La transición llegó al Liguria: local de Pedro de Valdivia bajó sus cortinas y dueño alista local vegetariano

Marcelo Cicali, dueño del Bar Liguria, anunció el cierre del tradicional bar restaurant de Pedro de Valdivia 047. Fue el propio dueño quien puso en cuenta de Instagram una imagen de un chanchito de plástico con anteojos negros y una mochila. Todo esto acompañado por una canción de José Luis Perales.

Dentro de las razones del cierre, Cicali asegura que la gente cambió sus compartimientos de consumo y sus horarios. “El cliente se va a la casa más temprano, ya no hay la noche que nos gustaba, pero creo que todo se está rearmando”, dijo a Ex- Ante.

A pesar del desafío que fue mantener el local durante el estallido social y pandemia, Cicali es optimista de cara al futuro. “La gente estuvo muy encerrada. Pero ya no es así.  Por eso creo que ha bajado mucho el delivery y subió la presencia de las personas en los restaurantes”.

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El dueño del Bar Liguria agrega que  “yo veo un panorama muy entretenido, veo nuevos barrios, nuevos bares que no están con esa carga que nos tocó transitar en la pandemia y el estallido. Veo una nueva generación de emprendedores en el rubro gastronómico que hacen que haya una oferta muy variada, muy potente”.

Según el citado medio, el cierre no será definitivo, ya que Marcelo Cicalli, espera abrir en dos semanas el clásico local en dos semanas con un enfoque totalmente distinto y probablemente vegetariano.

Un poco de historia

El Bar Liguria abrió sus puertas un 10 de agosto de 1990 en Avenida Providencia 2682, justo al lado de la tradicional perfumería Monix y debajo de la antigua Radio Minería. Se trataba de un local pequeño, sin más divisiones que la cocina y los baños; con un personal -entre dueños, cocineros y garzones- que no superaba la media docena.

“No prometemos ni lo mejor, ni la última tendencia. Quizá, por el contrario, encontramos afecto y dignidad en lo que comieron, bebieron, bailaron o cantaron nuestros viejos”, aseguran en su página oficial.

A eso agregan que “No somos el mismo boliche que abrió en 1990 tímidamente en avenida Providencia con Tobalaba, ofreciendo borgoñas y mechadas, porque todo cambia, todo se construye y revitaliza a través de los años.”