Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

TV

15 de Diciembre de 2023

Juan Carlos Valdivia analiza el plebiscito constitucional: “Este país es bastante más facho de lo que se pensaba”

TV+

El animador de TOC Show conversó con The Clinic sobre cómo ve la televisión actual. Reflexiona y advierte que el espacio tiene mayores restricciones y además entrega su visión sobre el escenario que enfrentará Chile en medio del plebiscito constitucional.

Por

Juan Carlos Valdivia lleva más de tres décadas en distintos espacios televisivos. Sin embargo, admite que en los últimos cuatro años se ha sentido particularmente sorprendido por los temas que se abordan en la industria. Tanto el estallido social, como la pandemia y el proceso constitucional, han sido los principales focos de la televisión durante este tiempo.

“Yo creo que a la tele se le pide mucho más de lo que es”, asegura Valdivia en conversación con The Clinic. “La vocación de la televisión para poder sobrevivir es entretener, de ahí también que se le critique y se le juzgue tanto”, añade.

De hecho, para el animador de TV+, actualmente la televisión tiene una serie de restricciones que otros medios no tienen, lo que hace la competencia más dura.

“En el CNTV tú puedes reclamar si algún contenido no te gusta y pueden multar al canal. La TV tiene una fiscalización y control mucho mayor que cualquier otro medio y eso la pone en desventaja en este mundo moderno, donde la gente accede a través de internet a lo que quiere ver, y le es difícil competir con medios que tienen absoluta libertad por mostrar lo quieran”, reflexiona.

-En los últimos años, Chile ha vivido varios momentos relevantes, que hicieron pasar de una TV muy light a una donde la contingencia es pieza fundamental. ¿Cree que la TV ha estado a la altura de estos procesos que ha enfrentado el país?

-Yo creo que sí. La televisión ha hecho un esfuerzo de tratar de entender cambios que son demasiado rápidos. El mejor ejemplo es lo que ha pasado en el último tiempo. Después del estallido hubo una mayor conciencia de entregar contenido. Salió una entretención más liviana o más definida como entretención pura, sacando del aire un montón de programas, personajes y rostros.

Pero esta cuestión es cíclica. Durante la pandemia, por ejemplo, hubo toda una cosa donde se decía ‘oh, queremos una humanidad mejor, queremos ser mejores personas, aprovechemos esta oportunidad, etc.’ ¿Y ahora en qué estamos de nuevo? En la entretención pura y dura, en los realities, todo lo que antes no estaba bien valorado volvió.

Eso te demuestra que la televisión es cíclica, como todo. Estamos pasando sin mucha transición de un paso a otro y la televisión no es ajena a eso, trata de seguirle el ritmo.

-Pese a la competencia, la televisión sigue siendo una de las principales formas de entretención en Chile, según un estudio de kantar ibope, sin embargo, sus audiencias cambiaron. ¿Cómo analiza ese cambio?

-Yo creo que el público de la televisión envejeció, y la tele también fue envejeciendo con ellos. La gente joven consume otras plataformas, la popularidad de TikTok te lo deja claro. Hoy es raro encontrar a alguien menor de 30 que esté viendo tele, a menos que sean los realities, que son dirigidos a ese público. Pero aun así Gran Hermano fue más visto en Pluto TV, en el celular. 

Claramente, hay un cambio de paradigma, y el público que hoy consume tele es al que le complica un poco el internet o no le gusta estar frente al computador y prefiere la tele en la cocina o en el comedor con la familia. Y esa gente ya es mayor, hablamos de 45 a 50 años para arriba. Entonces, la TV está llegando a un público mayor.

-La televisión envejeció, y sobre ese punto, ¿qué pasará con los animadores, considerando que hoy no hay una generación de relevo? ¿Cuál crees que es el futuro que tendrá esa figura?

-Bueno, yo creo que los animadores tienen menos importancia de la que tenían antes. Antes, los programas se hacían en torno a una figura, a un personaje, una persona popular en radio, que tenía gran arrastre y era muy querido. Hoy día, los animadores son más funcionales a un proyecto y, por lo tanto, a un formato. Por ende, cualquiera que esté en condiciones y tenga la capacidad, lo puede hacer.

Antes, contratabas a un rostro y a ese rostro le hacías un programa de televisión. Y, probablemente, como decía, ese rostro arrastraba gente que lo seguía desde mucho tiempo. Hoy día no. Hoy día los productores, los directores, arman un programa y buscan al conductor adecuado para eso. Si es necesario levantarlo de la competencia, lo levantan de la competencia, porque tampoco hay mucho semillero, no hay programas juveniles, no hay programa donde se formen.

Yo creo que el menor de los animadores hoy día debe tener entre 40 o 45 años. Pero animadores juveniles, como había antes de 18 o 20 años, ya no existen. Además, para ese público, los cabros hacen sus propios programas en streaming y transmiten por mil plataformas distintas. Hoy día, cualquiera que tenga un celular con buena pantalla, puede transmitir un programa y hacer contenido.

La televisión corre por una senda que quedó obsoleta, en términos de que no tiene libertades ni espacio para poder crecer. Al contrario, lo que ves en la tele tiene mayor restricción y castigo que en otros medios, donde puedes ver lo que quieras.

Juan Carlos Valdivia y los matinales: “El Presidente tiene toda la razón…

El pasado jueves Juan Carlos Valdivia también respondió al aire en su programa Toc Show a los dichos del presidente Gabriel Boric, quien cuestionó a los matinales por mostrar sólo lo negativo. El mandatario aseguró que “las buenas noticias no tienen rating“.

“El Presidente (Boric) tiene toda la razón. Las noticias buenas no marcan. La gente tiene esta cosa media masoquista y además hay un disfrute en la violencia, que es muy raro. De hecho, las películas más taquilleras siempre son violentas”, comenta el animador.

A su vez, recalca que “lo policial, la crónica roja siempre ha sido vendedora, los diarios también lo utilizan para las portadas porque atrae. Hay un disfrute en ver violencia. Pero hoy hay una cobertura desproporcionada”.

En esa misma línea, sostiene que “eso me habla de que la TV está obligada a tener objetivos de cortos plazos, en términos de resultados. Si esto no marca pasamos a otra cosa y si marca, le damos y le damos. ¿Finalmente quién dirige los contenidos de la tele? Yo creo que lo hace la audiencia, porque la televisión tiene que autosustentarse de la sintonía que promete tener. Y si la sintonía va por ese lado, ¿qué te puedo decir?”.

Definiciones en torno al plebiscito

-La franja electoral en este segundo plebiscito ha sido duramente criticada por el uso de insultos por ambos lados. ¿Cuál es su opinión al respecto? ¿Cómo calificaría esta campaña?

-Yo creo que han sido súper desleales y deshonestos con el motivo del plebiscito. Nadie habla realmente el texto y poco han dicho de eso. Pero ahí también volvemos a lo mismo, ‘ah, que es fome’. La gente prefiere no informarse, prefieren el eslogan, prefieren el camino corto y fácil. Y ahí también somos responsables todos, porque en el fondo no estamos elevando el nivel de la discusión. Y el debate lo estamos convirtiendo en algo emocional más que racional, en frases cortas que quedan o frases de cortes publicitarios como se usaba en otra época.

La gente no quiere que le expliquen tanto, que le hablen mucho, ‘dígame, qué tengo qué hacer’. Entonces la engañan, no le hablan de lo que trae el texto, le hablan de cosas que no tienen nada qué ver con lo que se va a hacer en el plebiscito. El plebiscito no es una evaluación del gobierno. No es otra cosa que si te gusta o no la constitución que te están proponiendo, pero te lo disfrazan de seguridad, de cualquier cosa.

Hay mucha gente que le da lata, pero va porque es obligatoria. Si no fuera obligatoria no tendría la convocatoria que tiene.

-De acuerdo a varios sondeos, parece haber menor intereses de la población en este proceso, incluso menos conocimiento sobre lo que trata. ¿Faltó mayor información o cambiaron las prioridades de la gente?

-Hay varios análisis bien interesantes al respecto. Yo creo que aquí hay un divorcio entre la realidad social y el Chile que surgió en el último tiempo, versus los analistas y los teóricos y los intelectuales que no lo saben leer, interpretar o ver. Lo ven desde el libro, desde la academia. Entonces, hay una disociación, creo yo, y un divorcio, entre lo que es la realidad social chilena y lo que algunos creen que debería ser,

Algunos se sienten un poco iluminados y dicen ‘esto lo que hay que hacer para solucionar los problemas que tenemos’. Pero y ¿la gente estará de acuerdo? ¿Es lo que está esperando? Yo creo que, de hecho, este país es bastante más facho de lo que se pensaba. Hay un tercio, súper duro, que es una base del pinochetismo, que sigue ahí, y que va a frenar cualquier cosa.

(Hay algunos grupos) que lo han hecho súper bien, sobre todo los sectores de derecha. Interpretan a la gente que, en general, tiene hartos prejuicios también y como ideas preconcebidas respecto a lo que son ciertos movimientos. Creo que hay un manejo comunicacional super complejo, interesante al mismo tiempo, pero que tiene como objetivo la manipulación. Está clarísimo eso, o sea, no, no se puede discutir eso.

Y no es un fenómeno local, es un fenómeno mundial. La masa es muy fácil de engañar y es producto de que los medios son cómplices de no darles lo que es pensamiento crítico.

-Sin importar el resultado del domingo, ¿qué rol cree que tendrá la TV a partir de entonces en esta materia?

Uno, creo que este plebiscito no tiene la misma efervescencia que el anterior; dos, los que pensamos que son temas relevantes y trascendentes para el país, somos re pocos al final. La verdad es que la gente está más interesada en quién terminó con quién, quién está pololeando con este otro.

Yo digo, ‘¿esto qué es? ¿Qué me puede importar a mí?’. Por eso queda la sensación y la duda. ¿Esto es lo que está demandando la gente, pidiendo estos contenidos, o es la propuesta que hacen para que la gente se dedique a pensar en otras cosas? No tengo resuelto ese tema.

Notas relacionadas

Deja tu comentario