Fabricante de Oreo, Toblerone y Milka enfrenta boicot empresarial por seguir en Rusia y pagar impuestos que contribuyen al ejército

El conglomerado de confitería, alimentación y bebidas Mondelez Intenational, que fabrica importantes marcas como Oreo, Toblerone, Chips Ahoy y Milka, está enfrentando un boicot empresarial por mantener su presencia en Rusia.

En concreto, una serie de empresas de Noruega y Suecia informaron que dejarán de vender productos producidos por la compañía. Alguna de estas son las aerolíneas SAS y Norwegian Air, la cadena de hoteles Strawberry, el grupo ferroviario SJ, el minorista Elkjop, el grupo naviero Fjord Line y la Asociación Noruega de Fútbol.

Esto debido a que el plan de expansión que no ha tenido en cuenta el conflicto bélico con Ucrania y no ha seguido la tendencia actual de otras marcas como IKEA, Zara, McDonalds, Starbucks, Apple, Spotify, Netflix y Microsoft, entre muchas otras.

De acuerdo a Reuters, la compañía tiene una fuerte presencia en Noruega y Suecia a través de sus fabricantes locales de chocolate Freia i Marabou. Al contrario de las empresas occidentales que vendieron sus activos rusos después de la invasión a Ucrania, Mondelez International se ha quedado a pesar de las protestas de sus empleados en otros países.

Ante ello, las empresas nórdicas tomaron la decisión luego de que la Agencia Nacional de Ucrania para la Prevención de la Corrupción (NACP) pusieran al fabricante de aperitivos en una lista negra.

“Después del inicio de la guerra, muchas empresas que se preocupan por su reputación abandonaron Rusia. Pero este no es el caso de Mondelez International. Por lo visto, sus gestores no están preocupados por el hecho de que al pagar impuestos sustanciales al presupuesto estatal de Rusia, la empresa contribuye al suministro del ejército“, mencionó la organización.

Mientras tanto, la compañía con sede en Estados Unidos respondió a través de un comunicado que buscará reunirse con los ministerios gubernamentales pertinentes para explicar su posición y aseguró que actualmente no vende productos de fabricación rusa en Noruega.