Gobierno gana round contra la oposición y logra aprobar veto a la Ley de Usurpaciones en el Senado

Tras sobrepasar la valla de la comisión de Seguridad Pública del Senado, este miércoles la ministra del Interior, Carolina Tohá y su par de Segpres, Álvaro Elizalde, anotaron un nuevo triunfo legislativo: lograron sortear en la Cámara Alta el veto presidencial sobre la Ley de Usurpaciones, siendo consideradas todas las observaciones del Ejecutivo al proyecto de ley.

La noticia le otorgó un salvavidas al Gobierno en el Legislativo, que en los últimos días había mirado con cautela el avance del veto en el Senado. Ello tras esbozarse por parte del presidente de la comisión de Seguridad Pública, Felipe Kast (Evópoli), la posibilidad de recalificar -es decir, cambiar la calidad- las observaciones enviadas por el Gobierno.

Sin embargo, al comenzar la discusión en la comisión del martes, Kast descartó de plano esa idea: “hemos tomado la decisión de no recalificar ninguna de las observaciones que ha hecho el Ejecutivo“. En desmedro de ello, eso sí, la oposición anunció que levantará un proyecto de ley que logre saldar lo que quedó materializado esta jornada -y que favorece al Ejecutivo-: las penas de cárcel.

Al momento de presentar el veto, el Gobierno no ocultó sus diferencias que tenían en cómo la legislación en torno a usurpaciones establecía cargos de presidio para todos los casos, incluyendo la ruptura de cualquier objeto al interior de la propiedad privada.

En ese sentido, el Gobierno en un comienzo habló de situaciones “pacíficas“, que luego renombró de “no violentas“. En tales casos, Tohá argumentó que debía existir gradualidad en las penas “de acuerdo a los niveles de gravedad que estos (casos) tuviesen”.

Sin embargo, tal punto no genera completa satisfacción en la oposición ni en sectores de centro. Sin ir más lejos, el propio presidente de la Cámara de Diputados, Ricardo Cifuentes (DC), señaló a comienzos de este mes que “todas las usurpaciones tienen que tener pena de cárcel, aunque no se use la fuerza“.

Pese a la disconformidad de Kast con el veto en sí mismo, el senador catalogó la instancia como “un gran avance“.

Con el texto aprobado en el Senado, la discusión se desplazará a la comisión de Seguridad de la Cámara Baja, el cual lo recibirá el 6 de noviembre, luego de la semana distrital. Por otro lado, la oposición no ha entregado mayores detalles sobre el proyecto de ley que buscarán ingresar para restituir las penas de cárcel.