Rechazan reabrir investigación para esclarecer la muerte del poeta Pablo Neruda

Este jueves, se conoció que la ministra en visita de la Corte de Apelaciones de Santiago, Paola Plaza González, rechazó las solicitudes de diligencias de la partes querellantes para reabrir la investigación por la muerte del poeta Pablo Neruda, ocurrida en septiembre de 1973 en un clínica de la región Metropolitana.

La magistrada se hizo cargo de cada uno de las diligencias solicitada por la familia del poeta y el Partido  Comunista y las desestimó todas por considerar que resultan inconducentes, ya fueron realizadas y resultan tardías.

A modo de conclusión la ministra Plaza señala: “Como reflexión final, aun cuando la parte querellante Partido Comunista de Chile sostenga a fojas 4950 que “el Estado no ha empleado todos los medios a su alcance para averiguar la verdad, basta la revisión del proceso para constatar que todos los recursos disponibles se han puesto al servicio de la investigación, que ha incluido la intervención de expertos nacionales y extranjeros y el uso de tecnologías inéditas en la indagación criminal, más la obtención de relatos de testigos, pericias de diversa índole, búsqueda de documentos e informes policiales, entre muchos otros, abarcando cada arista propuesta por las partes para el esclarecimiento de los hechos”.

Cabe recordar que la entrega del informe realizado por expertos en el extranjero, que analizaron las osamentas de Pablo Neruda para dilucidar si es que se envenenó o no al poeta doce días después del golpe militar de 1973, fue el que encendió las alertas.

Se trata de una pericia a raíz de la bacteria “clostridium botulininum” hallada en su cuerpo en 2017. Consiste en un microbio que naturalmente no se presenta en la zona donde se descubrió: la boca, específicamente en un diente.

Producto de esto es que diversos medios pusieron sus ojos y micrófonos sobre Chile con el fin de seguir el caso en primera línea. Fue así como el New York Times aseguró que logró tener acceso a dos páginas del informe sobre la muerte de Pablo Neruda.

Según recogió el diario estadounidense, no se pudo distinguir si se trató de una cepa tóxica. Junto a esto, tampoco se pudo confirmar si la bacteria se le inyectó al poeta o si provenía de alimentos contaminados.

Sin embargo, el medio norteamericano apuntó a que existirían pruebas circunstanciales que podrían derivar en la conclusión de que sí lo asesinaron. Sin embargo, se trata de una suposición basada en casos similares durante la década de los 80.