La caída de la jueza ludópata que falsificaba licencias médicas para ir al casino: perdió $250 millones en apuestas

Una jueza del Tercer Juzgado de Familia de Santiago arriesga la posibilidad de ser removida del Poder Judicial, luego de que un informe confirmara que utilizó licencias médicas para ir a apostar en distintos casinos del país.

Según publicó BioBioChile, la jueza María Alejandra González Yutronic realizó apuestas por más de $1.400 millones, lo que le generó pérdidas económicas que superaron los $250 millones. La cifra quedó reflejada en un informe que elaboró una fiscal a cargo de investigar el caso, que indagó en los sospechosos movimientos que registraba la cuenta bancaria de la magistrada.

El documento reveló que la jueza pasaba semanas completas apostando en casinos como Monticello y Enjoy. “Se tuvo por acreditado que la investigada, de manera reiterada, hizo uso indebido de licencias médicas para fines no autorizados, pues habiéndosele prescrito reposo médico en su domicilio, en lugar de guardarlo, concurría a diversos casinos de juegos, incumpliendo sistemática y deliberadamente el descanso”, afirma el escrito.

La fiscal del caso detalló, además, que la magistrada había utilizado licencias firmadas ―en su mayoría― por el médico Patricio Peña, amigo de la funcionaria judicial. La persecutora descubrió que en varias ocasiones los permisos se emitieron el día después de que González fuera a apostar a los casinos.

“En varios casos la investigada también había estado en el casino el día previo a la extensión de la licencia. La mayoría de ellas eran adyacentes a un fin de semana […]. En algunas ocasiones la indagada pasaba semanas completas, o prácticamente un mes apostando ininterrumpidamente”, aseguró el informe.

Así, el documento concluyó que “la indagada de manera sistemática, 14 veces en un plazo de poco más de dos años, entre septiembre de 2017 y octubre de 2019, se ausentó de las labores propias de su ministerio y dejó de cumplir con su carga laboral, amparándose en una licencia por enfermedad que utilizó para ir a los casinos de juego, quedando en evidencia que puso sus intereses personales por sobre las obligaciones propias de su cargo de juez”. Esto, según la investigadora, es una falta a la probidad y una posible infracción penal.

Las dudas sobre el patrimonio de la jueza que se dedicaba a apostar

El informe detectó, también, que la jueza manejaba una amplia cartera de productos bancarios que no se condecía con su sueldo de $4,5 millones líquidos. Según el estudio, María Alejandra González llegó a tener tres cuentas corrientes, tres cuentas de ahorro y dos cuentas vista.

Además, se descubrió que había recibido millonarios depósitos por parte de su exesposo, que debieron reportarse a la Unidad de Análisis Financiero (UAF). El 16 de septiembre de 2023, se transfirieron a su cuenta en el Banco Santander $8,9 millones en efectivo. Una semana después, se depositaron $7,5 millones en la misma modalidad.

“En el tiempo en que convivimos incluso él se realizó varias transferencias a su propia cuenta, ya que manejaba los dispositivos de claves y que él por distribución de roles familiares ocupaba las tarjetas mientras yo permanecía en el despacho”, explicó la jueza González en su declaración ante el Ministerio Público.

Un aspecto que llamó la atención de la fiscal del caso fue la compra al contado ―en 2017― de siete propiedades en diversas comunas de la Región Metropolitana. En ellas habría invertido alrededor de $200 millones. “Mientras la jueza perdía dinero en los casinos, su patrimonio paralelamente se incrementaba notablemente en un plazo inferior a un año”, hizo notar la persecutora.

Por ello, la fiscal presumió un posible enriquecimiento injustificado y generó cargos por infracciones a la probidad.

“Efectivamente soy titular de tres casas, sin embargo, sólo una se encuentra pagada. Las otras dos tienen asociadas deudas hipotecarias. Efectivamente en el año 2018 adquirí en un remate tres bodegas pequeñas en la comuna de Providencia, por las que pagué aproximadamente un millón y medio cada una. En relación a mi participación en el dominio de otros inmuebles estos corresponden a la sucesión de mi padre, generada en el año 2002, la cual fue ampliada durante el año 2022 para incorporar nuevos bienes”, justificó la magistrada.

“Me causa mucha extrañeza el nivel de vida de mi hermana”

Otro que declaró ante la Fiscalía fue Rodrigo González, hermano de la jueza. En su testimonio expresó que “mi hermana asiste a los casinos hace muchos años. Incluso se hospeda en forma permanente y por varios días en los hoteles relacionados a los casinos. Me causa mucha extrañeza el nivel de vida que tiene mi hermana considerando que es funcionaria pública. Tiene un muy buen nivel de vida para lo que gana”.

Asimismo, detalló que “debido a la concurrencia permanente de mi hermana al casino, se generaron vínculos con la alta gerencia. Incluso mi madre me comentó de esta cercanía a raíz de uno de los juicios en que se solicitaba información de la frecuencia y montos de juego de mi hermana. En esa oportunidad la gerencia se negó a entregar la información requerida por la autoridad”.

“Tengo la impresión de que mi hermana anda metida, hace un tiempo a la fecha, en situaciones que están al límite de la legalidad. Su situación financiera en el último tiempo se ha complejizado, pero de igual manera sigue apostando y jugando en el casino. No me cuadra el nivel de gastos versus lo que gana como jueza de familia”, cerró González.