating que fluctuaba entre los 3 y 5 puntos promedio.

Ampliando la mirada, el escenario es aún menos auspicio hoy en día, ya que el promedio de rating del día es de 0,1 punto. Su mejor horario se encuentra entre las 00:30 y 2:00 horas, momento en el que marca 0,4. En ese bloque, emiten la serie Sex And The City y un programa de televentas.

Un presente que La Red hace frente sin sus rostros históricos. A comienzos de abril, Julia Vial decidió dejar la señal, tras 17 años trabajando en distintos programas. “Tengo que empezar a buscar trabajo el lunes, como cualquier chileno”, dijo en aquella oportunidad a LUN. Antes, su excompañero en Hola Chile, Eduardo de la Iglesia, también optó por dejar la señal.

Otro que dejó La Red fue el reportero Nacho Pop, quien hoy está en TV+ y que en una reciente entrevista mencionó que aún le deben dinero. También lo hizo el periodista Eduardo Fuentes, que emigró a TVN, también con problema de pago de su sueldo.

El actual momento del canal privado ha abierto dudas respecto a su futuro, porque con tan bajo rating -el más bajo de al menos la última década- abre dudas respecto a su viabilidad económica. Por ahora su dueño, el mexicano Ángel González, propietario de más de cincuenta canales en América Latina, no ha dado señales de un cambio, luego de la polémica salida de Víctor Gutiérrez, en junio del año pasado, cuando el ejecutivo implementó numerosos programas de factura propia que no consiguieron conectar con las audiencias y motivaron el último traspié del canal.