Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

La Convención

16 de Febrero de 2022

Lo bueno, lo malo y lo feo: Crónica de la primera jornada de votación de normas en el pleno de la Convención

Lo bueno, lo malo y lo feo: Crónica de la primera jornada de votación de normas en el pleno de la Convención Agencia Uno

Una foto para la historia. La vuelta sobre el, aparentemente, interminable debate de los ⅔ y la autoridad de la presidenta Quinteros para zanjarlo. Cuchicheos en los pasillos del ex Congreso que especulaban sobre los votos más buscados de la sesión y las defensas empedernidas por la justicia plurinacional. La aprobación de 14 de las 16 iniciativas propuestas. Una jornada extensa: 9 horas y dos minutos. Aquí, las escenas que marcaron la primera sesión del pleno para votar artículos para la nueva Constitución.

Por

Antes de comenzar el debate, los convencionales presentes en el ex Congreso el martes 15 de febrero se tomaron una fotografía histórica.

“¡Vengan para la foto po!”, se escuchaba decir en los jardines del ex Congreso. Y ahí, entre risas y abrazos, los 154 convencionales cristalizaron la primera sesión del pleno en que se votaron normas constitucionales. Algunos sonrieron a la cámara, otros se taparon un ojo, otros levantaron el puño.

Una vez tomada la instantánea, los grupos volvieron a separarse para deliberar en privado y hacer cálculos sobre lo que se vendría: la votación sobre los 16 artículos que la comisión de Sistema de Justicia despachó al pleno de la asamblea. Así, la Convención entró en su recta final.

¡Son ocho horas de debate!

—¿Qué onda los socialistas, ya se decidieron?

—Ahí andan conversando… — respondió con cierto desdén la convencional Jennifer Mella (Ind. CS), señalando con la punta de su nariz a un grupo de nueve hombres vestidos con camisas celestes (seis de ellos) y blancas (tres), que reían y fumaban formados en un círculo en los jardines del ex Congreso.

La curiosidad por los integrantes del Colectivo Socialista no era casual: según los cálculos que los convencionales hicieron antes de la primera votación del pleno sobre las normas constitucionales, se les mencionaba como dueños de los votos que podrían ser claves —junto con los de los convencionales de la Lista del Apruebo— para la aprobación de normas fundamentales para el informe de Sistemas de Justicia. Entre estas, el artículo 2°, que establece la creación de un sistema jurídico indígena basado en las costumbres y cosmovisión de los pueblos originarios.

Al grupo que deliberaba en el reservado círculo, se acercaron dos convencionales:

—¿Estai listo? —preguntó el convencional Ricardo Montero (PS).

—¿Para qué? —inquirió su colega Matías Orellana (PS).

—Weón, ¡Son ocho horas de debate!… Imagínate se ponen creativos. — respondió riendo Montero, quien ha sido señalado como uno de los principales articuladores del Colectivo. Ambos vestían camisas blancas.

En tanto, en las mesas ubicadas en el frontis del emblemático edificio blanco, entre voces que razonaban en conjunto: “esa figura del vicepresidente me conflictúa un poco” -en relación a la norma aprobada en general en la comisión de Sistema Político-, otros colectivos también comenzaban a prepararse para una larga jornada.

—¿En cuál café van?

—En el tercero… — respondió con un asomo de risa la representante Rapa Nui, Tiare Aguilera, quien caminaba al lado del convencional Aimara, Luis Jiménez.

—Uff, les quedan hartos aún —le contestó una asesora del grupo, lo que provocó una risa cómplice en la convencional.

¡Por qué no podemos debatirlo acá!

Cuando corrían las 15:15 horas, comenzó a sonar la campanilla de la presidenta de la CC, María Elisa Quinteros (Mov. Sociales), llamando a los convencionales que aún seguían en los jardines haciendo cálculos. Afuera del salón, en tanto, flameaban las banderas de los siete pueblos originarios presentes en la Convención.

Adentro, Fernando Atria (Ind. RD) y Arturo Zúñiga (UDI) se pararon frente a frente. Separados por los cerca de diez metros que mide el diámetro del hemiciclo donde sesiona el pleno de la Convención Constitucional, ambos, en puntos diametralmente opuestos de la sala, guardaron un minuto de silencio.

A petición de la presidenta del órgano, María Elisa Quinteros, acaso la sesión más crucial del pleno de la asamblea comenzó con sesenta segundos de conmemoración silenciosa por las recientes víctimas de homicidio: Valentín Quezada, joven trans encontrado sin vida en la región del Ñuble luego de estar desaparecido por seis días; y Héctor Saavedra, conductor de aplicación asesinado en la comuna de Coquimbo.

Cerrado el solemne acto inicial, los 154 convencionales volvieron sobre una de las polémicas inacabadas más trascendentes del proceso constituyente: el quórum necesario para la aprobación de normas.

Esto valió que convencionales de lado y lado pidieran la palabra para aferrarse a la última posibilidad de que la mesa acordara reconsiderar la interpretación del reglamento —que consagra los dos tercios como quórum—, mientras otros buscaban cerrar la puerta de una vez y por todas a que el guarismo pudiera ser reevaluado.

¡Por qué no podemos debatirlo acá en el pleno!”, insistió, agitado y en su estilo, el convencional Hugo Gutiérrez (PC), pidiendo, al igual que otros representantes de Chile Digno, Pueblo Constituyente y la Coordinadora Plurinacional, que el quórum fuera definido ahí mismo, en una votación, por los 154 presentes.

Por su parte, otros, como Rodrigo Álvarez (UDI), esgrimían argumentos basados en el texto constitucional vigente o en los registros audiovisuales de la comisión de reglamento, en donde se fijaron los polémicos dos tercios, hace casi cinco meses.

La discusión caldeó los ánimos de la sala, al punto que convencionales como Beatriz Sánchez (RD) e Ignacio Achurra (CS) celebraron la definición que tomó la mesa, el lunes 14 de esta semana, de ratificar los dos tercios. “La gente ya nos ha tenido suficiente paciencia, no abusemos”, pidió Achurra.

Al término del debate, la presidenta, María Elisa Quinteros, tomó la palabra: “Pasamos casi seis meses dotándonos de un reglamento que nos permitiera trabajar”, comenzó diciendo a modo de tirón de orejas para un debate que, a esas alturas, ya parecía estarse repitiendo a sí mismo.

“Los ocho integrantes de la mesa directiva asumimos este desafío de interpretar las normas oscuras del reglamento siempre con un espíritu de eficacia. Por lo tanto, respetaremos las normas del reglamento que nos hemos otorgado”, terminó diciendo la presidenta, quien el día anterior había votado, en la reunión de la mesa ampliada que revisó la polémica, a favor de reinterpretar el polémico quórum.

Con eso, quedó zanjado el debate.

“Una justicia real”

A eso de las 17:40, el llamado volvió a sonar: el debate de las normas emanadas de la comisión de Sistemas de Justicia debía comenzar.

Quien primero levantó la voz ante sus pares, fue el convencional Ruggero Cozzi (RN), miembro de la comisión cuyo informe sería votado, y uno de los acérrimos detractores de lo que en ella se aprobó.

“Con muchas responsabilidad, quiero decir que este primer informe de la comisión de Sistemas de Justicia contiene no una, sino muchas malas propuestas. De los dieciséis artículos que se someten a votación, estamos por rechazar nueve de ellos”, espetó Cozzi, quien, en su argumentación comparó la norma que busca cambiar el nombre del Poder Judicial por el de Sistemas de Justicia con una idea integrada en la constitución chavista de 1999.

Por su parte, el convencional Aimara Luis Jiménez, también parte de la comisión de Sistemas de Justicia, tomó la palabra para resaltar la importancia de los artículos 2° —el que crea el sistema de justicia indígena— y el 15° —que busca que la función jurisdiccional adopte la perspectiva intercultural—.

“Ya no más que los abuelos o nuestros padres vayan con papeles antiguos y que nos digan: estos indios, para su casa, no saben. Sólo son unos bárbaros que no saben hacer otra cosa que causar problemas”, dijo Jiménez al micrófono.

Por su parte, el convencional Manuel Woldarsky (Coordinadora Plurinacional), miró de frente a la cámara que transmitía la sesión por streaming al momento de realizar su defensa del articulado.

“Querido Chile, la minoría no ha entendido nada. Pero no se preocupen, los enojados no buscamos venganza. Tampoco buscamos convertirnos en otro país. Proponemos justicia, pero una justicia real. Que no se parezca a la que tenemos, para que no sea necesario pagar por ella para obtenerla”, dijo el abogado en su intervención.

“Lamentablemente, fuimos testigos de un nulo entendimiento entre los distintos colectivos. Difícil construir un texto representativo”, alegó la convencional del Partido Republicano, Ruth Hurtado. “Aunque algunos de la comisión insistan que así es la democracia, a mí no me parece que sea democrático pasar máquina”, finalizó la vicepresidenta de la tienda fundada por José Antonio Kast, antes de poner sobre la mesa unas cifras que su sector preferiría olvidar.

En 198 votaciones (en la comisión), no sobrevivió ninguna propuesta de Vamos por Chile aprobada en general y se rechazaron todas las iniciativas presentadas por Vamos por Chile y el Colectivo Socialista”, terminó Hurtado.

Un momento particular se dio cuando la ex presidenta del órgano, Elisa Loncón, tomó la palabra. “Chile es observado más allá de su frontera por la incorporación de la paridad y de las naciones originarias. Y cómo no va a haber una comisión de sistemas de justicia que lo incorpore, ello no puede quedar ausente”, dijo, con el tono épico de siempre, la predecesora de María Elisa Quinteros, a quien, luego de celebrar los artículos 2° y 15° de la propuesta, se le acabó el tiempo. Con lo cual, su intervención terminó abruptamente, pero rodeada de aplausos de sus pares.

“¡La Ale se puso la 10!”

En el tercer receso de la jornada. Alrededor de las 20:00 horas, el cansancio y el hambre empezaba a sentirse en los convencionales, que ya llevaban cinco horas de sesión. A esa altura, había recién concluido el primer bloque de las intervenciones de los defensores y detractores de las normas presentadas ante el pleno. Y la votación aún no se veía en el horizonte.  

En ese contexto, los integrantes de la mesa ampliada dieron un punto de prensa. “Cada una y cada uno de los convencionales tiene el derecho a pedir la palabra y es por eso que desde ahora hasta que sigamos aprobando normas en el plenario tendremos extensas jornadas de deliberación, con discusiones que pueden durar ocho horas o más”, dijo el vicepresidente de la instancia, Gaspar Domínguez (INN).

“Ha sido una jornada intensa, y aún tenemos muchas palabras pedidas”, complementó la presidenta, María Elisa Quinteros, sepultando las esperanzas de los convencionales que, mientras la noche se tomaba el ex Congreso, aún pensaban que podrían evitar trasnochar.

Así, mientras las mesa daba las malas noticias, al otro lado de los jardines de la sede parlamentaria, la convencional de la Coordinadora Plurinacional, Alejandra Pérez, cruzó la reja que da hacia Compañía de Jesús con una bolsa llena de panes, bajo un brazo, y un paquete de queso laminado y de jamón, bajo el otro. La mesa en donde estaban sus compañeros de colectivo rompió en celebraciones.

¡La Ale se puso la diez!”, gritó Manuel Woldarsky, en referencia al número de camiseta futbolera que han ostentado grandes ídolos del balón pie, desde Pelé hasta Messi.

Aplausos, abrazos, gritos y celulares grabando la historia

Daban las 23:26 horas cuando la convencional Amaya Álvez (RD) terminó su intervención, y el secretario de la mesa, John Smok, dijo acaso la frase más anhelada de la jornada: “No habiendo más palabras, damos por cerrado el debate”. La votación podía comenzar.

El primer artículo del informe —que establece que “la jurisdicción es una función pública que se ejerce en nombre de los pueblos”— fue aprobado por 107 votos a favor. Superó por cuatro apoyos el mínimo que requería para pasar a su discusión en particular, que se realizará este jueves 17 de febrero.

Así, se comenzó a calentar los motores para la norma más trascendente y esperada del informe: el artículo 2°, que establece la creación de un sistema de justicia indígena que coexistirá con la justicia nacional.

La expectación era alta. En el hemiciclo casi todos estaban de pie. Se movían entre los asientos y por los pasillos. Hablaban entre ellos. Se frotaban las manos.

La mayoría de los convencionales favorables al artículo sacaron sus celulares y grabaron la tensa espera, como quien presiente que algo histórico está a punto de pasar.

“Han emitido su voto, señoras y señores convencionales”, dijo John Smok, como tantas otras veces a lo largo del proceso constituyente. Sólo que en esta ocasión, sus palabras precedieron al momento más crucial que ha vivido la asamblea hasta la fecha. Y el ambiente lo evidenciaba.

Bastó que se proyectara el resultado de la votación en la pantalla, para que el pleno rompiera en aplausos, gritos, felicitaciones y abrazos: 114 votos a favor. Aprobado en general.

El artículo aún deberá sortear la discusión en particular del jueves para quedar consagrado en la propuesta de texto constitucional, pero para los convencionales poco importó al momento de celebrar.

¡Estimadas constituyentes, respetemos las medidas de cuidado del Covid!”, interrumpió María Elisa Quinteros desde la testera, poniendo la cuota de responsabilidad necesaria para bajar a los constituyentes de nuevo a la Tierra.

Los convencionales dejaron de abrazarse, pero eso sólo significó que comenzaran a golpear los mesones del salón a modo de instrumentos de percusión.

¡Les ruego que no golpeen los muebles, por favor! Porque los equipos son bastante sensibles”, dijo Smok, tirándoles la oreja a los presentes, quienes veían, con una alegría creciente, cómo la mayoría de los artículos del informe de Sistemas de Justicia eran aprobados.

Con todo, entre gritos, pañuelos verdes que ondeaban en el aire, abrazos y más gritos, el pleno de la Convención logró aprobar catorce de dieciséis artículos presentados por la comisión de Sistemas de Justicia. Sólo se rechazaron el 4° y el 8°, que estipulaban la inamovilidad de los magistrados y las condiciones para la ejecución de las resoluciones por parte de los órganos que ejercen jurisdicción, respectivamente. 

Estos dos artículos, ahora, volverán a su comisión de origen, la cual tiene un plazo de quince días para realizar modificaciones y volver a proponerlos al pleno.

Vamos dando vida a esta promesa constituyente”, celebró la presidenta del órgano, María Elisa Quinteros, al terminar la sesión. Junto, claro, con finalizar con un recordatorio para los convencionales que seguían con ánimos festivos: “¡Recuerden mantener la distancia, por favor!”

También puedes leer: Ruggero Cozzi, convencional RN: “Los sectores radicales están sepultando el sueño de cerrar el capítulo constitucional de buena manera”


Volver al Home para seguir leyendo más notas de The Clinic

Notas relacionadas

Deja tu comentario