Tratar con una bancada rebelde del oficialismo: el desafío de Jaime Quintana al arribar a la presidencia del PPD

Durante el día de ayer se efectuaron las elecciones internas del PPD, en las que se sometió a votación, entre otras cosas, la lista que liderará al partido por los próximos dos años, liderada por el senador Jaime Quintana.

Para esta ocasión, sólo se sometió a votación a la única lista inscrita, Por el Socialismo Democrático, liderada por el senador PPD y expresidente del Senado quien ya había tomado las riendas del partido en 2012.

La solitaria elección se dio en medio de las semanas ajetreadas que tuvo el partido en el último mes. De hecho, una repostulación de la actual presidenta del partido, Natalia Piergentili, se contempló. Sin embargo, la doble inscripción de nombres de algunos integrantes en ambas listas -entre ellos, José Toro Kemp, mano derecha de la actual administración-, Piergentili desistió de competir, apelando a su “sanidad mental“.

Hasta la madrugada del lunes, la directiva de Quintana se sostenía como aprobada con un 90,3%. Hasta esas horas, se había escrutado el 89,3% (3.370) de los votos.

Bancada PPD-independientes: una bancada que genera reparos

El comité parlamentario PPD-independientes de la Cámara suma a 9 diputados. De ese grupo, sólo tres son militantes del PPD: Raúl Soto, Carolina Marzán y la exministra Helia Molina.

Lo anterior ha significado un problema en las huestes del Gobierno. Las relaciones entre los independientes amparados en el PPD con el Ejecutivo han generado asperezas en la comunicación legislativa entre ambas partes.

En entrevista con este medio, Piergentili esbozó sobre la piedra en el zapato que significa para el PPD la coordinación con los independientes. “El problema no es quién conduce un partido, sino que cómo ese partido se siente dentro de la toma de decisiones de un gobierno. En la Cámara de Diputados, donde tenemos muchos más independientes, eso se ha dificultado“, dijo en alusión al tema.

Eso sí, hizo la mención en en que en su condición de no parlamentaria, la forma de llegar a esos independientes es más difícil desde la dirección de partido.

Dicha característica podría ir en ayuda de Quintana. En su posición como senador, tiene la posiblidad de generar más cercanías en el Parlamento. Pese a ello, Piergentili aseguró que, en términos prácticos, esa problemática no mejorará: “Y no porque el senador Jaime Quintana no sea alguien muy capaz, sino porque allí hay una falla de estructura: tenemos una bancada grande, pero donde la mayoría no son militantes. La política, para bien o para mal, se ha parlamentarizado mucho”.