Bafona cumple tres meses en paro y acusa nula disposición del Ministerio de Cultura: “Ellos tienen mala gestión administrativa”

El pasado 24 de marzo el Ballet Folclórico Nacional (Bafona) comenzó un paro exigiendo mejores condiciones para sus trabajadores y que haya una homologación con sus pares de otros elencos, además de una mejora en las condiciones de su sede, ubicada en el -2 de un edificio del Ministerio de Educación (Mineduc), pese a que forman parte del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.

A tres meses de la paralización de sus actividades, Evelyn Hernández, representante de elencos artísticos del Bafona, asegura a The Clinic que “la mirada general es: absolutamente ellos (cartera de Cultura) tienen mala gestión administrativa. Tienen cargos que son problemáticos”.

La representante del Bafona explica que se realizó un primer paro el 6 de marzo hasta el 19 de ese mes, pero al ver que no se cumplían las cosas prometidas, retomaron otro paro el 24. En este tiempo afirma que “ha sido bien tormentosa la conversación con la autoridad o con las jefaturas porque no cumplen. Dicen ‘sí, salimos del paro’ y volvían a hacer lo mismo, entonces al final no pasó nada, no solucionaron nada”.

“Nosotros partimos en mayo del 2022 alegando todas estas cosas sin paro, digamos, con la jefa de Ciudadanía y Cultura, que es Marianela Riquelme. Ella es una exgremialista del Ministerio que lleva más de 20 años en el mismo servicio. Ella, según la subsecretaria (de las Culturas y las Artes, Andrea Gutiérrez), no comentó nunca esta problemática hasta enero del 2023, cuando nosotros lo destapamos y fuimos a dejar una carta a la subsecretaria para que escuchara este tema. Ahí se incumplieron actas que se habían tomado en acuerdo, por lo tanto nosotros decidimos hacer un paro”, explica.

Conversaciones del Bafona con el Ministerio de Cultura

Evelyn Hernández es una de las cuatro representantes de elencos artísticos del Bafona y ha participado de las mesas de conversación con el Ejecutivo. Según cuenta, desde el comienzo que las conversaciones fueron complejas, ya que intentaron contactarse con la subsecretaria Gutiérrez, sin embargo, “nos puso a la misma jefatura que habíamos tenido problemas antes, que es Riquelme a la cabeza, como mandatada por ella en las mesas”.

Tras un quiebre en las actas, solicitaron que se retirara Riquelme de las mesas y desde Bafona asistieron a exponer a la Comisión de Cultura de la Cámara Baja. “Ahí fue expuesto, apareció la subsecretaria y tuvimos la primera mesa con ella. Conversamos, nos entendimos, pero no llegamos a ningún acuerdo. La segunda mesa ya hicimos una especie de acuerdo en que íbamos a esperar que ellos hicieran un estudio de un proyecto que nosotros íbamos a mandar”.

Tras enviar este estudio pudieron contactarse por primera vez con el ministro Jaime de Aguirre y la subsecretaria Gutierrez en una mesa el pasado jueves 22, “donde se supone que esto se terminaba, íbamos a llegar a algún acuerdo y algo… pero no, llegaron con un poco de amenazas, de que cómo íbamos a estar todo el tiempo en paro, había un abogado ahí presente amenazando un poco con la Contraloría. Era prácticamente una amedrentación así como rápida a ver si volvíamos a trabajar a cambio de nada”.

-¿Cómo fue esa reunión con el ministro y la subsecretaria?

-El ministro nos dijo cómo se les ocurre que voy a solucionar yo de jueves a viernes una problemática que ustedes tienen desde el año 2006 y yo le digo a él que no es de jueves a viernes, que me parece una falta de respeto que nos diga eso, porque están las personas que han estado trabajando desde enero con nosotros y que no han llegado a nada. O sea, aquí la ineficiencia es de la Subsecretaría, no nuestra, en el fondo. Nos dijeron que no había nada, que teníamos que ver cómo solucionar esto, pero que no había nada y que no podíamos permanecer en paro todo el año.

Y ahí apareció un abogado que estaba en la mesa y que decía hay que tener ojo con la Contraloría, porque podría venir y prácticamente buscar resquicios y empezar a investigar por qué no están trabajando, por qué se les está pagando el sueldo. Fue como una amedrentación, como unas amenazas por debajo.

-¿Quedaron en hacer otra mesa?

-Eso fue una problemática porque fue una reunión muy fea y de verdad que fue muy como amedrentación, pero sin ninguna solución de por medio. Nada. Mucho enojo de ellos también, llegó enojada la subsecretaria. La cosa es que nos paramos los representantes y nos fuimos. (…) Y ayer fuimos a manifestarnos afuera de Ahumada y ahí salió el jefe de gabinete a hablar conmigo y me pidió disculpas en nombre del ministro por la reunión pasada, que la verdad es que ellos no sabían por qué había pasado eso con la subsecretaria, pero que ellos como ministro y gabinete se van a hacer cargo personalmente para solucionar nuestro tema y ya no va a pasar por las manos de la Subsecretaría de las Culturas.

-¿Cómo creen que va a ser ahora conversando directamente con el ministro?

-Nosotros no tenemos ninguna confianza en nada, porque de verdad que llevamos demasiado tiempo y son cosas que son tan legales, que es imposible no hacerlas… y no se hacen. Entonces, aquí no hay negociación de por medio, aquí son ilegalidades que hay con trabajadores y eso no lo han logrado subsanar. Y si no logran hacer eso, yo no sé qué es lo que podemos esperar, entonces no tenemos ninguna expectativa. Lo que sí sabemos que esto antes de que se deponga el paro, esto se tiene que solucionar.

Ellos han apagado el fuego con bencina. Cada reunión que tenemos con ellos es apagar fuego con bencina, entonces, yo espero que lo que me dijo ayer el gabinete del ministro sea real y sea rápido porque primero, ninguna gracia que la gente esté en paro tanto tiempo y segundo, que aquí hay, insisto, vulneraciones a derechos por años, entonces hay daño moral.

-¿Cuál es el requerimiento mínimo que tienen como Bafona para deponer el paro?

-El requerimiento mínimo para el paro es la homologación a los pares. Lo de la sede nosotros tenemos, porque sabemos lo que conlleva conseguir un lugar para ensayos y que hoy día está más encima como todo copado, sabemos que la sala de arriba se puede utilizar, todavía la Seremi no la cierra y la podemos usar para hacer el montaje, por lo menos de Víctor Jara que es la obra que nos urge como Bafona.

Homenaje a Victor Jara para por 50 años del golpe de Estado

Sobre la solicitud de homologación de los pares o elencos, la representante de elencos artísticos del Bafona explica que es “remuneración, descanso, horas de trabajo, etc”. “Hacemos exactamente lo mismo, ellos tienen un contrato con menor cantidad de horas y se les tiene que entregar -y que es legal- la planificación del año. A nosotros no se nos entrega nada, se nos entrega una vez al mes lo que va a pasar en el mes con modificaciones semanales”, explican.

“Nuestra forma de trabajo es estar siempre en el trabajo, nos cuesta mucho hacer vida familiar, nunca sé cuándo voy a tener libre, nunca sé cuándo me va a tocar de noche o de día. Y eso es lo que nosotros necesitamos, homologarnos a ellos en todos los sentidos, en todos los derechos. En el fondo es que no tengamos problemas cada vez que hagamos algo que es legal, como el descanso, por ejemplo”, expresa.

Para la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado el Bafona tiene contemplada la realización de un homenaje a Víctor Jara. Bajo el contexto actual hay incertidumbre sobre si esta obra se podrá realizar, debido a que con el paro no se han podido realizar los preparativos necesarios. “Eso es lo que más nos duele porque en el fondo teníamos esto planeado hace muchos años y primera vez que se da como el vamos para hacerlo”, señala Evelyn Hernández.

En ese marco, sostuvo que decidieron que lo importante era negociar para que “las autoridades solucionen porque en el fondo, y yo insisto en esto, si hubiese sido una negociación, quizás nosotros no estaríamos en paro y estaríamos negociando como lo hicimos con un montón de cosas que tuvimos que pelearlas”.

“Pero esta vez es distinto porque el caso es por descanso -lesiones que no se van a volver a recuperar por explotación laboral, así tal cual lo dijo la Mutual-, diferencias de sueldo con nuestros pares. Es una vulneración muy grande, con mucha injusticia en el fondo. Y lo otro es lo de la sede, que es un lugar insalubre y que ellos no han sido capaces ni siquiera de arrendar una sala. Si nosotros no hubiésemos llamado a la Seremi de Salud, estaríamos trabajando en ese lugar insalubre que hoy día se está lloviendo. Entonces no podemos deponer el paro, pese a la obra“, sostiene Evelyn Hernández.

Pese a esto, la vocera destaca que las jefaturas igual han avanzado y que “si bien es cierto necesita harto ensayo y aprendizaje de las cosas que vamos a montar y todo eso, el Bafona en dos meses puede montar una obra completa, por la calidad de profesionales que hay dentro, pero para eso necesitamos que la autoridad solucione rápido, ha dejado pasar mucho tiempo sin hacer nada”.

“A los integrantes de Bafona lo que le interesa hoy es poder tener la posibilidad de montar esta obra, pero no estamos dispuesto a recibir nuevamente chantaje en relación a lo artístico. Es súper simple la visión de un artista en relación a las obras que pueda hacer, sea cantante, sea bailarín, lo que sea. Siempre existe un chantaje desde lo que es el dinero o desde los beneficios legales o laborales, porque saben que él no quiere dejar lo artístico que está haciendo“, asegura.

Afirma que es lo que les ha pasado por 20 años, en que no se ha querido hacer paro por este “chantaje”: “Te mantienen sumido a eso que a ti te gusta tanto hacer, que no quieres parar. Entonces para nosotros ha sido súper fuerte el tener que estar tres meses sosteniéndonos en no hacer lo que nos gusta hacer, porque queremos hacerlo, pero no, esta vez no han resultado ni los chantajes ni nada”.

“La verdad es que nos pusimos con esa premisa antes, fue uno de los principios que agarramos, dijimos ningún chantaje con lo emocional, con lo artístico. Y estamos ahí firmes”, cierra la representante.