“Me voló la mente”: el día que Nirvana presentó por primera vez “Smells Like Teen Spirit” a su productor y la transformaron en su gran himno

Han pasado 30 años de la muerte de Kurt Cobain. El vocalista, guitarrista y compositor de Nirvana dejó un legado en su corta carrera en la década de los 90, gracias a varias canciones que se transformaron en himnos generacionales, como “Heart Shaped Box”, “Lithium” y sobre todo, “Smell Like Teen Spirit”.

Esta última apareció en el disco “Nevermind” (1991), considerado por la crítica como su obra más importante y que definió el sonido de los siguientes diez años. Esto, terminaría causando hastío en el propio compositor, quien incluso dejaría de tocarla en vivo hasta su muerte a los 27 años de edad.

Butch Vig, productor de este álbum, recordó la historia de cómo fue que escuchó por primera vez a Nirvana tocar esta canción, y la reacción que tuvo al tener que decidir cómo debería plasmarla en este registro. En conversación con el podcast “The Story Behind the Song“, de Consequence, catalogó como una canción que “me voló la mente”.

La historia detrás de la grabación de “Smells Like Teen Spirit” de Nirvana

“Mire alrededor y les pregunté, ¿qué pasa chicos? Y Kurt estaba como, ‘queremos tocarte algunas canciones’. Les dije que me tocaran algo, y comienzan con ‘Teen Spirit’. Me voló la mente lo bueno que era“, señaló el también baterista de Garbage, quien estuvo detrás de la consola al momento que Nirvana presentó por primera vez esta canción.

Allí, recordó que “normalmente lo que hago es que tengo una pequeña libreta y voy tomando notas cuando estoy en pre producción y escucho algo. Voy haciendo borradores sobre cómo debe sonar, quizás probar una batería diferente, agregar alguna armonía, lo que sea. Con esta canción no escribí nada en esa primera toma”.

“Simplemente caminaba por la habitación, mirándolos y eran increíblemente poderosos. Terminaron la canción, hubo unos pocos segundos de silencio y Kurt me dijo ‘¿Qué te parece, Butch?’. Yo le dije, tóquenla otra vez“, recordó Vig sobre el clásico de Nirvana.

Al volver a interpretarla, señaló que “comencé a escribir notas de forma rápida y comenzó a procesarse lo que estaba pasando, la interacción de cómo estaban tocando y las partes de la canción. Solo notas para lo que necesitaba en la producción“.

“Pero hombre, sonaban tan bien. Esa fue la primera vez que los escuché y así iba a estar en el disco“, fue la determinación del productor, que efectivamente se cumplió, transformándose en una de las canciones que cambiaría la historia del rock.