Tras el bochorno que significó la primera aventura del informe de Sistema Político en el Pleno de la Convención, en el que 93 de 96 de sus artículos fueran rechazados, este miércoles 13 de abril, la instancia insistirá con un nuevo paquete de normas tras semanas de negociaciones entre los colectivos de izquierda y centro izquierda.

Así, entre intensos tiras y aflojas en el ex Congreso, con reuniones sin actas en dependencias de la Universidad de Chile, con la derecha sentada en la mesa de negociación, pero sin incidencia, y con el abandono de la DC —encarnada en Fuad Chahín, único convencional de la tienda— de las conversaciones, a finales de marzo los comisionados desde INN hacia la izquierda llegaron a un acuerdo que, a horas de su votación, aún parece no convencer del todo a algunos sectores involucrados.

Entre los puntos que más ruido han provocado está la consagración de una única figura a la cabeza del Ejecutivo con un diseño de presidencialismo atenuado y un sistema Legislativo asentado en un bicameralismo asimétrico, que elimina al Senado por una Cámara de las Regiones.

Con todo, los sectores más críticos de estas normas afirman que el acuerdo consagraría un unicameralismo de facto, ya que la segunda cámara contaría con acotadas facultades y sólo podría tener iniciativa en sólo 17 materias de interés regional.

Ante este escenario y cuando las horas se acaban, todas las miradas están puestas sobre los convencionales del PS, cuyos votos serán claves para la aprobación o el rechazo del articulado. Esto, luego que en los últimos días diversos miembros de la colectividad han dado muestras de estar reconsiderando el acuerdo al que suscribieron hace dos semanas.

Con todo, si los convencionales del PS deciden votar en contra algunas normas, sus votos, junto con los del Colectivo del Apruebo y de la derecha —contrarios acérrimos a lo decidido—, sumarían 53, lo cual alcanzaría para bloquear la votación.

En este contexto, en The Clinic recopilamos las cinco claves que permiten entender  el voto socialista en el Pleno.

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Presión de Insulza y Elizalde: “La propuesta es un poco ridícula”

Desde que se dio a conocer la posible eliminación del Senado, incumbentes socialistas no escatimaron en criticar lo que habían acordado sus convencionales.

Una de las críticas más duras vino del senador y ex ministro del Interior, José Miguel Insulza, quien calificó la propuesta como “un poquito ridícula”. 

“Pagar una Cámara cuyas decisiones pueden ser totalmente inútiles es un desperdicio de recursos”, disparó el panzer sobre las acotadas facultades de la Cámara de las Regiones.

Y profundizó: “a mí lo que me molesta mucho es la reducción sustantiva de sus atribuciones, de su trabajo, de lo que hacemos (…). Pero aquí, lo que más me llama la atención de todo esto es que se diga que hay una Cámara de Diputados y una cámara de las regiones y que las dos legislan, pero cuando tiene una opinión la Cámara de Diputados, esa es la que prevalece. Es un poquito ridículo, porque uno siente que esa gente va a legislar sin ningún motivo”.

Para muchos, esta palabras del histórico socialista terminaron por dilapidar el acuerdo, diciendo que “es una entelequia puramente política para tratar de dejar contentos a unos y no hacerles demasiado daño a los otros, pero está mal hecha. Este senado que han inventado no sirve, francamente, para nada”.

A las críticas del Panzer, también se suman las que ha dado el presidente del Senado y saliente timonel del PS, Álvaro Elizalde, quien ha señalado que “más allá del tema del Senado, no comparto muchos aspectos de la propuesta. Creo que no se consagran los contrapesos necesarios para evitar una concentración del poder en pocas manos, lo que sería fatal para nuestro país si en el futuro emergiera un liderazgo de corte autoritario”.

En el mismo tono, el ex Segegob del segundo gobierno de Bachelet, criticó que “la propuesta de Sistema Político no constituye un bicameralismo asimétrico, sino un unicameralismo encubierto. Las competencias que se le entregan a la Cámara regional son mínimas”.

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Telefonazos del ex presidente Lagos

Pero las molestias socialistas también llegaron desde lo más alto. El ex presidente, Ricardo Lagos, habría tomado el teléfono para contactarse directamente con algunos convencionales del Colectivo, como el vicepresidente adjunto de la Asamblea, Tomás Laibe.

El ex mandatario le habría expresado directamente sus inquietudes respecto al acuerdo que busca eliminar el Senado. Esto, a juicio del ex presidente, haría perder un contrapeso importante con el Poder Ejecutivo, consignó La Tercera.

En esa línea, según el mismo medio, el ex presidente ha conversado en reiteradas oportunidades con el coordinador de la comisión de Sistema Político y pieza clave de las tratativas, el convencional socialista Ricardo Montero.

Pero las inquietudes del ex presidente no sólo las ha manifestado en privado, ya que, en una entrevista con Radio Duna, aseveró que “los países no nacen en un instante, es un largo proceso. Si de algo está orgulloso Chile es de su historia constitucional (…). Ésta estableció el sistema de dos cámaras desde que nacimos, porque estábamos todos mirando a Estados Unidos”.

“Ya en la Constitución de 1828 estaban las dos cámaras, y eso siempre fue así. El senado fue parte de nuestra historia”,  agregó. 

Para luego sentenciar, que la eliminación de la cámara alta “es un grave error”, y que el argumento de que sería un obstáculo para la tramitación legislativa, es “un poquito falaz (…). Cuando se planteó la posibilidad de eliminar el Senado dije, ¿y qué va a pasar con las regiones? Porque las regiones tienen que hablar”.

En la ocasión, el ex mandatario también confidenció, al referirse a sus contactos con convencionales socialistas, que “cuando hablo con algunos de ellos, estoy acostumbrado a que me digan ‘perdón, Presidente, usted no sabe cómo está el clima acá adentro’”. 

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Titubeos a última hora

Ante este panorama, y a diferencia de lo ocurrido en semanas anteriores, no son pocos los convencionales del colectivo socialista que han optado por manifestar públicamente sus reparos sobre el acuerdo. Algo que no sólo sorprendió sino que hizo tener esperanzas a quienes ven una posibilidad de reponer el bicameralismo en los descuentos. 

En esa línea, fueron significativas las declaraciones del convencional César Valenzuela, quien señaló que el acuerdo “no está escrito sobre piedra y es susceptible de ser mejorado”. Agregando que  “hay un desequilibrio en el sistema, ya que no es propiamente asimétrico”.

Si bien aseguró que el texto suscrito se respetará  “cien por ciento en cuanto a sus ideas esenciales”, sí hay margen de una eventual negociación cuando se pase al articulado. 

En concordancia con esas declaraciones, ha trascendido que hay intenciones de parte de miembros del Colectivo para dotar de mayores atribuciones la Cámara de las Regiones, ya que, desde la colectividad resienten la ausencia de facultades como la revisión de las acusaciones constitucionales, la renovación de los estados de excepción y el nombramiento de autoridades.

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Fractura con el PC

¿Y qué pasa en el flanco izquierdo? Las dudas de los socialistas no han dejado indiferente al PC quien ven con preocupación cómo el acuerdo corre riesgo de caerse, por lo que no han dudado en acusar a los socialistas de reincidir.

“Es la segunda vez que los convencionales del PS participan de un acuerdo transversal y sería lamentable que en esta oportunidad no cumplieran con lo pactado. La política implica honrar la palabra, y si nuevamente no se honrase la voluntad expresada con claridad por parte de ellos y ellas, estarían dando una malísima señal en relación a los cambios que deben prosperar en Chile sobre el sistema político”, dijo a Emol el convencional Marcos Barraza (PC), quien es señalado como uno de los principales articuladores del trato al interior de la comisión de Sistema Político.

También, las críticas de Barraza apuntaron a las presiones de las que han sido objeto los socialistas de parte de los altos dirigentes de su partido, a las que atribuye el titubeo a última hora.

“Es el coro del senador Elizalde, del senador Insulza, del ex presidente Lados, de sectores de derecha, sectores neoliberales que están presionando con mucha fuerza”, sentenció.

De parte del Colectivo Socialista, en tanto, respondieron sin escatimar en dureza, ya que, en entrevista con La Tercera, el convencional Maximiliano Hurtado, sentenció: “Me parece que el PC sigue encapsulado en una lógica de disputa entre el Congreso de Diputados y la Cámara de las Regiones”. 

En ese sentido, el convencional complementó su punto: “El encapsulamiento del PC no ayuda a proponerle a Chile el mejor sistema político posible, respetando el acuerdo que tenemos, pero perfeccionándolo y entendiendo que nuestra labor es proponerle a Chile el mejor proyecto posible dentro de esta Convención”. 

Críticas a Montero y una eventual solicitud de renuncia

Las críticas de Barraza podrían no quedarse ahí, ya que, según señaló Ex-Ante, las molestias del comunista también sería compartida por otros grupos de izquierda al interior de la convención, quienes estarían analizando pedir la renuncia del socialista Ricardo Montero a la coordinación de la comisión de Sistema Político.

No obstante, Montero cuenta con el respaldo de grupos que van desde la centro izquierda hasta la derecha al interior de la comisión, ya que, si bien se reconoce que las negociaciones por el acuerdo que hoy se enfrentará al Pleno han sido arduas, fuera de micrófono se comenta que el abogado socialista “ha hecho lo mejor que ha podido”, y se atribuyen los tropiezos de la comisión a la naturaleza compleja del acuerdo, junto con las visiones disímiles que se encuentran al interior de la instancia.

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