La impactante historia de una secta que forzó a ayunar hasta morir “para ver a Jesucristo”: fallecieron 384 personas en Kenia

Los espeluznantes asesinatos en el bosque Shakahola, se conocieron las primeras semanas de abril de este año, después de que un hombre se pusiera en contacto con la policía después de que su mujer y su hija se marcharan de Nairobi para unirse a los Iglesia Good News International y no regresaran. El culto católico es liderado por Paul Nthenge Mackenzie.

Esto llevó a la policía keniana a investigar y descubrir tumbas en un bosque del país africano. Las investigaciones preliminares de la policía apuntan a que las personas eran forzadas a ayunar y que al menos cuatro murieron con rastros de estrangulación y asfixia.

Las personas que presuntamente eran miembros de una secta cristiana que ayunaron hasta morir en un bosque del sur de Kenia para encontrarse con Jesucristo. Desde la policía keniana reportan 613 personas como desaparecidas.

Mackenzie y otros sospechosos en la investigación de los 384 fallecidos de Shakahola fueron detenidos y procesados el 12 de junio.

El presidente de Kenia, William Ruto, pidió el 14 de mayo disculpas en nombre de su Gobierno por no haber podido impedir las muertes.

Mackenzie ya había sido denunciado en dos ocasiones 

The Washington Post reporta que residentes de la cercana ciudad costera de Malindi, afirman que no se hizo lo suficiente para detener al líder de la secta. 

Los habitantes de Malindi dijeron que empezaron a oír hablar de Mackenzie, fundador de la Iglesia Good News International, en torno a 2017, donde se decía que animaba a los niños a no ir a la escuela.

En 2017, fue detenido en relación con la muerte de niños de su congregación, pero quedó en libertad bajo fianza. En 2019, los residentes de Malindi lo expulsaron, quemando su iglesia en la zona de Madumbuni.

Después se trasladaría a Shakahola, un remoto bosque del sureste donde se le unieron muchos de sus seguidores. Aquí parece que animó a sus seguidores a morir de hambre.

Una comisión legislativa está investigando al grupo de Mackenzie para determinar las circunstancias que provocaron las muertes. Los grupos de derechos humanos han pedido una regulación más estricta de las instituciones religiosas.