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Reportajes

25 de Febrero de 2020

Claudia Pizarro: “No tenemos nada que perder porque lo hemos perdido todo”

Video y fotos por Valentina Manzano

La pena se le escapa de los ojos cuando recuerda a Baltazar, el niño de 9 meses que murió en octubre pasado por una bala loca en el barrio Raúl del Canto, en La Pintana. Durante la entrevista no es la única vez que Claudia Pizarro se emociona. También lo hace cuando piensa en hacer historia con el plebiscito de abril y poder cambiar la Constitución que sus padres pelearon para no tener. Dice que ya tiene su candidato para representar a la comuna en una Asamblea Constituyente: Benito Baranda. Y cuando dice Asamblea Constituyente, llora. La alcaldesa de La Pintana se siente afortunada de liderar un momento histórico.

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Video y fotos por Valentina Manzano

Aprueba la definición de mujer de emociones fuertes y profundas. Si tiene que contar un logro, como el de las cooperativas que ha logrado sacar adelante en la comuna, se le quiebra la voz. Y cuando habla del narcotráfico, y cómo ha avanzado después del estallido, se indigna. Lo atribuye a que antes de ser alcaldesa es pintanina y siente como ellos. “He sufrido caleta por salir adelante, políticamente por el machismo y también como pintanina siento el dolor de la gente. No me tienen que decir como sufren porque lo he vivido” confiesa. Recuerda a Baltazar y a sus padres que lo vieron morir por una bala loca que atravesó el techo de su casa e impactó directo en él. Semanas después, su padre renunció por sistemáticos abusos laborales que soportaba por ser inmigrante. Ella le encontró un trabajo en la Municipalidad porque no puede dejar de sentir como una madre. El luto aún la acompaña.

¿La muerte de Baltazar es lo que más le ha afectado durante su gestión?

-Lo que me afectó de su muerte es que, en el fondo, no ha cambiado nada. La violencia sigue creciendo como respuesta al entorno violento. Las muertes acá no tienen que ver con el estallido social, no culpemos al estallido social. El problema es que vivimos en un entorno violento que nos invita a ser violentos y eso no ha cambiado nada porque no encontramos respuesta de parte del Estado.

¿Cree que una nueva Constitución va a cambiar la realidad de La Pintana?

-Creo que una nueva Constitución donde nos sentemos a pensar lo que necesitamos, y no lo que queremos, es lo que tiene que pasar. Los problemas que vivimos en este país son estructurales, de conformar y arrinconar a los pobres en comunas donde sólo se construyeron viviendas sin servicios. Este modelo nos invita al individualismo, el que tiene más puede comprar salud, el que tiene más puede comprar educación y acceso a más oportunidades. No pensar en los que no tienen es invitar a tener una vida más corta, sin oportunidades. Ese modelo neoliberal se agotó y hay que cambiarlo.

Usted ha hablado varias veces de un abandono del Estado. Desde ese abandono, ¿puede comprender la violencia en las calles?

-La entiendo perfectamente. Es violento que acá no tengamos los buses nuevos, la gente pasa más tiempo arriba del bus y, sin embargo, vas a tu trabajo y quedas en pana. Es violento que no piensen en nosotros. Si a mí me ponen un bus nuevo yo lo voy a cuidar porque sé que están pensando en nosotros. Tener metro es un anhelo y una esperanza porque sabemos que va a llegar la inversión privada y nos van a mirar de otra forma.

¿Le falta empatía a la clase política que pide condenar la violencia?

-Por supuesto que le falta empatía, en entender los orígenes de esa violencia, en no darle oportunidades a esa gente. Los cabros que están en la calle son cabros que, a lo mejor, no han tenido ninguna oportunidad en la vida de surgir y que no quieren llegar a adultos mayores porque ven a sus abuelos. A su abuelo en la plaza con una jubilación miserable con la que no se puede vivir. Les falta sentido común a los políticos para entender cómo se vive.

¿Se puede llegar a consensos cuando hay tantos años de rabia?

-Creo que como país tenemos que pensar en el bien común y dejar de lado las ideologías políticas. Hay que sentarse a resolver los problemas que necesitamos resolver. Escuchar que no queremos más AFP. El Presidente no ha dicho nada sobre la reforma previsional, queremos escuchar eso pero se hacen los sordos y la gente está cansada. Tenemos que sentarnos a construir un país nuevo, un nuevo Chile. Esta transición ha durado mucho tiempo.

¿Cuánto de su trabajo avanzó y retrocedió después de la crisis?

-Antes de la crisis estábamos seguros que a los supermercados no les iba a suceder nada. En esto ganamos, en obligarlos a ellos que invirtieran en seguridad, que es su deber. El no invertir es dejar más utilidades para ellos. Nunca había conversado con ellos y ganamos poder sentarnos a mirar una comuna en forma preventiva. Tenemos inseguridades que resolver, no sólo ellos, entre todos. Debemos cuidarnos entre todos. Y conversar con el privado era algo que no habíamos hecho. Retrocedimos en que esos días lo perdimos todo, lo poco que teníamos lo perdimos. Sin embargo nos sirvió para ver la debilidad que teníamos y tener una coordinación permanente. Perdimos dos vidas humanas que no vamos a recuperar nunca. Lo material se recupera pero lo humano no lo vamos a recuperar.

Y el trabajo con el narcotráfico retrocedió…

-Están de fiesta. Habíamos ganado la confianza de los vecinos en las instituciones policiales, habíamos tenido problemas en la Subcomisaría de Carabineros y fue un trabajo de afianzar en el territorio la presencia policial como estado de derecho. Lo perdimos. Es un terreno que vamos a recuperar pero lo perdimos al día de hoy. Volvieron los fuegos artificiales, volvieron las balaceras permanentes y eso se había ido cautelando con la presencia de las policías en los territorios.

La necesidad de recorrer la comuna es imprescindible para informar sobre el plebiscito, ¿cómo lo hace con una amenaza de muerte a cuestas?

-Lo hago con bastante cautela porque es problemático andar con un carabinero. Lo más importante es el trabajo cara a cara con los vecinos y no lo dejo de hacer. En todo este tiempo las organizaciones de la comuna han ido creciendo y tenemos una buena relación con ellos. Nuestra principal misión es construir comunidad en cada uno de los territorios y es nuestro canal de comunicación empoderando a los dirigentes. Eso es lo que hacemos, es complejo estar en los bingos pero sí tenemos un buen trabajo colaborativo con las organizaciones.

“QUIERO HACER HISTORIA EN MI COMUNA”

Claudia Pizarro es la primera en levantar la voz cuando se habla de diferencias en los presupuestos municipales. No cree que exigirles más recursos a las cuatro comunas más ricas de Chile sea suficiente para resolver el problema de la desigualdad. Va mucho más allá, dice. Esta semana los micrófonos volvieron a buscarla para denunciar que en noviembre y diciembre del año pasado recibieron menos dinero del Fondo Común Municipal, la principal fuente de financiamiento de los municipios. La vocera de gobierno, Karla Rubilar, aseguró que esto se debía a “situaciones administrativas” y que se repararía los primeros meses del año.

Claudia Pizarro sueña con la billetera de Las Condes pero en ningún caso dejaría La Pintana para ahorrarse problemas. Ya definió que va a la reelección porque su anhelo más grande es inaugurar una estación de metro y dejar en alto el apellido de sus padres. Hacer historia, como lo llama ella.

Cuando se hablaba de fortalecer el Fondo Común Municipal para disminuir la desigualdad en los presupuestos de las comunas, el alcalde Joaquín Lavín se comprometió a pasarle mil millones de pesos. ¿En qué se invirtieron esos fondos?

-Los dineros no han ingresado a las arcas municipales después de ese anuncio y no van a ingresar. La Pintana va a elegir las prioridades en conjunto con los dirigentes de los sectores y después nos sentaremos a trabajar. Después el proyecto lo maneja y lo paga la Municipalidad de Las Condes. Ese es nuestro convenio pero la gente piensa que el municipio tiene los mil millones y que no ven nada.

¿Le costó críticas aceptar estos fondos de Las Condes?

-Como alcaldesa no puedo negarme a esa donación a través de proyectos, soy la alcaldesa y los vecinos no me perdonarían negar eso por una condición ideológica. He tenido bastantes problemas y troleos por esto porque me han dicho que he vendido la conciencia de La Pintana a la derecha. Para mí no está permitido negarme a recibir esos ingresos.

¿Es más fácil hacer la pega en Las Condes que en La Pintana?

-Con el presupuesto que tienen, sí. Ellos tienen menos problemas que nosotros y más presupuesto. Yo amo La Pintana, no pensaría ser alcaldesa de otra comuna. Pienso que deberíamos tener el presupuesto de otras comunas aquí, para resolver con autonomía los problemas. Nosotros pensamos que si los chiquillos no van al colegio es tremendo y los vamos a buscar para que vuelvan a la escuela, y vamos con Carabineros cuando dejan de asistir. Eso no lo hace todo el mundo, a nosotros nos preocupa eso porque tener educación es una base. En ese sentido creo que hay desigualdad, creo que los colegios de Las Condes no se llenan, no tienen los problemas que tenemos acá y lo mismo pasa con los Cesfam. No tener un médico para atender es un problema tremendo para la comunidad, acá no hay clínicas. Allá caminas una cuadra y tienes una clínica. 

¿Va a ir por la reelección?

-Quiero seguir siendo alcaldesa de La Pintana. No me marea ser candidata de otra cosa que no sea mi comuna y me la voy a jugar. Voy a la reelección. Soy la primera mujer alcaldesa, luché mucho por llegar a este lugar y creo que cuatro años son poco. Quiero estar aquí para inaugurar el metro y hacer historia en esta comuna, dejar bien puesto mis apellidos y mi género. En ese sentido hoy estoy 100% dedicada a ese objetivo.

¿Le queda pila?

-Tengo la pila, la garra. Soy súper guerrera, igual que todos los pintaninos, y cualquier cosa no nos tira abajo porque somos resilientes y luchadores. Vamos a salir adelante. Estamos haciendo historia todos los políticos y ciudadanos. Algo que me tiene muy marcada por mi juventud es haber acompañado a mi mamá al Caupolicán y haber escuchado al presidente Eduardo Frei Montalva hablar de Asamblea Constituyente…vi como mis padres lucharon por no tener esta Constitución y temí por la vida de ellos porque fue la primera vez que vi militares en la calle por un tema político. La derecha ha hablado tan mal de la Asamblea Constituyente y yo sueño con eso. Quiero que hagamos historia y liderando esta comuna me la voy a jugar por la participación ciudadana, más que por el apruebo o el rechazo.

¿Quién es un buen representante de La Pintana en una Asamblea Constituyente?

-Me representa Benito Baranda, un pintanino de tomo y lomo. Me la voy a jugar para que sea nuestro constituyente.

¿Se lo ha planteado?

-Muchas veces le he pedido a Benito que sea candidato a diputado, a alcalde y siempre me dijo que no. Con el estallido social y cuando propusimos esta consulta ciudadana lo llamé por teléfono y le dije “oiga, esta vez no me puede decir que no, porque para todos los temas políticos me ha dicho siempre que no quiere representar a La Pintana y le pido que sea el constituyente de la comuna”. Dijo inmediatamente que sí, que le gustaba la parte social más que la política y que ahora sí.

¿Le trae recuerdos el plebiscito de abril?

-Me trae recuerdos porque a raíz de esos anuncios mataron a Eduardo Frei Montalva y todavía no se hace justicia. También creo que por esta vía ciudadana podemos hacer justicia. Me la voy a jugar y espero que los pintaninos me acompañen en esto. Es súper fuerte porque estamos estigmatizados con la baja participación electoral, es el 20%, y eso también nos trae a colación el bajo interés en este modelo de sociedad. Creo que esto es lo que buscamos, cambiar esta sociedad y este plebiscito es el inicio para cambiar este diseño estructural que nos tiene agobiados y que empezó con esta mala Constitución donde no tuvimos derecho a participar. Hoy es el momento.

¿Se siente afortunada de estar liderando un proceso de participación ciudadana en estos momentos?

-Me siento afortunada, súper afortunada. Y creo que nosotros tenemos que mirar esto como una oportunidad de hacer historia como autoridad, como motor movilizador de toda una comuna estigmatizada. Nos han dicho de todo, cuándo van a buscar trabajo y oportunidades nos miran mal y creo que esta es la forma de ir cambiando esto. No se va a solucionar todo con un cambio de Constitución creo que vienen a continuación esos cambios y hay que jugársela. No tenemos nada que perder, lo hemos perdido todo. 

¿Sus papás van a votar? -Sí, y por eso los cuido tanto.

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