La ruta de la noche en Santiago: 13 locales para comer que están abiertos hasta la medianoche (o incluso más tarde)

Es sabido que muchas cosas no volvieron a ser lo mismo tras el fin de la pandemia y sus restricciones. En este sentido, algo muy evidente -al menos en la ciudad de Santiago- que la oferta nocturna, a la hora de comer y beber algo, se redujo de manera más que considerable. No es que antes la capital chilena tuviese una noche como las de Buenos Aires, Nueva York o Madrid; pero al menos se podía sin mayores problemas comer en restaurantes hasta cerca de la medianoche y luego siempre se encontraban bares u otro tipo de boliches que ofrecían algo de beber y también comida hasta bien entrada la madrugada.

Ahora la cosa es diferente. No solo hay restaurantes que cierran sus puertas -con suerte- a eso de las once de la noche (lo que hace aconsejable sentarse a comer nunca después de las nueve), sino que también existen no pocos que decidieron transformarse en negocios diurnos, por lo que solo atienden con un turno continuado desde la hora de almuerzo hasta más o menos las siete de la tarde.

Por su parte, muchos bares cierran sus puertas alrededor de las once de la noche, coincidiendo con el fin de las operaciones de la red de Metro. Y claro, a eso de la medianoche o pasadita esa hora se produce un cierre en masa de todo tipo de boliches. Para la madrugada solo quedan funcionando los locales donde se baila y uno que otro sobreviviente de la noche, porfiado, que trata de estirar el chicle para recibir a los siempre sedientos y trasnochadores santiaguinos que nunca faltan. El resto de la ciudad, un verdadero páramo, incluso desde temprano. Por todo lo anterior, vale la pena mencionar a los valientes que siguen cerrando tarde, casi en una nueva forma de resistencia.

Noche de Plaza Italia hacia abajo

Durante décadas el sector de Plaza Baquedano se caracterizó -entre otras cosas- por albergar locales como el Prosit, La Terraza o la Fuente de Soda Baquedano; que cerraban pasadas las tres o cuatro de la madrugada. En la actualidad -aunque los boliches existen- esto no sucede, pero afortunadamente quedan algunos destellos de lo que fue esta zona hasta antes del llamado Estallido Social y la pandemia.

De esta forma, hay que agradecer que la fuente de soda Blasco (Avenida Providencia 59, teléfono 990401427, Providencia) cierra pasadita la medianoche en días de semana, pero que viernes y sábado estire el elástico y se mantenga en funcionamiento hasta alrededor de las dos de la mañana. Y si se sigue caminando hacia el poniente es posible encontrarse con otra fuente de soda, la Costa Bright (ex Costa Brava, Alameda 248, teléfono 226342977, Santiago), que para alegría de todos cierra en la semana a eso de las dos de la mañana y que jueves y viernes funcionan incluso por una hora más.

A una cuadra de ahí, en la esquina de Portugal está el Bar Alameda (Portugal 2, Santiago), que rompe con la tendencia imperante y funciona de lunes a domingo hasta las cuatro de la mañana. Al frente, el interior del GAM, está el Bar El Bajo (Alameda 227, teléfono 948072775, Santiago), que los domingos cierra a la medianoche, los lunes y martes a la una y el resto de los días a las dos de la mañana.

La noche en Providencia

Aunque no arrastra con la fama de trasnoche de Plaza Italia, por estos días, en ciertos puntos de esta comuna, aún existen lugares que pasan -aunque sea algunos días- de la barrera de la medianoche. Es el caso del Bar Valdivia (Pedro de Valdivia 1764, teléfono 224192966, Providencia), que cierra los domingos a medianoche y lunes y martes a la una. El resto de la semana se mantiene estoico hasta las dos de la mañana.

De los mismos dueños es el Bar El Retiro (Constitución 181, teléfono 4143134632, Providencia), que funciona martes y miércoles hasta la una de la mañana, mientras que de jueves a sábado están operativos por una hora más.

Y la Cantina Montt, que siempre recibe a sus clientes con buenos tragos y buena comida para seguir bebiendo, funciona de martes a jueves hasta la una de la mañana y viernes y sábados hasta las dos. Algo es algo, ¿no?

Y aunque en clave más juvenil, los boliches ubicados en el recién remodelado pasaje Orrego Luco sur cierran en las noches de semana pasado la una de la mañana y los viernes y sábados se pueden alargar hasta las tres. Aunque, claro, más que comida lo que hay en esta zona es bebida e incluso algo de baile. Y en la frontera sur de la comuna siempre se puede contar con el también clásico Bar de René (Santa Isabel 369, teléfono 222221900, Providencia), que conserva un horario progresivo. Es decir, martes hasta las dos de la mañana, miércoles hasta las 3 y de jueves a sábado hasta las cuatro. En síntesis, de los más trasnochadores del Barrio Italia.

Hacia el oriente

Buscando y buscando hace poco me encontré con el histórico bar de estilo irlandés Geo Pub (Encomenderos 179, teléfono 222336675, Las Condes), que a partir de los jueves se mantienen en funcionamiento hasta las dos y media de la mañana con una interesante oferta de cervezas y algo de comida.  

Y hablando de comida también vale la pena destacar a Miguelayo (www.miguelayo.cl), una pequeña cadena de locales de hamburguesas y sándwichs que funciona todos los días las veinticuatro horas y que ya cuenta con sucursales en Apoquindo, Cantagallo y Macul. Lamentablemente, en Miguelayo no se vende alcohol. Pero bueno, en ninguna casa da el sol todo el día.

Otra cadena, pero con el alcohol, es la de los bares Barba Azul (www.barbazul.cl), donde tiene una buena oferta de comidas y bebidas y -lo más importante- con horarios de atención que sobre todo a partir del día miércoles pasan de las tres de la mañana. Aunque ojo, son muchos locales y en distintas comunas, así que lo mejor es chequear antes.

San Miguel

La emblemática comuna de la zona sur de la capital, cuna de personalidades como Mario Palestro, Jorge González y la banda de rock Chancho en Piedra -por solo mencionar algunos nombres- también tiene algo que decir en este tema de la pobre oferta nocturna de la ciudad. Así las cosas, está la cervecería Santa Cebada (Gran Avenida 5892, teléfono 973698036, San Miguel), que ofrece cerveza y buena comida de lunes a miércoles hasta la medianoche, pero que a contar del jueves funciona hasta la una y viernes y sábado hasta las dos. Y también está el Casa Brotherwood, un bar de vinos y cervezas -más comida- que los viernes y sábados se mantiene al pie del cañón hasta las dos de la mañana.

Al final, la cosa es así. Si se quiere comer en un restaurante tranquilo y sin apuro, hay que estar sentándose a la mesa entre ocho y nueve de la noche. De lo contrario, en algún momento de la velada les vendrán a avisar que pidan rápido porque la cocina va a cerrar. Así nomás están las cosas en lo que a restaurantes se refiere. Y si se quieren tomar algo y ojalá también comer bien entrada la madrugada, no queda otra que buscar esos pequeños puntos de la ciudad que mantienen viva la noche. De lo contrario, no habrá más que acudir al triste panorama de alimentarse en el minimarket de una estación de servicio.