Mauricio Redolés: “En el Frente Amplio hay mucha inexperiencia de cómo robar, entonces los pillan po'”

“Cada día tiene su afán”, es la frase con la que Mauricio Redolés confiesa se mantiene motivado para seguir creando música y poesía. El pasado 6 de junio celebró sus 70 años de vida en la que ha nunca ha dejado de generar su arte y en la que, confiesa, tampoco piensa todavía en retirarse. “Mientras haya alguien que me quiera escuchar, yo voy a estar ahí. Ahora, si todos se cansan, me jubilo”, comenta en conversación con The Clinic.

Actualmente el músico se encuentra realizando una serie de conciertos para seguir festejando sus siete décadas. El próximo lo realizará junto a su banda el 13 de agosto en el Aula Magna del Liceo Manuel de Salas en Ñuñoa. En la instancia también realizará una firma de su libro Otra Cosa: Siento Tres Canciones de Mauricio Redolés, un cancionero de más de cuatrocientas páginas con las letras y acordes de sus composiciones, material fotográfico y relatos del autor alrededor de su obra.

Pero no solo sobre los escenarios haciendo música se mantiene activo el autor de discos como Bello Barrio y ¿Quién Mató a Gaete? Hace poco se estreno el documental Redolés + 50 años de cabaret dirigido por Guillermo Álvarez y también estuvo en un festival internacional de poesía en Caracas y detalla que tiene otras invitaciones para mostrar su arte en Argentina y España. “Vamos a ver que resulta”, afirma.

Dentro de su agenda también se da el tiempo para apoyar a sus más cercanos. “El día 14 de octubre vamos a hacer una una especie de recital con comida para ayudar a un amigo que está enfermo de cáncer. Las coordenadas y todo se ven en [email protected] (también se puede comprar el cancionero). Es el 14 de octubre por un compañero que tiene cáncer, un compañero que para mí ha sido un maestro en lo personal. Su nombre es Hernán Trigo, militante comunista. Un compañero de esos esenciales en la vida, en la lucha, en la política y en todo. Un gran, gran amigo. Estaríamos haciendo unas pizzas con vino y todo eso en algún lugar secreto del Barrio Yungay”, avisa Mauricio Redolés.

-Son 70 años de vida con tu carrera musical y en la poesía, me imagino que igual ves distinto tu carrera a futuro. ¿Cómo te proyecta con 70 años de vida cumplidos?

-Estoy trabajando ahora para sacar el vinilo del Bello Barrio que ha sido muy solicitado. Quiero reeditar mi libro de recuerdos que se llama Algo nuevo anterior que se agotó y también quiero sacar la antología El Estilo de mis Matemáticas que también está agotado y si quedan por ahí, avísenme. La Universidad Diego Portales quiere sacar Tangos que es un libro que tiene dibujos que me regaló el querido Nemesio Antúnez. Ahí están las tratativas con la Fundación Antúnez para obtener el permiso. Y tengo el proyecto desde hace mucho tiempo de publicar mis crónicas. He estado publicando crónicas desde el año 90, crónicas y columnas de opinión. Escribí en La Nación, la revista El Canelo, El Mercurio, El Ciudadano, entonces tengo que hacer una selección todavía.

-Pero sería más como un trabajo de recopilación o te mantienes haciendo nuevas creaciones.

-Siempre. Ahora estoy trabajando con un grupo de músicos que, la verdad es que le pusimos tantos nombres a nuestros grupos, que ahora se llama “Redolés”, como un nombre genérico. Es un grupo en que toca Taku Tricot, que es hijo de mi compañero de celda y de tortura, Tito Tricot, y es ahijado mío, porque lo bautizamos en una ceremonia pagana. Tenemos tres bronces, bajo, batería, una acordeón maravillosa de una gran, gran, gran acordeonista, muy joven, que se llama Natalia Soto. Habitualmente invitamos también una armónica para los blues, Daniel Barrantes. Estamos también siempre escribiendo crónicas y poesía, esta labor de recopilación. Estamos también musicalizando la poesía de Roque Dalton. Hicimos un recital el 10 de mayo que se cumplieron 48 años de su asesinato. Queremos grabar estas nuevas canciones. Tenemos conversaciones con un productor para que produzca el disco. En fin, siempre se están haciendo porque cada día tiene su afán, es como la frase de este momento para mí. La verdad es que para mí crear, estar escribiendo y cantando es una diversión, es como un hobby, por lo tanto no me cansa. No es un trabajo que me agote, del cual yo me quiera jubilar.

La muerte de “Cecilia, la incomparable”

Pese a que aún se mantiene activo, la muerte no es un tema ajeno para Mauricio Redolés. En 2016 tuvo que ser internado de urgencia producto de un accidente cerebrovascular. “La muerte está al lado nuestro siempre. O como dice Jorge Luis Borges: ‘Morir es una costumbre que sabe tener la gente’. La muerte existe porque existe la vida. Entonces mi idea es disfrutar de la vida, aprovechar la vida, aprovecharla cuando hay salud, fundamentalmente, cuando hay trabajo, amor, cuando hay una causa por la cual luchar”, señala.

Para el poeta todo esto “nos hace sentirnos vivos y agradecidos de la vida. También es una apuesta. Pensemos en los miles de jóvenes que murieron enfrentando la dictadura de Pinochet y Guzmán. Pensemos en los jóvenes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, del Lautaro y del MIR que murieron porque pusieron su vida a disposición, por estar luchando. Por lo tanto, en la vida, la muerte también es parte muchas veces de una ofrenda por la libertad de su sociedad, de su pueblo, de su país”.

“Lo lamentable es la muerte de la gente joven, es algo que uno no desea de los niños, ahí sí es muy doloroso. Ya pasada cierta edad y ciertas condiciones de salud, es un descanso. La eutanasia debería ser un derecho, la buena muerte para poder descansar la gente que está enferma. Este criterio de hacer vivir a la fuerza yo nunca lo he compartido”, añade.

En este tiempo además Mauricio Redolés ha debido enfrentar la partida de compañeros del mundo de la música que también lo hacen reflexionar sobre este tema, como el fallecimiento de “Cecilia, la incomparable” que dejó un gran vacío.

-¿Sientes que con su muerte faltó algún reconocimiento para ella?

-Yo creo que sí. Yo creo que Cecilia fue muy especial. Su figura va ir creciendo con el tiempo, no me cabe la menor duda y creo que va a crecer de una manera exponencial. Ahora se es una serie de televisión y van a venir más cosas, no me cabe duda. Ella se opuso a la biografía que escribió Juan Cristóbal Peña, Cecilia: La vida en llamas, que creo que se debe haber vendido pirateada en las cunetas más de lo que se había pensado hacer editorialmente. Hay una cantante, Lorena Huenchuñir, una compañera mapuche que tiene un registro de voz increíble, muy parecido al de Cecilia que ahora tiene mucho trabajo porque la gente quiere más Cecilia. Entonces eso es por un lado y, por otro lado, su historia de vida.

Sobre este punto Mauricio Redolés recalca que la oriunda de Tomé rompió “con muchos paradigmas y esquemas de lo que era considerada el ser femenina en la música. La Ginette Acevedo, Palmenia Pizarro, Miriam Hernández y para qué seguir con todas las cantantes posteriores, las de su época y las anteriores. Todas calzaban de una u otra forma con un estereotipo femenino: ideológicamente mujer. Ella (Cecilia) no po’. Ese es el gran valor de Cecilia y el gran pecado de Cecilia”.

En esta línea cuestiona que “para los medios de comunicación de masas en su momento de alguna forma u otra ella fue invisibilizada, excluida, censurada. Estuvo hasta presa y ella se mantuvo, no lloró, no anduvo llorando por la vida diciendo ‘mira lo que me hacen. No me invitan a tocar’ o lo que sea. No, ella siguió. Una mujer también muy de ese espíritu que tiene la gente de Tomé, Penco, Coronel o Concepción. Mi madre era de Concepción y en algún sentido también tenía algo de Cecilia. Mi mamá, Flor María Bustos. Tiene algo de también el gran escritor Alfonso Alcalde, que también es de Tomé. Es una tierra interesante toda esa región de Chile y el arte que se produce desde allí”.

“Bueno, Cecilia es una una de las principales heroínas del Chile actual. Ya no está con nosotros físicamente, pero sus canciones, su voz y su vida queda como un permanente ejemplo para miles y millones de mujeres en Chile y en todo el mundo de ser una mujer independiente, que desafiaba patrones culturales, que no le agachaba el moño a nadie”, sentencia.

Mauricio Redolés y el género urbano

Uno de los temas que preocupa a Mauricio Redolés en el ámbito de la música es como el género urbano, acusa, promueve la individualidad y corrompe a la sociedad. “Vivimos con un pueblo muy ignorante. En Chile se ha rodeado de ignorancia al pueblo. En muchas poblaciones no están preocupados de sus propios destinos ni de sus trabajos, están preocupados de cómo comprarse un par de zapatilla. Y ahí se mete el narcotráfico”, apunta.

Sobre esto además señala que “el consumismo tiene que ver con el narcotráfico, con mucha producción de lo que se llama el género urbano que es cantarle al culo y a las tetas de la mujer, cantarle al falo, cantarle a las armas, a la droga. Eso es lo que están haciendo ahí”. La indignación del cantante aumenta al afirmar que en este contexto “existe una especie de flaiterío lumpenesco en todo esto que está corrompiendo la sociedad, corrompiendo a la juventud”.

“En Chile la emoción estaba puesta en los 70 en un país, hoy día la emoción está puesta en la individualidad, en la puesta en escena, en cómo me veo mejor, en cómo me saco una selfie. Pero no todo el mundo es así. Hay muchos y muchas jóvenes que desafían este tipo de modelo de sociedad que se nos quiere imponer. Ahí está la salvación”, rescata.

-¿Sientes que falta un mayor rol de la música actual en términos políticos?

-Claro porque se ha cortado de manera transversal la historia de la música en Chile. Creo que hay un pasado y un presente. En el pasado está Víctor Jara, Violeta Parra, Inti-Illimani, Isabel Parra, Patricio Manns, Richard Rojas, el Indio Pavez y para atrás hay muchos más. Y todo lo que viene siendo lo nuevo, viene de Estados Unidos. El género urbano es un género impuesto por la cultura norteamericana en Chile. Yo no tengo nada contra el rap ni el hip hop, todo lo contrario, me encanta. Me encanta cuando hay consciencia, me encanta cuando hay choreza de verdad. Me encanta L-Gante, el argentino que cantaba en la serie El Marginal, que tiene ese tema con Bizarrap. Me gusta mucho el trabajo de los Panteras Negras en Chile, de Legua York. Y grupos de raperos jóvenes que están apareciendo que desafían el molde cultural. El género urbano en sí no es malo, lo que pasa es que se ha transformado en un vehículo del individualismo, del consumismo, del sexismo, del narcotráfico y de la violencia en las calle. Ese es el problema, pero no la forma. En la forma es música como toda la música. Es buena para bailar, para gozar, pero en los contenidos… ojo con eso.

De los 50 años del Golpe de Estado a la inexperiencia del Frente Amplio

Este 2023 se conmemoran los 50 años del Golpe de Estado, un tema que ha generado una gran polarización en el país en medio de lo que además ha sido un repunte del Partido Republicano y algunos sectores que han surgido justificando este episodio. Mauricio Redolés apunta que “hace varios años, unos 20 más o menos o quizás antes, empecé a escribir una crónica sobre el intento que hacía la derecha, el empresariado, el fascismo y la UDI por torcer las verdades históricas en este país”.

“¿En qué sentido? En el sentido de que, bueno, está toda esta mirada filosófica posmodernista, de que la verdad no existe, de que hay muchas verdades, hay tantas verdades como personas existen. Cada uno tiene una verdad. Claro, se puede decir que pueden haber puntos de vista distintos, es cierto, pero los hechos ocurren de una sola forma. O sea, los Hawker Hunter tiraron bombas sobre La Moneda, eso no se puede desmentir. Eso fue de una cobardía feroz. Yo creo que eso mancha para siempre la historia de la Fuerza Aérea de Chile y debieran realizar un gran acto de arrepentimiento, de solicitar un perdón”, sostiene.

Mauricio Redolés además recuerda los crímenes cometidos por el Ejército y la Armada, de los cuales el mismo fue víctima tras ser detenido en diciembre de 1973: “Fui torturado, fui llevado a la academia de Guerra Naval, al cuartel Silva Palma, al campo de concentración en Colliguay que se llamaba Melinka o Isla Riesco. Estuve un mes hospitalizado por las torturas en el Hospital Naval. Fui llevado a la cárcel pública de Valparaíso convaleciente, con la herida de una peritonitis abierta producto de los golpes. Fui interrogado por los agentes del servicio inteligencia en el hospital mientras estaba en la cama. Es una asquerosidad toda esta represión que se ejerció y ahora se trata de decir que Allende fue un gobierno que creó eso. No, eso lo creó la derecha. El gobierno de Allende fue un gobierno exitoso”.

-¿Por qué consideras que fue exitoso?

-La votación de la Unidad Popular iba subiendo, e iba subiendo en un país que estaba bajo el acoso de los Estados Unidos. Habían no se cuántos agentes de la CIA en el momento del Golpe de Estado acá en Chile, el dinero que venía del gobierno norteamericano y que se repartió en los partidos de la derecha, la Democracia Cristiana y El Mercurio para derribar el gobierno Allende. Entonces esos hechos son indesmentibles, pero se quiere torcer la verdad histórica y decir que Allende fue un gobierno que dividió al país. No, yo diría que el gobierno de Allende unió al país por su libertad y su independencia económica. Unió a grandes masas de trabajadores. Mucha gente de la Democracia Cristiana entendía y apoyaba el gobierno de Allende. Pero claro, líderes como Patricio Aylwin… pensemos en el papel que jugó Renán Fuentealba en la Democracia Cristiana que está muy escondido ahí, no se habla de él y era partidario de entenderse con el gobierno de Allende, pero Patricio Aylwin no, Patricio jugaba más para el lado de los norteamericanos.

-¿Sientes que es algo cíclico lo que está ocurriendo actualmente en el país con el negacionismo?

-La “nueva memoria histórica” se llama mi concepto que acuñé hace unos 20 años atrás y empecé a hablar de cómo venía esta mano. Bueno, esto que vemos ahora es resultado de eso. El negacionismo empezó hace unos 30 años. Antes no, estaban calladitos. ¿Por qué? Porque los crímenes de la dictadura estaban frescos, nadie podía defenderla, pero después de a poco empezaron a defenderla. Defender a Pinochet, que es estadista.

Por otro lado, en la contingencia el Gobierno del Presidente Gabriel Boric se ha visto en varios escándalos y situaciones insólitas en el último tiempo. ¿Cómo definirías este escenario que están viviendo?

-Yo creo que este Gobierno tiene de dulce y agraz. Hay cosas evidentemente buenas, como el Premio Nacional que me dieron (risas) y hay cosas que no comparto. No comparto el abandono en que están los profesores. Yo soy hijo de un profesor de educación básica, Luis Redolés Ibacache, hijo de una profesora de educación básica, Flor María Bustos. Soy marido de una profesora, no vamos a dar el nombre para mantener la reserva del caso. Conozco la realidad de los profesores desde niño. Sé de la dedicación que tiene el profesor. Es un trabajo que no para, que sigue en la casa. Eso lo veía con mis padres. Lo veo con mi mujer, con mi compañera. Yo creo que este Gobierno no está dando en el clavo con la cuestión de la educación. No está dando en el clavo la política internacional. ¿Cómo se le ocurre a este Gobierno apoyar a Ucrania? Apoyar a Ucrania es apoyar a la OTAN. Apoyar a la OTAN es apoyar Estados Unidos y sus planes de dominación de todo el mundo. Tampoco yo apoyo a Rusia para nada.

-Y qué opinas de los escándalos por el “Caso Convenios”.

-En el caso de la corrupción, la verdad es que de alguna forma este es un fenómeno que se ha venido dando en los últimos 50 años. Recordemos que el gobierno del presidente Salvador Allende decía: “En mi gobierno se podrán meter las patas, pero no las manos”. En una entrevista que le hicieron a Pedro Felipe Ramírez, que fue ministro de Allende, contaba que hubo una cantidad ingente de esfuerzos por parte de la Junta Militar de Gobierno y por la derecha de encontrar desfalcos y corrupción al gobierno de Allende. No encontraron nada, no encontraron nada. ¿Qué pasaría si hubiera un golpe de Estado de cualquier tipo y se investigara el gobierno de Piñera y los gobiernos anteriores? Se encontraría más de alguna cosita. Esto no es nuevo. Lo que pasa es que, por decirlo de algún modo, en el Frente Amplio hay mucha inexperiencia de cómo robar, entonces lo pillan po’ (risas). Los otros hueones eran más vivos. Claro, no es todo el Frente Amplio que anda robando, pero hay mucha gente que ha metido la mano.

-¿Por qué crees que pasa esto?

-Sabes lo qué pasa, que el Frente Amplio no tiene una gran historia. No es como el Partido Socialista cuando asume Allende. Partido Socialista que le dio la espalda a Allende el año 52. Allende tuvo que formar su propio Partido Socialista y lo apoyó solamente el Partido Comunista. El Partido Comunista fue más fiel a Allende que el Partido Socialista. Eso le duele mucho a los socialistas que les digan, pero es verdad. Pero había un Partido Socialista fuerte, honesto y combativo que apoyó Allende, que no robaban, que no andaban buscando la ventaja del Estado para para sacar plata. Había un Partido Comunista que sigue siendo hasta el día de hoy un partido probo y estaban en estos partidos nuevos como la izquierda cristiana y el MAPU que venían de la Democracia Cristiana. Gente joven, gente honesta. Yo creo que el Frente Amplio se compara más al MAPU y de ahí va a salir de repente su Guillermo Garretón. Bueno, estos viejos de derecha van a salir del Frente Amplio también. Si ya se ve. Espero que no sea el caso de muchos de ellos, que les tengo estimación y que pienso yo que hay buenas intenciones, pero falta una mejor orientación del punto de vista de cumplir con los trabajadores, en cumplir con tener una política independiente de los Estados Unidos y de Europa. En eso yo veo que hay errores y no, no los comparto.