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Poder

1 de Octubre de 2014

Pentagate: UDI explora, con pesimismo, vía para acuerdo con el Gobierno

En la UDI han consultado al Gobierno sobre la posibilidad de generar un acuerdo como en el caso MOP-Gate aunque admiten que ello es casi imposible y que es probable que el SII denuncie. El análisis es que La Moneda no tiene incentivos para un pacto porque la causa golpea a Velasco como presidenciable y a la derecha como oposición.

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Ernesto Silva A1
La primera aparición desde agosto del fiscal de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Oriente, Carlos Gajardo, para referirse al caso Fraude al FUT, y aludir a su arista política, generó escalofrío en los dirigentes gremialistas.

En momentos en que el partido inició la exploración de un eventual acuerdo con el Gobierno -según confirmaron a este medio autoridades de la UDI-, las palabras de Gajardo respecto del rol del Servicio de Impuestos Internos (SII) en el futuro de la investigación, aunque lógicas, aumentaron la tensión e instalaron la tesis de que habrá sí o sí una denuncia que, en el caso del partido, complicaría al menos la situación del senador Iván Moreira.  De paso, perjudicó la posibilidad de un gran pacto como el que promovió Pablo Longueira durante la administración de Ricardo Lagos cuando el caso Mop-Gate hacía tambalear La Moneda.

Ayer Gajardo desmintió la publicación de La Tercera sobre que se buscaba investigar campañas desde 2009 -en pocas palabras, ir por Sebastián Piñera, amigo íntimo de uno de los dueños de Penta, Carlos Alberto “Choclo” Délano- y agregó algo más, sabido hasta ahora sólo en calidad de trascendidos: “Hay hallazgos en la investigación de la Fiscalía de conductas que podrían ser constitutivas de delitos. Los hallazgos los hemos comunicado al Servicio de Impuestos Internos, y para continuar adelante con la investigación, porque así lo establece la ley, es requisito que el Servicio haga uso de sus facultades y determine, si lo estima a bien o no, realizar una denuncia o una querella por estos hechos”, dijo.

Según comentan fuentes de la UDI, la presión al SII en la práctica anula la alternativa de buscar una salida “política” al asunto, una posibilidad que, aunque se considera compleja, se analizó y sobre la cual ya existieron conversaciones informales. “Eso es así, pero me reservo los nombres”, aseveró una fuente de la tienda a The Clinic Online.

Los nombres, según pudo indagar este medio, sólo podrían ser dos: el Ministro Rodrigo Peñailillo, que se encuentra en España y regresa este viernes y el Ministro Alberto Arenas, de quien depende el SII.

Los más escépticos, sin embargo, estiman que desde antes de la intervención ayer de Gajardo, esta vía estaba descartada. Personeros han destacado en las reuniones de la análisis sobre la causa, que la jefa de Estado, Michelle Bachelet, no tiene el liderazgo de Ricardo Lagos Escobar para buscar un camino que le traería críticas.

Respecto a la posible similitud con el MopGate, en el gobierno agregan un matiz: Si bien Lagos Escobar llegó a un acuerdo político con el ex senador no logró detener las investigaciones de la ministra Gloria Ana Chevesich y sus condenas. En el Ejecutivo creen que no hay agua en la piscina para ejercer presiones ante una eventual denuncia del SII y menos involucrarse en la diligencias de la Fiscalía. De hecho, reiteran que dicho servicio debería en estos días presentar su resolución sobre el tema luego de analizar los documentos entregados por el fiscal Gajardo.

Una alta fuente de la UDI asegura además que en Palacio no hay incentivos para perseguir un pacto porque con el caso Penta el Ejecutivo “golpea” a dos enemigos: En el frente interno, si se judicializa, puede anular a Andrés Velasco, quien aparece mencionado en la investigación; y en el externo, deja en un terreno resbaloso al gremialismo. Un parlamentario acota que en la práctica, la UDI, si hay denuncia o querella del SII por “falsificación ideológica” -que podría darse en el caso del chofer de Moreira por la entrega de boletas por trabajos que no se realizaron- se la pasaría los próximos meses “dando explicaciones, se transformaría en una oposición inocua”.

Como sea, las dificultades del escenario actual han activado no sólo a directiva que conduce Ernesto Silva -sobrino del “Choclo”-, sino también a los coroneles.

Aunque no hay coincidencia entre las fuentes sobre el rol específico de la vieja guardia de la UDI, sí la hay respecto de que Jovino Novoa ha estado atento a como se desarrolla el caso y, cercanos al legislador, sostiene que ha aportado su experiencia en el caso Spiniak. Otras fuentes recalcan que Pablo Longueira también ha sido consultado por la dirigencia y enfatizan su amistad con el ministro de Hacienda, Alberto Arenas y que estaría en disposición de tender puentes. En la Nueva Mayoría recuerdan la estrecha relación de Arenas con Longueira forjada en los años en que tuvo que negociar la Reforma Previsional y otros proyectos de ley importantes en el Parlamento.

En el gobierno están conscientes de esto último y aunque reconocen que el servicio “tiene sus propios ritmos”, saben que la presión política y comunicacional está sobre la institución. Cabe recordar que Michael Jorratt, es un hombre de confianza del ministro PS y conoce al dedillo dicho servicio. Admeás Jorratt acompañó a Arenas en la confección de la reforma tributaria promulgada hace pocos días por Bachelet. Por tanto, es de su círculo.

COMISIÓN INVESTIGADORA

En otra de las aristas políticas que se abrieron en este caso se habían instalado los nombres de dos senadores DC y de un ministro del mismo partido. Pero según pudo constatar este medio, todos los casos estarían descartados, al menos en la declaración del ex brazo derecho de Carlos Alberto Délano, el ex gerente Hugo Bravo. De hecho, en la Nueva Mayoría afirman que el secretario de Estado DC le ha negado tajantemente a todos quienes le han preguntado si su campaña tuvo algún vínculo económico o de financiamiento con Penta. Tampoco emisión de boletas, que fue la información que circuló en los últimos días.

En tanto, en el PS, la estrategia es seguir empujando el tema de Penta y las eventuales responsabilidades de la UDI tanto en el plano comunicacional como el político. Y, por ahora, explican, no se harán más gestiones para una futura comisión investigadora que indague a la par de la vía judicial, pues se espera que el SII “haga la pega”.

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