La contienda judicial que enfrenta nuevamente al Bar La Virgen con la Municipalidad de Vitacura

En marzo de 2023, un nuevo local gastronómico abrió sus puertas en Avenida Vitacura 4085, en las cercanías del Paseo El Mañío. Se trataba de una nueva sucursal del Bar La Virgen, una cadena de restaurantes y espacios nocturnos con sedes en regiones y en distintos lugares de la capital.

Sin embargo, al poco andar, en julio, el local cerró sus puertas. Esto, porque la Municipalidad de Vitacura decidió no renovar las patentes municipales para expendio y consumo de alcohol en el lugar.

Según publica DFMás, el cierre del Bar La Virgen desató una pugna judicial entre la empresa -Sociedad Gastronomía La Virgen Vitacura SpA- y el municipio. En octubre pasado, la sociedad -representada por Juan Alberto Schiavoni– interpuso un recurso de protección en la Corte de Apelaciones.

En el escrito, Schiavoni apuntó sus dardos directamente al concejal Evópoli Tomás Kast, quien había concurrido al local meses antes. “El acto de agravio sufrido por Bar la Virgen, posee un germen indeseado para nuestra democracia constitucional, que se denomina amenaza autoritaria”, aseguraba el documento. 

“El concejal Tomás Kast, previo a la sesión de concejo donde no se renuevan las patentes de alcoholes del bar, concurre a sus dependencias -en un aparente acto de fiscalización-, donde no tan sólo se le observa bailando, disfrutando y consumiendo alcohol, sino que también asediando a público en general en la barra de alcoholes. En este contexto, en razón de los hechos, el personal de Bar La Virgen, decide expulsarlo del recinto, donde el concejal arrogándose de facultades, les expresa: ‘los voy a clausurar’, quien posteriormente cumple su palabra”, acusan.

El nuevo round entre Vitacura y Bar La Virgen

Al recurso de octubre se sumó, el pasado 11 de diciembre, un reclamo de ilegalidad presentado en la Corte de Apelaciones. En la acción legal, la empresa reclama que la decisión de no renovar la patente de alcoholes -en la sesión del Concejo del 28 de junio- se tomó sin consultar previamente a la junta de vecinos.

Según Schiavoni, el local ubicado en el sector de El Mañío se mantiene cerrado y la empresa no piensa reabrirlo. Lo que buscan, dice, es que el municipio compense los daños que generó el cierre, que estaría entre los $400 y los $500 millones de pesos. Esto incluiría la inversión inicial, el derecho de llave, la remodelación del local, el pago de arriendos y el finiquito a los trabajadores.

Desde Vitacura afirman que sí se consultó a los vecinos de la Junta A-1 Lo Castillo su posición ante la posibilidad de renovar la patente de alcoholes para el segundo semestre de 2023. Pero, aseguran, la consulta previa no es un trámite vinculante para el municipio y la decisión del concejo.

En un documento, en el que se adjuntan las intervenciones de concejales, el municipio sostiene que “no ha habido trato abiertamente discriminatorio”. Además, la municipalidad plantea que el local utilizaba una patente que no le correspondía.